De acuerdo con lo informado a EL TIEMPO, el sumario penal que se instruye por estos episodios -sucedidos ayer jueves poco antes del mediodía en una vivienda situada sobre la calle Darhanpé de Azul- quedó caratulado como "lesiones leves agravadas por el vínculo, amenazas agravadas y resistencia a la autoridad, en concurso real de acciones".

La mujer que hoy viernes recuperó la libertad luego de lo que había sido su arresto un día antes, en el marco de un procedimiento llevado a cabo por policías del Comando de Patrullas de Azul, fue identificada como Débora Elizabeth Bermay, de 30 años de edad.

Asistida desde una Defensa Oficial, en esa audiencia desarrollada en sede judicial a tenor de lo que establece el artículo 308 del CPP había optado por no declarar.

La causa penal que se iniciara tras su arresto quedó en un principio radicada en la UFI 1 que en los tribunales de Azul está a cargo del fiscal Marcelo Fernández.

Pero posteriormente, al ser declarado a dicho proceso como "de flagrancia", esas actuaciones fueron remitidas a la UFI 9 a cargo de la fiscal Laura Margaretic, según lo señalado a este diario por voceros judiciales.

Con una horquilla

Los hechos por los que Bermay había sido aprehendida se remontan a lo sucedido, ayer jueves poco antes del mediodía, en el interior de la referida vivienda situada sobre la calle Darhanpé de esta ciudad.

Alrededor de la hora 11, en momentos que Bermay estaba con su pareja, a ese joven de 22 años de edad -según lo referido en un reporte dado a conocer desde el CPA- comenzó a increparlo por una supuesta infidelidad y amenazó con matarlo.

Posteriormente, cuando ambos se encontraban en el patio del inmueble, utilizando una "horquilla de tres puntas" Bermay lo hirió con esa herramienta.

En un principio intentó aplicarle un golpe a su novio, quien de manera instintiva y a modo de defensa puso una de sus manos entre la horquilla y su pecho.

En esas circunstancias, el joven sufrió una lesión en su mano derecha. Una herida de tipo "punzante" que -según lo referido en estas actuaciones penales- atravesó la palma de una de sus manos.

Dicha lesión fue calificada legalmente como "leve" una vez que el novio de Bermay tuvo que recibir asistencia médica.

La situación derivó en que, mediante un llamado al 911, fuera convocado personal policial para intervenir en lo sucedido, por lo que agentes del Comando de Patrullas de Azul se hicieron presentes en la casa convertida en escenario de este caso de violencia, ocasión durante la cual la imputada resultó aprehendida.

Para cuando los policías ingresaron a la vivienda donde estaban la mujer y el joven herido, Bermay continuó amenazando de muerte a su pareja. E hizo lo propio con los efectivos del CPA.

"Te voy a matar, voy a prender fuego la casa y los autos", le expresaba -se refiere en las actuaciones penales- a su pareja, a quien había lesionado instantes con la horquilla.

En tanto, a esos policías que finalmente lograron reducirla y arrestarla la mujer los insultó y amenazó de muerte, utilizando para ello también la mencionada horquilla.

"Milicos putos, los voy a matar también", se indica en el sumario que en ese entonces Bermay refería.

En un principio se resistió al accionar policial, ya que no acataba la orden para que depusiera su actitud y colocara sus manos sobre una pared. Y continuó evidenciado ese agresivo comportamiento hasta que, finalmente, los agentes del CPA pudieron esposarla para llevarla a sede policial, donde permaneció hasta lo que fue su traslado hoy viernes a sede judicial, para que -después de ser indagada y negarse a declarar- se dispusiera que recuperara la libertad.