"Las PASO a nivel local se van a definir de acuerdo a cómo se defina en Provincia y Nación y yo creo que falta muy poco para saber cuáles son los sectores que van a competir. En cuanto a los vecinales, no tienen gran problema, porque van a definir sus candidaturas localmente", aseguró Alejandro Vieyra, en una entrevista con EL TIEMPO.

En el ámbito local, al panorama pre-electoral "lo veo muy atomizado. Hay lanzamientos, pero lo importante es visualizar no sólo los lanzamientos, sino en qué lugar y cuántos son, porque no creo que abran listas para todos. En Juntos hay muchos espacios, como el Peronismo Federal, la Coalición, la UCR, el vecinalismo, el PRO de Ritondo, el PRO de Santilli, también está la gente de López Murphy".

Con respecto al partido que representa, Nuevo Azul, indicó que "nosotros estamos dentro de Juntos porque firmamos una alianza electoral. Y hasta que se cierren las listas para las PASO, estamos ahí adentro. Eso lo firmó nuestro partido en el 2021 y finaliza con el cierre" de las elecciones primarias.

Vieyra, en ese contexto, aseguró que, en el partido vecinalista que integra, "lo que nos interesa es receptar lo que está pasando en el distrito. Queremos ir desde el territorio hacia arriba; por eso es un partido vecinal".

Admitió que "hay quienes no creen en el vecinalismo, pero tenemos, por ejemplo, el caso en Tres Arroyos, donde el vecinalismo es gobierno. La cuestión pasa más bien por la propuesta. Y más en ciudades chicas, donde el mano a mano es más sencillo. Un partido vecinal se hace difícil en las grandes localidades, donde hay muchos habitantes".

Sobre un acercamiento de Nuevo Azul con sectores del justicialismo, el actual concejal afirmó que "no se está hablando nada de eso. Estamos enfocados en una tarea de equipo y estar cerca del vecino. Esa es la primera instancia. No se habla de cuestiones electorales o de temas que obviamente se van a definir. Estamos caminando, hablando con los vecinos, escuchando, atendiendo las demandas y, sobre todas las cosas, armando los equipos. Este es un año electoral y nosotros somos un partido político. En otras oportunidades, se definía todo con mucha antelación y la puntada final se daba sobre la hora. Ahora, todo se va a definir sobre la hora. Inclusive las candidaturas".

Con los vecinos "el contacto es constante. Nos acercamos, nos llaman mucho y, cuando surge alguna inquietud, tenemos representación en el Concejo Deliberante -con la concejal Paola Ficca y Jessica Córdoba que está acompañándonos desde la secretaría- y elaboramos los proyectos para darle visibilidad. A muchas de estas cosas no se les está dando atención. Y nosotros lo que damos es visibilidad y atención. Esperamos que, a los vecinos, a partir de estos proyectos, los atiendan y no los castiguen, por el hecho de que vienen a hablar con nosotros. Esperemos que eso no suceda", indicó.

Con respecto a los barrios, aseguró que "hay muchas cuestiones, desde lo macro a lo micro. El tema es la presencia del Estado municipal. Es lo que más se reclama. Uno puede tener una contestación de un tema puntual: sí lo podemos hacer, no lo podemos hacer o esperar, pero no la falta de atención al tema. No escuchar. El famoso 'nos clavan el visto'. Eso es lo que estamos viendo en el último tiempo. Hay que escuchar al vecino y darle respuesta. El vecino tampoco pide tanto. Está pidiendo atención en temas puntuales que puede resolver el municipio, con gestión. Si se gestiona, se está al frente, se tiene vocación, las ganas y se le pone horas de trabajo a eso, seguramente el tema avanza. Lo primero que quiere el vecino es que se lo escuche y, a partir de eso, se siente contenido. Esa es la tarea del funcionario público: tiene que estar a disposición del vecino. Pero si no se tiene vocación, no se puede ejercer la función pública. De lo contrario, empiezan los problemas, cuando las problemáticas le resbalan al funcionario. No es así. Le tiene que doler lo que ocurre, no es el problema de otro".

Al ser consultado respecto a su mirada sobre la gestión comunal desde el momento en que presentó la renuncia, Vieyra expresó que "veo una gestión deteriorada en ese aspecto: la falta de comunicación con el vecino. Y muchas cuestiones que tienen que ver con un aprendizaje de muchos que lo toman casi de salida, en el octavo año de gestión, y no hay mucho tiempo para aprender".

En cuanto a las declaraciones del intendente Bertellys sobre el resultado de la última elección, Vieyra aseguró que "tiene un desconocimiento total de lo que es el tema electoral. Tuvo cuatro concejales: los dos del PRO fueron en la lista con él, Paola Ficca y yo fuimos en la lista con él. Que él pierda concejales no implica que sea por una elección que él perdió, porque ahí se plebiscitó la gestión. Yo tuve que poner la cara, como la puse en todos esos años que él no lo hizo en el municipio; inclusive durante la pandemia. Eso la gente lo sabe. En esa campaña electoral, el mayor problema que nosotros teníamos que explicar, además de que Servicios Públicos era un desastre en ese momento, era la ausencia del intendente. A nosotros nos reprocharon eso durante toda la campaña. Si tenemos que analizar esa performance electoral, en la que se perdió por unos pocos puntos, nosotros padecimos mucho esa ausencia del intendente, en esos años; el mano a mano con el vecino, que sí lo teníamos en el equipo de gobierno".

En cambio, "ahora [Bertellys] se quiere justificar y cargar la culpa porque a él le gusta victimizarse y echarle las culpas a los demás de sus problemas. Los problemas de él son de él y que se haga cargo. Yo me hago cargo de los míos". Sobre ese punto Alejandro Vieyra aseguró que "nosotros siempre evaluamos nuestra tarea, en la que hay aciertos y errores, y de los errores aprendemos, pero no hay que trasladarle el problema a otro. También le echa la culpa al Concejo Deliberante porque no le aprobaron las tasas. Esas tasas eran aprobables si se hablaba con los distintos espacios. Es la primera vez, luego de siete años, que no le aprueban el presupuesto. No es casualidad: es por falta de iniciativa en la gestión. Lo primero que hay que tener es humildad. A mí me costaba cerrar el presupuesto un mes y medio, con mayoría en el Concejo, pero era un trabajo de mucha dedicación y escuchar cuáles eran las exigencias de unos y otros".

Los vecinos naturalmente reclaman por la prestación de los servicios, más aún cuando se incrementa el valor de las tasas. "Si fuera por la prestación de servicios, el vecino no tendría que pagar ninguna tasa. Pero hay un punto intermedio, que se puede hablar, porque se puede trabajar como lo ha hecho Olavarría, sobre la base de la inflación, que es lo más normal. Pero es algo que tiene que hacer el Ejecutivo y perdió su oportunidad. Pero no puede echarle la culpa al Concejo Deliberante por eso", dijo el concejal de Nuevo Azul.

En el contexto de un año electoral, "los que se viene por delante, son muchos desafíos. Y hay que afrontarlos íntegramente y, sobre todo, con humildad, que es lo que no se ve hoy en el intendente".

En ese sentido, Vieyra dijo que "por ejemplo, se debe afrontar cómo se va a pagar a proveedores, a prestadores; es decir, tener un año sin sobresaltos, porque todo aumenta. Ese es un desafío. Otro, es la exigencia que tiene el vecino. Y este es un año en el que va a exigir el doble, porque se viene con retraso en la atención. Decir que a partir de octubre empieza un nuevo gobierno porque no pudo hacer lo que quería, según sus palabras [de Bertellys], bueno, ya van seis meses. Las expectativas las generó él y tiene que responder a lo que él mismo creó como expectativa".

Pero, ¿cómo lo ve al jefe comunal quien fuera por años su jefe de gabinete? La respuesta no tarda en llegar: "Yo lo veo como un pato rengo y no sabe que está rengo. Es lo peor que a uno le puede pasar en la función. Cuando uno se cree sus propias mentiras, es lo peor que puede ocurrir: no conocerse a sí mismo, no conocer sus limitaciones. Y hay un tema: aduladores en el poder, sobran. Es un grave problema si no se lo advierte. El adulador no tiene nada que perder. Nosotros recibimos aprietes de los colaboradores del intendente. Que sigan así, que les va a ir bien", confirmó Vieyra.

"Cuando se rodea de obsecuentes, le hace mal al que está gobernando. A ellos no les interesa que le vaya bien, sólo quieren subsistir. Y al entorno lo hace uno, no hay que echarle la culpa al entorno", dijo, para agregar que "de los aduladores que le vi, no le funcionó nadie. Es algo que no suma".

Desde su óptica, "el Estado puede aportar mucho, pero primero se tiene que sanar. Para acompañar, el Estado tiene que estar sano. Y los primeros que tienen que estar sanos son los que gobiernan. A partir de ahí se pueden plantear políticas. Todos los candidatos ahora van a decir que hay que juntarse. Sí, hay que hacerlo, pero de verdad. El Estado municipal, así como está, con la atomización que va a haber, el que gana, solo, no va a tener ninguna posibilidad de gobernar. Y ahora está mucho más difícil que en el 2015, luego de la pandemia y con el actual contexto económico. Al que le toque gobernar, va a tener que cambiar su 'chip'; no hay líderes ni caudillos, no hay forma. Es consenso puro; de lo contrario, no puede avanzar".

Al analizar esta cuestión, Vieyra precisó que "no hablo de un gobierno compartido, pero sí de un gobierno integrado con las demás fuerzas. Lo que yo vi desde adentro, nosotros como equipo [Nuevo Azul], lo que vemos ahora y lo que se viene, no hay ninguna posibilidad cierta de evitar el consenso. Le va a tener que pedir al que pierda que le cubra Economía, o Desarrollo Social; y no porque no tenga funcionarios, sino para que se integren las fuerzas. Y generar confianza, obviamente".

Por eso, para quienes conforman Nuevo Azul, "no se puede pensar un municipio a corto plazo, sino un municipio que le dejamos a la nueva generación. Hay que comprometerse con la sociedad". Vieyra señaló al respecto que "el municipio tiene que caminar y gestionar. Si en los ministerios no te conocen, no hay forma de accionar. Eso implica mucha dedicación y trabajo".

En relación con la función, el actual concejal aseguró que "cuando se está en el Ejecutivo municipal, es responsabilidad del Ejecutivo lo que pasa en la ciudad, desde el tema de la inseguridad hasta las problemáticas educativas, todo. Hay que hacerse cargo. Eso implica no tomarse vacaciones -o pocas-, dormir poco, avejentar, ir al médico más de lo frecuente, pero esa es la vocación de servicio. Si no se tiene eso, no se sale de las situaciones que son muy complejas. El vecino depende de nuestra función. ¿Cómo se puede dormir cuando se tiene el dinero suficiente para arreglar el techo de una escuela, y ese techo se cae? A eso me refiero cuando digo que la gestión te tiene que doler: ¿Cómo puede estar pasando esto? En lo municipal, hablo de la cabeza, no del resto. ¿Cómo se puede estar feliz con las cosas que ve que pasan?".

Luego avanzó sobre un punto álgido. "Nosotros hacemos reuniones con vecinos y luego les dicen a esos vecinos que, si siguen viéndonos, no les van a mandar más el regador". Por ello, afirmó Vieyra, "un gobierno de estas características no se banca públicamente esto. A los vecinos los estamos conteniendo nosotros. Sabemos que es finito, que se termina pronto, este tipo de persecución. Con los pocos movimientos que hemos hecho desde nuestro espacio, que es un espacio chico en relación a todo el armado político que hay en el distrito, se ve que al intendente le duele lo que hacemos nosotros, no su gestión. Puede perseguirnos la vida entera, pero eso perjudica a los vecinos. Nosotros vamos por lo positivo".

Con respecto a la función que desempeñó en la comuna, Vieyra admitió que "todo lo que trabajamos ese tiempo, no es que lo borramos con el codo. Estamos orgullosos de lo que hicimos y aprendimos de nuestros errores. Algunos piensan que estoy 'despechado' y no es así. En lo que no estamos de acuerdo es en la forma de manejarse el intendente estos meses. Nos dicen 'están criticando el gobierno que fueron'. No. Estamos diciendo que no estamos de acuerdo cómo se están manejando ahora. También le tenemos que decir que todas las obras que enumeró [en el reciente discurso ante el Concejo], no gestionó ninguna. Todo eso se hizo estando Guillermina Bellocq en Obras Públicas y en Gobierno conmigo. Todas las gestiones en Nación y Provincia. Quizás le sea difícil decir que todas esas obras las gestionó alguien a quien ahora no quiere saludar en el Concejo. Pero al menos debe reconocer a todo el equipo de Gobierno y de Obras Públicas de ese momento. La gente ya no le cree. No se puede vender algo como tuyo cuando no lo es. Y es importante que toda la comunidad lo sepa. Él no ha gestionado nunca nada, en ese aspecto".

Sobre el trato recibido por parte del intendente luego de la renuncia a la jefatura de Gabinete, Vieyra aseveró que "no me parece correcto que haya querido cargar, sobre mi cuero, su propia ineficiencia. Decir que, de ahora en adelante, empieza un nuevo gobierno, a costilla mía. Todo lo que vino después de eso, es lo que hoy a nosotros nos motiva a trabajar el triple. Vamos a demostrarle a la gente quién es el que estaba equivocado. Y lo vamos a hacer trabajando".