Un pedido de sobreseimiento para un joven que está preso por la comisión de varios y graves hechos de violencia de género y por abusar sexualmente de la víctima de esos episodios fue rechazado "por improcedente" desde la Cámara Penal de Azul, a través de una resolución donde también quedó confirmado que el imputado irá a juicio.

Desde el 2 de octubre del año pasado el considerado autor de todos esos ilícitos permanece privado de la libertad, luego de que aquel día agentes policiales lo arrestaran en Azul, tras constatarse que había vulnerado una perimetral que estaba vigente y le prohibía mantener cualquier tipo de contacto con su ex pareja, la joven a la que -de acuerdo con lo investigado- convirtiera en la víctima de diferentes ilícitos por los que ahora quedó confirmado que será sometido a un debate oral y público.

Identificado como Matías Iván Vera y de 26 años de edad, en ese sumario penal donde figura procesado le atribuyen la autoría de varios hechos configurativos de los siguientes delitos: coacción y desobediencia en concurso real de acciones; abuso sexual con acceso carnal y abuso sexual gravemente ultrajante en concurso real de acciones; lesiones leves agravadas y amenazas; coacción y dos episodios de desobediencia, también "en concurso real de acciones".

En lo resuelto desde la Alzada departamental que integran los camaristas Damián Cini, Carlos Pagliere (h) y Agustín Echevarría, al ratificar la elevación a juicio de esta Investigación Penal Preparatoria se consignó también que todos los delitos que le imputan al encausado concurren "en forma real, en el marco de un proceso de violencia familiar que tiene como víctima a su ex pareja".

Juan José Suárez, el titular del Juzgado de Garantías 3, había sido quien ordenó la elevación a juicio de estas actuaciones penales, una decisión que semanas atrás ratificaron los jueces que integran la Cámara Penal.

Lo resuelto en esta segunda instancia fue en respuesta a una apelación que no prosperó, la cual en favor del encausado había sido formulada desde la Defensoría Oficial que lo representa en esta investigación penal ya concluida.

A ese expediente, desde la Fiscalía especializada en Violencia Familiar y de Género -la UFI 1-, lo había instruido el funcionario judicial Marcelo Fernández.

"Las pretensiones defensistas no pueden prosperar y la causa debe transitar a la etapa subsiguiente. Esto es, a un juicio oral y público", había escrito en lo resuelto Agustín Echevarría, el primero de los camaristas en votar a la única cuestión planteada para posteriormente, de manera unánime desde la Alzada, rechazar -al igual que sucediera en una primera instancia- la solicitud de sobreseimiento para el joven imputado por estos hechos de violencia de género.

Agresiones, amenazas y hechos de abuso sexual

Una vez ordenada su detención, cuando a fines de octubre pasado dicha medida cautelar fue convertida en prisión preventiva en una primera instancia a Matías Iván Vera le imputaron más delitos, quedando en aquel entonces configurada esa acusación en los mismos términos por los que ahora ha sido ratificada desde la Cámara Penal la decisión de que sea juzgado.

Cuando resultara arrestado el 2 de octubre del año anterior, Vera había vulnerado una manda judicial que le prohibía mantener cualquier tipo de contacto con su ex pareja, a quien aquel domingo interceptó en la calle y la siguió hasta la casa de esta ciudad donde ella vive.

Alertado personal policial sobre lo que estaba pasando -mediante un llamado al 911, luego de que la víctima accionara un botón antipánico que poseía- los efectivos de seguridad aprehendieron al imputado en la vía pública tras una persecución.

Sobre la base del testimonio que brindara la joven que figura como víctima de todos los hechos mencionados, en esa resolución que se tradujo posteriormente en el dictado de la prisión preventiva para Vera -la cual tiempo después también sería confirmada desde la Cámara Penal- se amplió la imputación para él; figurando, entre otros, un hecho de amenazas sucedido el 23 de octubre de 2021, cuando interceptara en la calle a su ex pareja y le expresó que iba a matarla porque lo había denunciado.

En tanto, los episodios de mayor gravedad que le atribuyen al joven que sigue preso sucedieron mientras convivió con la víctima durante varios meses en diferentes inmuebles de esta ciudad.

En ese entonces, según se refiere en las actuaciones penales, Vera abusó sexualmente de ella varias veces, lo cual implicaba que la accediera carnalmente hasta cuando la joven dormía, "aprovechándose de su indefensión y despertando a la misma ante la consumación del ataque".

Otro de los ilícitos que le imputan al joven había ocurrido el 18 de septiembre del año pasado, cuando agredió a su hasta ese entonces pareja, "tomándola del cabello, arrastrándola por la morada" donde convivían y "propinándole puntapiés en la cabeza".

La golpiza que la joven sufrió se tradujo en que resultara con diferentes lesiones, lo cual ocurrió mientras su agresor la insultaba y amenazaba con prender fuego la casa donde en aquella época ambos convivían.

Ese día la víctima intentó darse a la fuga. Pero no pudo. Y posteriormente, una vez que su agresor la introdujo nuevamente a la vivienda convertida en escenario de este hecho, siguió agrediéndola; mientras le advertía que iba a matarla si se iba de ese inmueble donde prácticamente la mantuvo encerrada durante varios meses.

La versión ante la Justicia que brindara la joven que sufrió estos hechos de violencia de género sirvió para conocer el estado de sometimiento, vulnerabilidad y hostigamiento al que estuvo sometida durante ese tiempo que convivió con el encausado.

Según contara, llegó a estar prácticamente cautiva alrededor de un año; lo cual sucedía mientras Vera la agredía y la sometía sexualmente, además de controlar cada uno de sus movimientos y aislarla de sus familiares y amigos para asegurarse, por medio también de amenazas, que ella no se fuera.

El dato

De acuerdo con lo que voceros allegados a lo que fuera la instrucción de esta causa penal señalaron a EL TIEMPO, el acusado de todos los hechos de violencia de género referidos permanece actualmente privado de la libertad en la Unidad 17, la cárcel del SPB situada en Urdampilleta, la localidad perteneciente al Partido de Bolívar.