Las dos mujeres y el hombre aprehendidos el sábado en Azul, durante allanamientos donde la Policía secuestró más de dos kilos de marihuana, se negaron a declarar cuando ayer por la mañana fueron indagados en sede judicial por el Fiscal a cargo del sumario donde los tres figuran acusados de una infracción a la Ley 23737.

Voceros allegados a la causa que se está instruyendo indicaron que también está siendo investigado por este caso un azuleño que registra varios antecedentes condenatorios y actualmente está preso en la Unidad 17.

El sábado que pasó, la celda que ocupa en ese penal ubicado en la localidad de Urdampilleta -Partido de Bolívar- había sido allanada, procedimiento que finalizó con el secuestro de un teléfono celular.

En el marco de esta investigación penal que desde la UFI 22 con asiento en los tribunales de Azul lleva adelante el fiscal Lucas Moyano, las mujeres arrestadas el sábado fueron identificadas como Araceli Elizabeth Otegui, una joven oriunda de La Plata que actualmente vive en esta ciudad y tiene 25 años de edad; y Johanna Belén Ocanto, una azuleña de 27 años.

En tanto, el hombre que -del mismo modo que sucediera con las jóvenes ya mencionadas- fuera aprehendido durante los allanamientos relacionados con esta pesquisa se llama Néstor Eduardo "Lalo" Scaserra y tiene 56 años.

Fuentes allegadas a la causa señalaron a EL TIEMPO que el preso al que el sábado le allanaron su celda en la Unidad 17 de Urdampilleta se llama Carlos José María Cano, de 51 años.

Además de que actualmente cumple condenas por infracciones a la Ley 23737, por ese mismo delito Cano figura imputado en otra causa que también se tramita desde la UFI 22.

Esa investigación penal data de diciembre del año anterior, cuando una serie de allanamientos realizados en Azul por personal de la Policía Federal Argentina -misma dependencia que intervino en los procedimientos del sábado que pasó- había finalizado con las aprehensiones de diez personas y también con la imputación para Cano por ese delito, que en ese entonces estaba preso en la Unidad 30, la cárcel del SPB con asiento en General Alvear.

Entre las personas arrestadas hace diez meses en el marco de aquella causa por comercialización de estupefacientes figuró una policía de la Bonaerense. Y también Arceli Otegui, la joven que volvió a ser aprehendida el sábado último y ahora está acusada de una nueva infracción a la Ley 23737.

También figura procesada, pero por un intento de homicidio ocurrido en octubre del año pasado -cuando a una joven le fue desfigurado su rostro con un elemento cortante-, la otra mujer que fuera aprehendida en los allanamientos por drogas que hicieron los efectivos de la Federal hace tres días: Johanna Ocanto,

Por esa causa estaba cumpliendo actualmente arresto domiciliario, luego de que le fuera otorgada una morigeración de prisión meses atrás por aquel intento de homicidio que se le imputa a través de un sumario que en junio pasado, en primera instancia, ya había sido elevado a juicio.

No declararon

En horas de la mañana de ayer las dos jóvenes y el hombre fueron trasladados desde la sede local de la PFA a los tribunales para ser indagados, audiencias en las cuales -tal lo ya mencionado- se negaron a declarar.

Posteriormente, el fiscal Lucas Moyano solicitó que las aprehensiones de los tres sean convertidas en detenciones, algo sobre lo que ahora tiene que resolver Magdalena Forbes.

Esa misma magistrada, a cargo del Juzgado de Garantías número 1, fue quien el pasado sábado ordenó los allanamientos en los domicilios de Scaserra, Ocanto y Otegui que derivaron en sus arrestos, tras los hallazgos de importantes cantidades de marihuana y de elementos que estarían vinculados con la presunta comercialización al menudeo de ese tipo de sustancia vegetal estupefaciente.

Ambas mujeres son consideradas autoras de los delitos de tenencia ilegítima de estupefacientes con fines de comercialización en dosis fraccionadas destinadas al consumidor en concurso ideal con comercialización de estupefacientes, agravado por la participación de tres personas.

A Scaserra también le imputan esos ilícitos. Y además -"en concurso real de acciones"- el de tenencia ilegítima de arma de fuego sin la debida autorización, teniendo en cuenta que cuando el sábado el hombre fue arrestado en su domicilio los policías habían incautado un revólver calibre 22 largo, "sin munición, sin martillo" y con "su tambor trabado", según se menciona en el escrito donde ayer el fiscal Moyano pidió que las aprehensiones de ese hombre y de las dos jóvenes sean convertidas en detenciones.

EL DATO

Tanto Scaserra como las dos jóvenes que fueron arrestadas el sábado en estos allanamientos por drogas permanecen por el momento privados de la libertad en la Delegación Azul de la Policía Federal Argentina.

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