La detención de uno de los dos jóvenes que sustrajeron un utilitario después de que protagonizaran una violenta fuga del Centro Cerrado "Leopoldo Lugones" de esta ciudad, hechos ambos sucedidos el pasado 27 de marzo, fue convertida en prisión preventiva, informaron fuentes judiciales a EL TIEMPO.

En una primera instancia, la medida cautelar fue ordenada para el mayor de los investigados por aquellos episodios delictivos.

De 18 años de edad e identificado como Franco Agustín Montenegro, a la espera de un cupo para su traslado a una cárcel del SPB -hoy viernes sería llevado a la Unidad 38 de Sierra Chica- continuaba hasta ayer jueves privado de la libertad en la Seccional Primera local de Policía.

Hurto agravado por ser de vehículo dejado en la vía pública, coacción agravada, lesiones leves y evasión agravada por la participación de un menor de edad -teniendo en cuenta que el otro interno que estaba en el Lugones e intervino en estos hechos tiene 17 años- son los delitos por los cuales se dictó la prisión preventiva para Montenegro.

A requerimiento de Mariela Viceconte, la fiscal a cargo de la UFI 17 perteneciente al Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil, la medida cautelar para el joven fue ordenada por Juan José Suárez, el titular del Juzgado de Garantías 3 que tiene su sede en el Palacio de Justicia de Azul.

Los delitos que le siguen atribuyendo al acusado y la pena que, en caso de resultar condenado, contemplan dichos ilícitos fueron circunstancias valoradas por el magistrado para dictarle la prisión preventiva.

"Asimismo -escribió el juez Suárez en lo resuelto- entiendo que existen otros indicios vehementes de que el imputado tratará de eludir la acción de la justicia o entorpecer la investigación".

"En ese sentido, tengo especialmente en cuenta que se encuentran imputados en la presente Investigación Penal Preparatoria la comisión de varios delitos, los cuales acontecieron en el marco de la evasión cometida por Montenegro en compañía de un menor de edad y que para materializar la misma ejerció violencia con el uso de armas blancas contra los agentes del instituto de minoridad en el cual se encontraba alojado", puede leerse también en lo decidido por medio de esta resolución, que data del viernes de la semana anterior.

"Lo dicho me permite presumir que la medida cautelar resulta proporcional y que al momento no existe medio menos lesivo para garantizar los fines del proceso, por cuanto Montenegro ha optado por desobedecer las normas en varias oportunidades", concluyó el magistrado garante con relación a la actual situación procesal de ese joven.

Oriundo de la ciudad de Avellaneda, meses más tarde de que había sido traído al Lugones -por otros delitos que cometiera siendo menor de edad- Montenegro se convirtió en uno de los protagonistas de esos hechos por los que fue ordenada su prisión preventiva, los cuales todavía continúan siendo materia de investigación.

Evasión y hurto de un utilitario

El pasado miércoles 27 de marzo Franco Agustín Montenegro y un adolescente que tiene 17 años se evadieron del Lugones. Y horas más tarde personal policial capturó a ambos, cuando los hallaron en una estación de servicios ubicada en Ruta 3 y Mujica.

En ese entonces estaban cargando combustible en un utilitario que sustrajeron instantes después de fugarse del instituto donde permanecían privados de la libertad.

Minutos después de la hora 21 de aquel día, en el Centro Cerrado "Leopoldo Lugones" -el instituto situado sobre la calle Neuquén de esta ciudad- el adolescente de 17 años implicado en estos hechos le pidió a un asistente de minoridad autorización para ir al baño.

Cuando ese empleado y otro más lo estaban acompañando hasta los sanitarios, el interno que después se fugó junto con Montenegro tomó del cuello a uno de ellos y lo agredió con una faca, provocándole "tres lesiones punzantes" en el tórax.

En medio de amenazas e insultos a los guardias de seguridad para que le abrieran una puerta, al ataque contra los asistentes de minoridad se sumó posteriormente Montenegro, quien también portaba un arma blanca de fabricación casera para concretar la fuga del Lugones. Una faca "con filo de aproximadamente 40 centímetros de largo", según se describía en las actuaciones penales.

La intervención del joven para quien ahora fue ordenada esta prisión preventiva sirvió para que uno de los asistentes de minoridad que tenía tomado al menor de 17 años lo soltara, ya que Montenegro amenazaba con lastimarlo con la faca si no lo hacía.

De acuerdo con lo referido en la causa, el mayor de los adolescentes implicados en esta fuga hirió con el arma blanca a otro guardia del Lugones que intentó evitar la evasión, a quien le causó una "herida corto punzante superficial a nivel de la columna".

Ante el agresivo accionar evidenciado por ambos jóvenes, los tres asistentes de minoridad que intentaban evitar la fuga y resultaron lesionados desistieron en su accionar, logrando Montenegro y el menor llegar hasta el patio exterior del Lugones, desde donde se escaparon luego de trepar un cerco perimetral.

De la fuga de ambos fue alertada la Policía, que inmediatamente inició un operativo para localizarlos.

Mientras se desarrollaban esas tareas, aquel miércoles 27 de marzo pasado los investigadores tomaron conocimiento de que un utilitario Renault Kangoo le había sido sustraído a un herrero, en momentos que el vehículo se encontraba estacionado en las afueras del inmueble donde ese vecino reside.

Sobre la Avenida 25 de Mayo, en cercanías del Balneario Municipal, una vez que ambos jóvenes se subieron a la Kangoo huyeron por calle Falucho, en contramano hacia Moreno.

Horas más tarde, los policías que estaban buscándolos capturaron a los dos en la estación de servicios que está en Ruta 3 y Mujica.

En ese lugar los adolescentes se habían detenido para cargarle combustible al utilitario que habían hurtado.

Teniendo en cuenta los lugares de donde respectivamente son oriundos, al parecer tenían intenciones de huir en el rodado hacia la Capital Federal o el conurbano bonaerense.

Cuando resultaron aprehendidos, los policías incautaron dos cuchillos -que no eran las armas blancas que utilizaron para escaparse del Lugones- y dinero en efectivo. Algo más de cien mil pesos que estaban en un neceser y que los jóvenes hallaron dentro del rodado del que se habían apoderado instantes antes.

En el caso del chico de 17 años que también participó en estos hechos, posteriormente a que fuera capturado había sido trasladado desde el Lugones al Instituto Almafuerte de La Plata.

Voceros judiciales indicaron que las actuaciones penales que involucran a ese menor de edad en la evasión y en el posterior hurto del utilitario ya han sido elevadas a juicio.

El dato

Montenegro, el joven para quien se ordenara esta prisión preventiva, se había negado a declarar cuando fue indagado. Según lo informado por fuentes judiciales, la causa penal que lo tiene como imputado se encuentra radicada actualmente en la UFI 6, la fiscalía que en los tribunales de Azul está a cargo de Karina Gennuso.