Acusado de una infracción a la Ley de Estupefacientes, un joven que tiene 26 años y había sido detenido en esta ciudad el jueves que pasó se encuentra ahora privado de la libertad en la Estación de Policía Comunal de Tapalqué.

A esa dependencia policial fue trasladado desde la Seccional Primera de Azul, después de que anteayer había sido llevado a Tribunales para ser indagado en el marco del sumario penal que lo tiene privado de la libertad.

La causa que se está tramitando por esta infracción a la Ley 23737 está radicada en la UFI 22, la Fiscalía a cargo de Lucas Moyano.

El imputado había sido identificado por voceros allegados a esta investigación penal como Gastón Agustín Molina.

Contando con una orden dispuesta por el juez de Garantías Juan José Suárez, el azuleño había sido detenido durante un allanamiento que el pasado jueves en horas de la tarde la Policía realizó en la casa donde se domicilia, situada sobre la calle Malvinas, en Villa Piazza Norte de este medio.

Durante ese procedimiento, en ese inmueble habían sido hallados e incautados marihuana, cigarrillos semicombustionados de cannabis sativa, una balanza de precisión, teléfonos celulares, una calculadora, más de 1400 pesos, un dólar y dos elementos para picar ese tipo de sustancia vegetal estupefaciente.

En el sumario penal que se tramita Molina figura acusado de comercialización de estupefacientes y tenencia ilegítima de estupefacientes con fines de comercialización en dosis fraccionadas destinadas directamente al consumidor, en concurso ideal.

En esa audiencia desarrollada en sede judicial donde el pasado viernes fuera indagado, el joven se había negado a declarar, según lo informado a este diario por voceros allegados a la causa.

Un teléfono celular

Molina comenzó a ser investigado en noviembre del año pasado, ocasión en la cual había sido arrestado en cercanías a la Plaza Ameghino, sospechado en ese entonces de estar comercializando sustancias estupefacientes al menudeo.

Cuando su arresto se hizo efectivo, en su poder policías que participaron en el procedimiento -desarrollado en horas de la noche del 6 de noviembre- incautaron en su poder más de 25 gramos de marihuana distribuidos en tres envoltorios de nylon.

En aquel entonces sólo fue acusado de la tenencia ilegal de la droga, por lo que al día siguiente, después de que lo llevaron a Tribunales para ser indagado, recuperó la libertad.

Pero ahora la imputación para el joven se agravó y derivó, hace tres días, en su detención.

Según fuentes judiciales explicaron, eso obedeció a que -por medio de tareas llevadas adelante por los instructores de la UFI 22- se hallaron en el teléfono celular que tenía, cuando en noviembre pasado fuera aprehendido, conversaciones por WhatsApp donde acordaba la venta de cocaína y marihuana en pequeñas dosis a eventuales consumidores.