HABÍA SIDO DETENIDO EN CABA. Excarcelaron al acusado de una "estafa" sucedida en Chillar

Luego de que fuera detenido durante un procedimiento que personal policial llevara a cabo este jueves que pasó en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, el Juez de Garantías que entiende en esta causa penal se pronunció a favor de otorgarle la excarcelación.

La libertad del imputado se había hecho efectiva este sábado que pasó en horas de la noche desde la Subcomisaría de Chillar, la seccional policial donde permaneció luego de que lo había sido su arresto, que se hiciera efectivo dos días antes.

En respuesta a una presentación formulada por el abogado defensor del encausado, la medida fue ordenada por Federico Barberena, el magistrado a cargo del Juzgado de Garantías 2 con asiento en los tribunales de Azul.

Ayer domingo, un día después a conocida la excarcelación del imputado, por medio de fotografías la mujer que resultara damnificada por esta "estafa" -sucedida el pasado 30 de septiembre- lo reconoció como el mismo sujeto que, ese día ya referido, se hizo presente en su casa, ocasión durante la cual, engañada, ella le hizo entrega de dinero y joyas.

El mismo Juez que anteayer sábado le otorgó la excarcelación al acusado había sido quien ordenara su detención, cautelar que se hiciera efectiva ese ya referido jueves pasado, durante un procedimiento que personal policial llevara a cabo en un departamento de un complejo habitacional donde el investigado se domicilia.

Ese inmueble -situado en la Capital Federal, sobre la calle Remedios de Escalada de San Martín- había sido también allanado por los efectivos de seguridad que participaron en aquel procedimiento, incautándose en ese entonces elementos que son considerados de interés para esta investigación penal, que desde la UFI 6 con sede en los tribunales de Azul lleva adelante la fiscal Karina Gennuso.

En esa causa el hombre que ahora nuevamente se encuentra en libertad -que tiene 56 años de edad y voceros policiales y judiciales identificaron como Horacio José Pluchino- figura acusado del delito de "estafa".

Cuando este viernes que pasó fue traído a los tribunales de Azul para ser indagado, en esa audiencia desarrollada en la sede de la Unidad Funcional de Instrucción número 6 había declarado, según lo informado a EL TIEMPO por fuentes judiciales.

Las circunstancias de que al hombre se le impute un delito que es excarcelable y que, al parecer, no registra antecedentes penales computables se convirtieron en dos de los elementos valorados por el Juez garante para dar lugar a su excarcelación "bajo caución juratoria".

En la previa a que fuera liberado, Pluchino se había negado a integrar una rueda de personas, solicitada desde la Fiscalía para que la damnificada por esa "estafa" que al hombre se le imputa pudiera identificarlo, o no, como el autor de aquel episodio delictivo.

Eso derivó en que ayer domingo el reconocimiento se llevara a cabo mediante fotos. Imágenes a través de la cuales la mujer lo señaló como el mismo sujeto que la había despojado de su dinero y sus joyas durante lo que fuera este "cuento del tío".

Engañada

Tal lo que EL TIEMPO refiriera en su edición papel de este domingo que pasó, Pluchino había sido detenido el jueves de la semana anterior durante el referido procedimiento realizado en ese departamento de la Capital Federal donde se domicilia.

El dictado de la medida de coerción y el allanamiento, solicitados desde la UFI 6, habían sido ordenados también por el juez de Garantías Barberena.

Agentes de la Subcomisaría de Chillar participaron en esa diligencia, que se llevó a cabo en el barrio Villa del Parque, se extendió hasta las primeras horas del pasado viernes e incluyó la intervención de efectivos de la División Defraudaciones y Estafas de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires.

Durante ese allanamiento se incautaron "dinero en efectivo, telefonía celular y demás elementos de interés para la causa", según lo que fuera informado.

Teniendo en cuenta que el procedimiento se desarrolló en la Capital Federal, una jurisdicción ajena a la de Azul, el Juez de Garantías que lo ordenó tuvo que librar un exhorto al Juzgado Nacional en lo Criminal de Rogatorias para que se pudiera llevar a cabo lo que dispuso.

"Cuento del tío"

Ese ya referido 30 de septiembre pasado existen elementos que señalan que Pluchino cometió esa "estafa" que se le continúa imputando.

Aquel día, en Chillar, una vecina de 79 años que vive sobre la calle Cortázar se convirtió en la damnificada por esta maniobra delictiva.

En un principio, la mujer recibió un llamado telefónico. En esa comunicación, un sujeto se hizo pasar por uno de sus hijos y le dijo -según se describe textualmente en las actuaciones- que "preparara dólares, euros y objetos de oro de valor, atento que se constituiría en su vivienda personal del banco a retirarlos".

Teniendo en cuenta el reconocimiento fotográfico que hiciera ayer domingo la damnificada y más evidencias incorporadas a este sumario penal, instantes más tarde fue Pluchino quien se hizo presente en la casa de la damnificada.

La vecina, sin sospechar que estaba siendo engañada, lo hizo ingresar a su domicilio, donde después le entregó dinero y joyas de los cuales el autor de este ilícito se apropió para luego darse a la fuga.

En la causa se señala que la mujer le dio, creyendo que iban a ser llevados a un banco, 30.000 pesos, 1.500 euros, un collar, tres pulseras y un par de aros -todos confeccionados con perlas de nácar-, dos anillos de oro -uno de ellos con brillantes- y cuatro pares de aros de fantasía.

Ese mismo viernes 30 de septiembre, varias horas después, la víctima de este engaño habló con uno de sus hijos y recién ahí se dio cuenta de que había sido estafada, por lo que lo sucedido fue denunciado en sede policial.

Posteriormente, a través de la investigación iniciada, fue posible determinar que aquel día el investigado estuvo en Chillar y que se movilizaba en una camioneta Fiat Toro de color roja.

El vehículo había sido observado en la vecina localidad a través de imágenes de cámaras de seguridad, tanto privadas como de la comuna. Además, un testigo al que le pareció sospechosa la presencia de ese rodado en Chillar tomó las letras y números de la patente, constatándose luego que el vehículo estaba a nombre del todavía imputado en esta investigación penal, quien desde el sábado que pasó nuevamente está en libertad.