Aún a pesar de existir ordenanzas municipales que prohíben la organización de reuniones sociales, en nuestra ciudad fueron desactivados varios encuentros que se encontraban bajo infracción.

Es por esto que personal de la Comisaría Primera de Azul, en conjunto con la Secretaría de Control Ciudadano municipal se presentaron en distintos domicilios, en muchos de los cuales "no fueron atendidos", según consta en el informe enviado a los medios en la tarde de este lunes.

El primer caso informado fue el de Avenida Perón 795, donde se constató "música a alto volumen como así también juego de luces, desconociendo la cantidad de personas que se encontraban en el interior de la finca, ya que no fuimos atendidos en las reiteradas oportunidades que se llamó a la puerta, habiendo una gran cantidad de automóviles en el exterior de la vivienda y latas de cerveza". Haciendo las averiguaciones del caso, se constató que los domiciliados en el lugar eran Mariano Francisco Matta de 39 años, y Paola Anahí Crevaro de 40 años, ambos viviendo en el lugar.

Por otro lado, en Rivas 1142 se encontraban "un gran número de personas" en el interior de ese domicilio, propiedad de María Esmeralda Pereyra.

Cuarenta personas "aproximadamente" (dice el informe) fueron las que se encontraban en la propiedad de Juan Agustín Sarasola, en Chubut 643.

El conocido Club San Martín también fue receptor de los operativos, constatándose la falta de REBAR, además de una contravención a la Ordenanza Municipal 4492/20. Es por esto que se procedió a la clausura del local, ubicado en Bogliano 313, siendo Agustín Andrés Giammatolo quien figura como titular del espacio.

Por último, en Malere 416 se encontraban "aproximadamente 25 personas, siendo propietario del lugar Antonio Tamburo", dice el informe policial.