Escribe: Ing. Gustavo Javier Vitale (*)

El asociativismo municipal en la Argentina se configura bajo cuatro tipos: las Mancomunas, destinadas a un o mas fines especificos y que pueden desarticularse una vez concluido el objetivo buscado; las Microregiones con un agenda más amplia de desarrollo; las Redes de Ciudades con un proposito mas de intercambio y aprendizaje, y que exceden las fronteras de nuestro pais. Tenemos también experiencias de cooperación entre ciudades que comparten fronteras con países limítrofes a lo largo de los cinco países con los cuales compartimos dichas fronteras.

En nuestra ciudad, más reciente es la experiencia de las Redes de Ciudades Cervantinas, "con el propósito de facilitar un mayor conocimiento y relación de los lugares vinculados con Miguel de Cervantes", según se expresa en su web y que Azul forma parte junto a importantes ciudades del Mundo. También Azul es parte de la Red Salamone junto a los Municipios Argentinos que albergan las obras del Arquitecto e Ingeniero.

Bajo el concepto Mancomunal podemos destacar al Co.Ce.Ba (Consorcio del Centro de la Provincia de Buenos Aires), integrado por Azul, Olavarría y otros partidos de la región; que oficia de nexo entre afiliados a PAMI y hospitales y médicos de la región.

El TOAR, se estableció hasta su disolución en 2017 como un Consorcio Regional (Microrregión), integrado por Tandil, Olavarría, Azul y más tarde se sumó Rauch. Con buenas intenciones e impulso de los distritos intervinientes se inició con el horizonte de una ambiciosa agenda de Desarrollo de una región de alrededor de 300 mil habitantes. Las asimetrías de los partidos intervinientes, tanto demográficas como económicas y productivas, los pocos incentivos en los niveles superiores de gobierno, la falta de legislación y reconocimiento constitucional, sumada a las clásicas diferencias políticas que aparecen en distritos gobernados por espacios y/o frentes de gobierno de distinto origen condujeron a que la poca actividad del mismo diera paso a la disolución materializada por un acta firmada por los cuatro intendentes de ese entonces: Lunghi, Galli, Bertellys y Suescun.

La reflexión apunta a buscar un aprendizaje que puede explorarse a partir de abordar las relaciones con Municipios cercanos ya no bajo la premisa de grandes hitos, sino bajo objetivos más pequeños y tangibles, de mediano plazo y bajo el formato Mancomunal o de Red de Ciudades. Los primeros ejemplos nombrados son claros, funcionan, y quizás existan algunas asociaciones más que pueden omitirse en estas líneas, pidiendo las disculpas del caso.

Como ya hemos mencionado domingos atrás, podría buscarse un asociativismo con Tandil y Benito Juárez bajo el propósito de potenciar el corredor cultural de la Ruta Provincial n° 80. Con la vecina localidad de Olavarría se comparte gran parte de la producción minera de la provincia y ameritaría algún acuerdo.

La intermunicipalidad es un desafío para las comunas modernas, existen innumerables ejemplos exitosos en el mundo y debemos aprovechar al máximo su funcionamiento, con objetivos más pequeños y concretables, entendiendo que el buen funcionamiento de estas asociaciones nos ubica en un plano de mayor dimensión política a la hora de discutir recursos, plantear demandas y poner foco en la región.

(*) Nueva Comuna

nuevacomunaazul@gmail.com