RECUERDO PARA NOSTÁLGICOS . La máquina de EL TIEMPO: la década de los 80

Por Emilia Herrera Abdala

La música es eso que nos acompaña a medida que pasa el tiempo, y en muchas oportunidades, es lo que se convierte en una salida para escapar y viajar a otras épocas y lugares. El mundo sigue girando y la música sigue sonando. Crisis, guerras, dictaduras, bienestar, estabilidad, pandemia. Todo va de la mano de la música. Ayuda a digerir la tristeza en los peores momentos y aporta felicidad en los mejores. Para muchos es la anestesia y para otros una inyección de vida. Se puede terminar todo, menos la música.

En la actualidad, la pandemia sigue latente y en estos días la suba de casos y contagios está batiendo records todos los días. Entonces, es un buen momento para refugiarnos en la sonoridad que tanto sana y para darnos un respiro, trasladándonos unos años atrás, específicamente a las décadas de los '80 y '90, colmados por bandas y artistas que dejaron una huella imborrable en el corazón de sus admiradores. Azul, no fue excepción.

Los boliches de los '80

Gustavo D`Alessandro fue un reconocido disc-jockey de la época. Se desempeñaba -junto al "Flaco" Martínez- principalmente en el boliche "Torras" donde pudo adquirir muchísimos conocimientos respecto a la cultura musical que latía en ese entonces, sus principales características y posteriores revoluciones.

En cuanto a los boliches, hubo una gran variedad que dominó la década, "Pitao" era uno de ellos, que venía de los 70. Estaba "Cronopio" que luego en el '84 se llamó "Dharle". A su vez se encontraban, "Gato Pardo", "Tanzeque" y "Torras", que era muy concurrido los domingos, algo muy inusual hasta en el presente, y que luego se destinó a la Promoción hasta el 89`.

La música

Por otro lado, con respecto a lo musical, comenzó una década cautivada por bandas como Riff y artistas como Baglietto, Pedro y Pablo, Mónica Posse, Marilina Ross -con el álbum "Soles"- y León Gieco con "Pensar en nada". En esos inicios, los artistas Roque Narvaja y Piero visitaron la ciudad para brindar sendos inolvidables shows.

Luego, en el '82, comenzaron a verse los primeros pasos del furor de Charly Garcia, de la mano de su primer álbum: "Pubis Angelical", el cual contenía hitazos del nivel de "Yendo de la cama al Living". En consecuencia, posteriormente, la siguió rompiendo con su segundo álbum: "Clics Modernos". Ahí fue cuando arrancó un movimiento liderado por el Rock Nacional que inundó la ciudad.

Bandas como Soda Stereo, Sumo y Virus no pararon de sonar en esta década. Soda comenzando con su primer álbum -"Soda Stereo"- en el '84; Sumo en el 83, con el enorme Luca Prodan a la cabeza, de la mano de "Corpiños en la madrugada", el compilado piloto, y luego en el '85, Virus, lanzando su quinto disco "Locura", el cual fue un éxtasis para esos años, explotando con "Luna de miel en la mano" y "Pronta entrega".

A partir de la segunda mitad de los ochenta, sonaron mucho Los Fabulosos Cadillacs, Los Enanitos Verdes, Los Abuelos de la Nada, Pappo. Ni hablar de que en el '85 se lanzó el primer álbum de Patricio Rey y sus Redonditos de Ricota: "Gulp!", con lo cual poco más adelante empezaría a originarse la famosa "fiebre ricotera", culpable de infinitos pogos en los boliches.

"El gran acceso a los temas era lo que escuchabas en el boliche"

"Un poco más de mediados de la década recién comenzaron a escucharse acá en Azul las radios FM, ya que antes se escuchaban sólo en Buenos Aires y la gente pedía los nombres de las canciones en las cabinas de los DJ por curiosidad, o que le grabaran el disco que pasaban en la noche. Yo viajaba y traía la música grabada. El gran acceso a los temas en general era mucho de lo que escuchabas en el boliche. Los discos se solían separar por uno movido y uno lento o uno de música internacional y otro nacional. La FM recién apareció en el 88- 89 en adelante, fue toda una cultura nueva la de explorar música y empezar a conocerla", explicó Gustavo D'Alessandro a este diario.

Esa década fue marcada por los famosísimos lentos que embellecieron y romantizaron la década con mucha música comercial. "Los sonidos de la batería eran muy firmes, con mucho eco del redoblante, con muy buena producción", comentó el ex DJ.

"Tenían la fórmula para que sea un éxito"

A su vez, D'Alessandro argumentó, considerándolo un dato de color, que "había productores que componían música ya programada para ser un éxito. Tenían la fórmula para que sea un éxito. Después cada banda le daba su impronta. La MTV lo cambió todo, porque había que acompañar el tema con el video. Michael Jackson hizo una gran revolución e historia con Thriller".

En cuanto a lo internacional, las bandas heavys de temas bolicheros hacen su aparición: Motley Crue, Van Halen. Además resurgió Mick Jagger como solista, apareció Madonna, Tina Turner, como así también otros grandes músicos que descollaron también individualmente, como los ex Beatles John Lennon y Paul McCartney.

"En general el grueso de la gente escuchaba los éxitos: iban con una lista para que le hagas el cassette. Había canciones que era imposible no ponerlas. 'Take on me' (de A-HA) fue el temón de los ochenta, como a su vez 'We are the world' que marcó un antes y un después en el '85 con la unión de semejantes artistas", mencionó D'Alessandro

Queen obviamente también tuvo su merecida fama y fue furor en todos ese lapso, con música súper bolichera y también comercial. Temas del estilo de "Radio gaga" o "I want to break free" sonaron a mas no poder.

"Lo valorabas mucho más"

Haciendo un análisis general, Gustavo D'Alessandro agregó: "Hubo cambios en el comienzo y en el final. Se empieza a escuchar más lo que se escuchaba en Buenos Aires. Los sonidos muy marcados. Las bandas se renovaban, como por ejemplo Van Halen, que hizo música para bailar, y a los fanáticos no les gustaba tanto. En cuanto a la calidad musical la creatividad y la variedad se daba por excelencia. Muy prolífica en la composición, en las producciones, era buena música. La parte compositiva y los vocalistas también".

"Uno llegaba a comprarse un disco solo, no era que se podía comprar dos o tres, entonces se lo exprimía al máximo. Te lo aprendías, veías las letras, a sus los músicos, nos quedábamos horas mirando esas portadas y sus fotos. Lo valorabas mucho más. Ahora que es todo variado y por la llegada de internet y plataformas como Spotify, oímos un poco de cada cosa sin entrar en detalles de la banda o de las letras", concluyó.

La llegada de los 90 se cargó al hombro una enorme cantidad de cambios en todos los sentidos. En próximas ediciones de EL TIEMPO se hará su respectivo repaso. Para estar atentos.