Por Laura Méndez de la

Redacción de EL TIEMPO

Parece mentira que hayan pasado tantos años de cuando era el camarógrafo de "Qué Pasó?" y actualmente está en México produciendo guiones. Aunque primero anduvo por Europa y después por el norte argentino, hasta que llegó a Bolivia en moto. Toda una aventura sin igual que a él, según contó, le sirvió de experiencia.

El hecho de conocer otras culturas lo enriqueció y lo hizo por una sencilla razón: exploración personal.

Uno de sus ex compañeros de trabajo y amigo Facundo Rodríguez describió a Sortino: "Fran es un ser humano transparente, es lo que ves. A mi me enseñó a trabajar en equipo. Con él generamos Qué pasó? Hace 10 años y al momento de plantearle la idea ya se puso la camiseta del producto. Creativo al cien por ciento y es innovador con lo que desarrolla".

Es el azuleño destacado que "presentamos" este miércoles. Contó acerca de su recorrido, sus sueños, sus añoranzas, entre varias cuestiones que hablan de su

inmenso amor por lo que hace.

"... tengo que aprender de mis raíces"

-Nombre completo y edad

-Francisco Gustavo Sortino Fernández, 32 años.

-¿A qué edad te fuiste de Azul, por qué y dónde?

-Empecé a irme de Azul a los 18 años cuando me fui a estudiar cine a Tandil, luego de ahí siguió un camino de exploración personal y de los caminos que me llevó a varios lugares del mundo. Recorrí Europa en 2014, luego me fui a vivir a Salta donde estuve unos 3 años filmando documentales y películas. A fines del 2018 empecé un viaje en solitario con mi moto por Latinoamérica: comencé por el norte de Argentina, recorrí casi toda Bolivia y en la frontera con Perú la aduana de Bolivia me quitó la moto, por eso me vine al país en donde estoy actualmente.

-¿Dónde vivís actualmente? ¿Qué actividad desempeñas?

-Actualmente vivo viajando por México particularmente en el estado de Chiapas, en San Cristóbal de las Casas, (lugar que fue y es la cuna del movimiento de liberación Zapatista) y sigo el camino de exploración por Latinoamérica.

En este soñado estilo de vida que elegí y porque lucho para realizarlo día a día voy filmando documentales narrando mi camino por nuestro continente. También trabajo haciendo publicidades para empresas, documentales para organizaciones sociales y/o medioambientales. Actualmente estoy desarrollando un guión para una serie de ficción para televisión y un documental sobre el trabajo de los productores de café en Chiapas.

-¿Qué fue lo que te impulsó a irte por lo que me contas, estar en tantos lugares. ¿Por qué tanto viaje? ¿Cómo es un día de tu vida?

-Cuando estuve por Europa sentí la sensación de que antes de salir a conocer el mundo tengo que aprender de mis raíces, por eso cuando volví a Argentina comencé explorando por ahí, me fui desde Azul hasta Salta, ahí conocí un mundo mágico y profundo de nuestro país que antes ni lo imaginaba, por eso me quede 3 años!. Siempre tuve el sueño de animarme a conocer toda Latinoamérica y una vez que tuve mi moto me aventuré a cruzar la primer frontera (mental y literal) y me fui a Bolivia, ahí sentí que todo el continente se abrió para mí y me abrazó de una forma inexplicable. Ahora quiero conocer toda Latinoamérica y contar las historias que el camino me enseña.

Un día de mi vida puede variar muchísimo. Cuando estoy en viaje pueden pasar por muchas cosas, pero ahora que estoy hace un par de meses en un mismo lugar un día es así: Escribo el guión de la serie que te comentaba; planeo el guión para el documental y me preparo para filmar; me doy una ducha y me cepillo los dientes; coordino acciones de producción para filmar las nuevas escenas del documental del café; y ahora estamos planeando con mi compañera comprarnos una Van para ir hasta Argentina, así que eso es lo que más nos motiva y consume nuestras energía del día a día. Así que pronto el día a día va a cambiar mucho...

-¿Cómo te está resultando esta experiencia?

-No voy a decir que es fácil pero esta experiencia si que es alucinante, hay tantas cosas que una vez que salís a viajar te das cuenta que la visión del mundo se te amplia muchísimo. Gracias al camino que elijo puedo conocer en persona qué es lo que sucede en profundidad en cada país que visito. Me ha servido para derrumbar muchísimo mitos, por ejemplo de México se dice que es un país de narcotraficantes, de mariachis y tacos, y no es eso la materia principal que reina en este país vecino, aquí hay una humildad enorme, una diversidad cultural gigante, (México es uno de los países con mayor cantidad de pueblos indígenas de Latinoamérica) y la gente que aquí habita es muy amable y cálida. Ni hablar de la comida, que tiene una diversidad tan grande que daría para escribir un libro...

-¿Qué les dirías a las personas que no se animan a irse a probar suerte a otros mundos?

-Que si sienten esa pasión en el corazón que se animen, hay un mundo increíble allá afuera que desconocemos totalmente. Les va a dar mucho miedo, de a ratos van a sentir impotencia, soledad, frío, cansancio, van a extrañar muchísimo y no va a ser fácil. Pero lo que viene a contrarrestar todo esto es súper potente, no puedo decir qué es lo que es porque eso es muy personal pero si les puedo decir que si confían todo va a estar bien.

-¿Tenés pensado volver definitivamente?

-A vivir no lo sé, pero sí a visitar y a crear nuevos proyectos.

-¿Sufriste desarraigo?

-La verdad que no, ya siento que soy de Latinoamérica en general, donde voy viajando me tratan como igual y como parte de esta tierra,

creo que eso hace que no sufra desarraigo. Un dato bonito es que cuando digo que soy de Azul a la gente le encanta, le parece muy bonito que nuestra ciudad tenga el nombre de un color, en muy pocos lugares se da algo así.

Pero igual no te voy a mentir, de vez en cuando quiero estar en medio de una peña bailando unas chacareras y zambas con algún amigo tocando y tomándome unos buenos vinos... Hay cosas que no cambian.

Actualmente el trotamundos reside en México, particularmente en el estado de Chiapas, en San Cristóbal de las Casas

-¿Pudiste encontrarte con gente de Azul?

-Claro, en Bolivia estuve con mi gran Amigo Emma y El Tano. Junto con Emma hicimos varios proyectos en Bolivia, filmamos un corto bajo su dirección entre otras cosas y de ahí nos vinimos a México; acá me reencontré con Pitu Tocino, mi amor de toda la vida y con la que ahora tengo la suerte de estar viajando y compartiendo la vida.

Azul: "Falta mucho sentimiento de comunidad"

-¿Qué es lo que más añoras de esta ciudad?

-Los mates y charlas con mi mamá, y los encuentros con mis hermanos y hermanas. Ah y las facturas, la pizza, el asado, el fernet (risas).

-¿Venís con frecuencia?

-Hace 2 años que no voy para Azul, la situación global de la pandemia ha complicado mucho las cosas para todo el mundo. Personalmente no voy todavía por seguridad para mis familiares y porque la situación económica no es de lo mejor para viajar.

-¿Volverías a Azul definitivamente? ¿Con que proyecto?

-Como te decía antes no lo sé, algo que aprendí es a no ser definitivo en las decisiones porque todo puede cambiar. Me gustaría filmar una película en Azul, tengo varias historias escritas que suceden ahí, pero también me gustaría hacer algún documental.

-Ahora que ya tenés unos años de experiencias afuera que nos falta Azul para crecer?. ¿Que nos sobra?

-Creo que falta mucho sentimiento de comunidad en algunos aspectos, se mira mucho para afuera pero se valora poco lo que hay adentro.

Hay mucho potencial creativo en Azul, en todo sentido, la gente tiene una gran fortaleza y siempre se las rebusca de mil maneras, eso es impresionante.

Pero por otro lado las riquezas están muy mal distribuidas, hay muchos que tienen demasiado y otros que tienen poco o nada, habría que lograr un reparto igualitario en tantos sentidos, pero eso lleva tiempo y educación.

Otra cuestión es dejar de pensar que los que gobiernan van a traer soluciones a todos nuestros problemas, la solución está en la comunidad. Un gran ejemplo del cambio que se necesita como ciudad y como país lo está trayendo entre sus manos el movimiento feminista, deberíamos ser más empáticos y abrazarnos más, como ellas están haciendo.

Lo que creo que es un aspecto muy bonito de nuestra ciudad es la solidaridad, cuando alguien está en situaciones complejas se le ayuda y colabora, eso es destacable y admirable pero no deberíamos esperar a que se llegue a situaciones extremas para hacerlo.