El presidente del Centro de Apicultores de Azul Juan Etcheverry recalcó la importancia de volver a encontrarse luego de dos años interrumpidos por la pandemia de Covid-19. Además, resaltó el rol destacado que cumple el sector a nivel medio ambiente.

Durante el pasado fin de semana, específicamente los días 10, 11 y 12 de junio se desarrolló en el predio de la Sociedad Rural de Azul en Ruta 3 y Avenida Urioste la Fiesta Nacional de la Miel. En dicho evento hubo expositores de todo el país que trajeron a nuestra ciudad las últimas innovaciones con las que trabaja el sector.

Juan Etcheverry, que encabeza el Centro de Apicultores local, brindó su mirada sobre la importancia de la industria a nivel climático y también hizo referencia al aspecto artesanal preponderante que mantiene la tarea apícola.

Reencontrarse tras la pandemia

"Después de este paréntesis ineludible nos volvemos a ver, un acontecimiento que produce inmensa alegría. Regresamos a un encuentro tal como lo hicimos año a año desde 1988. Tenemos un espacio para confraternizar con quienes comparten la misma tarea, que es mucho más que ganarse el pan, es pasión y esfuerzo, así fue, y siempre así será" indicó.

Con tecnología, pero un gran aporte artesanal

"Es verdad que la tecnología es un apoyo del cual ya no se puede prescindir, también lo es la parte más importante de la labor apícola, el tener una correcta lectura y manejo de la colmena para que rinda, sobreviva, es aún algo ancestral y artesanal, cuesta creer que podría ser reemplazado por un robot" detalló.

"Las mentes más avanzadas y previsoras de la humanidad ven claramente que el planeta se maltrata, clama por la cría de las abejas, nuestra supervivencia depende de ellas, en muchos sentidos somos apidependientes. Mucho podría decirse del actual panorama en dos de los aspectos más importantes de este quehacer, el cambio climático y el mercado. Ambas cuestiones son motivo de preocupación diaria, están hablados, analizados y comentados, por esa razón y porque se quiere respirar optimismo y esperanza, en estos momentos los dejamos a un costado con la consigna implícita de ir siempre adelante" enfatizó Etcheverry.

El rol fundamental de la Expo Miel

"Es un baluarte que debe continuar con el fin de fomentar la actividad, para que podamos compartir experiencias, aprender, darnos ánimo, fortalecernos y crecer. El futuro siempre es incierto, a veces más y a veces menos, esperanza es la palabra clave, las abejas no deben desaparecer y los apicultores tampoco" culminó quien en la previa de la fiesta había remarcado que "es la exposición número uno y la más grande de la Argentina y Sudamérica".

NICOLAS MURCIA