PRIMERA DIVISIÓN. Piazza se quedó con el Torneo Clausura

Lucas Laguna, uno surgido de las inferiores del club, terminó siendo el héroe de la noche. Tuvo la responsabilidad de ejecutar el décimo penal de la serie y con un remate a la derecha venció a Franco Vedelini, para darle el triunfo a Sportivo Piazza por 9 a 8 y de esta manera le dio un nuevo título a Sportivo Piazza, el décimo tercero de su historia.

El partido en el tiempo regular había terminado empatado en cero, mismo resultado que en el encuentro de ida, disputado en el estadio de Athletic. Los noventa minutos fueron muy parejos, con mucha fricción, lucha y poco juego. Por tal motivo el Torneo Clausura de Primera División tuvo que dirimirse desde los doce pasos, entre el villero y Alumni Azuleño, quién se quedaba con el título del segundo certamen del año.

En el inicio del encuentro llegó un nuevo protagonista al juego. El fuerte viento y la lluvia. Estas condiciones climáticas obligaron a que los jugadores tuvieron que jugar al ras del piso, porque si intentaban ir con los pelotazos el balón se hacía imprevisible e incontrolable.

Cada que vez que tenían la bocha en su poder trataban de ser prolijos en su manejo y de esa forma ir atacando. Eso hacía que ninguno pudiera tomar el control del juego y por lo tanto del partido.

La diferencia que había era en la manera de jugar. El albinegro por ahí era más vertical en su manera de jugar, tratando de aprovechar la velocidad de los hermanos Bossi y de "Yeyo" Zirilli. El industrial trataba de manejar la pelota en la mitad de la cancha, para que este le llegue limpia a Iván Martino, para que con habilidad pudiera desequilibrar.

La primera llegada clara fue para el local. El "Chino" Guevara tocó para Iván Bossi que alargó para su hermano Ulises, que se escapó solo y su definición fue desviada por una de las piernas de Rodrigo Vivas.

A pesar del viento y la lluvia, el partido, de a poco, fue entrando en temperatura. La cancha rápida y lo que había en juego llevó a que haya algunos encontronazos entre los jugadores.

El partido se fue friccionando, cada vez que finalizaba una jugada las discusiones tomaban el papel principal en el juego. Eso llevó a que el dueño de casa se quedara con diez jugadores. A los 32' se fue expulsado Joaquín Rodríguez por juego brusco.

Sobre el final de la primera mitad apareció en la cancha Iván Martino. Se juntó con Salamanca y entre los dos hicieron esforzar a la defensa local, que alcanzó a rechazar y el balón le cayó a Maximiliano Giménez, que remató desde afuera del área y su remate se fue apenas desviada.

Esteban Valdez y Emilio Brienzo reciben la copa de manos del secretario de Gobierno, Pedro Sottile, y el presidente de la Liga de Fútbol, Alejandro Ponce. NICOLÁS MURCIA

La primera mitad se fue dejando muy poco de juego. Ninguno de los dos pudo adueñarse del juego y esa paridad llevó a que las fracciones y las discusiones sea lo que sobresalió en los cuarenta y cinco minutos iniciales de la gran final.

Para el complemento, Agustín De la Canal rearmó la defensa con línea de cuatro. Ingresó Leonel Norte, para ocupar el lugar que dejó libre por la roja Joaquín Rodríguez, y salió Kevin Guevara, quién realizó un gran esfuerzo para disputar este encuentro y aguantó un tiempo.

El cotejo seguía de la misma manera. Ninguno podía hacerse dueño del encuentro. El local, con uno menos, trataba de estar bien parado para no sufrir. En tanto que el industrial le costaba mucho asociarse y desplegar su juego. La única manera es por jugadas individuales que, en su mayoría, eran encabezadas por Iván Martino.

Pero a pesar de que el villero no estaba fino en el manejo de la pelota es el que tuvo la oportunidad más clara. Con un remate de Iván Martino, que tomó un rebote, y terminó rechazando Luca Flores, cuando la pelota llevaba mucho peligro.

Los minutos pasaban y en el encuentro nada ocurría. Un poco mejor estaba el equipo de Luis Paz porque tenía superioridad numérica y ya llegando al final se notaba. Pero faltaba juego para aprovechar ese hombre de más. El dueño de casa, en cada parate o centro, aprovechaba para recuperar piernas, ya que no podía defenderse con la pelota en su poder.

En los últimos minutos, el "Negro" Agustín De la Canal decidió el ingreso de los pibes Genaro Tellechea y Francisco Santi, con ellos el equipo ganaba frescura y velocidad, para marcar, recuperar y para algún contragolpe.

Lucas Laguna engaña a Franco Vedelini y convierte el penal que le dio el título del Clausura a Sportivo Piazza. NICOLÁS MURCIA

Sobre el final, en tiempo cumplido, Piazza tuvo su oportunidad gracias a una pelota parada. Brian Solano entró solo para recibir un centro y su cabezazo se fue apenas desviado.

Ya no hubo tiempo para más. La final de vuelta, al igual que la ida, terminó empatada en cero. El campeón se definía con disparos desde el punto del penal, por si alguien quería darle mayor dramatismo a la final del Clausura.

Desde los doce pasos el triunfo y el título quedó en poder de Piazza. Lucas Laguna, en el décimo penal de su equipo, venció a Franco Vedelini y le dio la victoria al Industrial por 9 a 8 y llenó de alegría a todo el pueblo villero.