Transporte ilegítimo de estupefacientes y tenencia ilegal de estupefacientes con fines de comercialización, agravado por la participación organizada de tres o más personas, son los delitos que le están imputando desde la justifica federal a un empleado municipal azuleño que había sido arrestado el pasado 25 de marzo en jurisdicción de Tapalqué, cuando en el auto que conducía por la Ruta Provincial 51 llevaba varios ladrillos de marihuana que, en total, pesaron algo menos de 17 kilos.

Luego de que desde la justicia ordinaria se iniciara el sumario penal relacionado con esta infracción a la Ley 23.737, un planteo de inhibitoria promovido por el fiscal Federal Santiago Eyherabide derivó en mayo pasado en que esas actuaciones quedaran radicadas en el ámbito de la justicia nacional con asiento en Azul.

De esa manera, asumió la competencia en la causa -que en un principio llevara adelante desde la justicia provincial el fiscal Lucas Moyano y en la que también entendía el juez de Garantías Juan José Suárez- el magistrado Gabriel Di Giulio.

En ese contexto, el mes anterior el titular del Juzgado Federal número 1 con asiento en esta ciudad dictó, en primera instancia, el procesamiento del empleado municipal, al considerarlo el probable autor de los ilícitos mencionados, enmarcados todos en la ya referida ley de estupefacientes.

A Carlos Dusserrat, tal la identidad del empleado municipal encausado, de la mano de lo que fue ese procesamiento le había sido dictada la prisión preventiva. Y el juez Federal Di Giulio, además, trabó embargo sobre los bienes del imputado "hasta cubrir la suma de cuatro millones de pesos", según se indica en lo resuelto.

Actualmente, aquella investigación penal iniciada tras la aprehensión de Dusserrat -que tiene 32 años de edad- la sigue llevando adelante el ya mencionado fiscal Federal Santiago Eyherabide.

De acuerdo con lo referido a EL TIEMPO por voceros allegados a la tramitación de esta causa, lo dispuesto en primera instancia el mes pasado por el magistrado Gabriel Di Giulio había sido recurrido ante la Cámara Federal con asiento en Mar del Plata por el abogado que, como defensor Particular, está patrocinando al empleado municipal: Osvaldo Bolpe.

Una vez que desde la justicia ordinaria las actuaciones relacionadas con esta infracción a la Ley 23.737 fueron remitidas al Juzgado Federal número 1, el imputado volvió a ser indagado y, al igual que había sucedido en un principio, optó por no prestar declaración.

Varios panesde marihuana

Tal lo que EL TIEMPO ya ha venido informando con relación a esta investigación penal, efectivos de la Estación de Policía Comunal con asiento en la vecina ciudad de Tapalqué habían sido quienes llevaron a cabo el procedimiento que, ese ya referido 25 de marzo en horas de la noche, derivara en la aprehensión del azuleño.

De lo averiguado hasta el momento se sabe que aquel día en que fuera arrestado Dusserrat viajaba solo en un Volkswagen Gol por la Ruta Provincial 51, llevando en el baúl del auto los ladrillos de marihuana que después serían incautados.

Se cuenta también con el dato que indica que, a modo de apoyo, al empleado municipal lo venía escoltando en otro automóvil -un Volkswagen Bora que hasta el momento no ha podido ser localizado- un sujeto que, al observar el control policial montado sobre uno de los accesos a Tapalqué, luego se dio a la fuga en ese rodado.

En esas circunstancias, esa noche Dusserrat dobló en "U" sobre la cinta asfáltica, con intenciones de regresar a Azul.

Pero esa maniobra, considerada sospechosa por el personal policial que se encontraba en el retén -instalado, sobre uno de los ingresos a Tapalqué, en el acceso "Ricardo Romera" y la Ruta 51- derivó en que los efectivos de seguridad salieran a buscarlo.

Instantes más tarde, el empleado municipal pudo ser hallado a un costado de la ruta, cuando había detenido la marcha del auto en el que viajaba.

Al requisar el rodado, en el baúl fue hallada la droga que se tradujo esa noche en su arresto.

Según pudo determinarse posteriormente, se trataban de "dieciocho ladrillos y quince trozos de ladrillos de marihuana" que, en total, pesaron poco más de dieciséis kilos y medio.

Cuando el azuleño fue arrestado en el marco de ese procedimiento, llevado a cabo sobre la Ruta 51 a aproximadamente unos cinco kilómetros -en dirección a Azul- del lugar donde estaba montado el retén de la Policía, también en su poder fueron incautados un billete de cien dólares, más de 480.000 pesos y su teléfono celular.

Horas más tarde, ya cuando era el día 26 de marzo, la casa donde Dusserrat vive en Azul -un inmueble ubicado sobre la calle Misia Barranco, en Villa Piazza Sur- había sido allanada, procedimiento que derivara en el hallazgo de más elementos considerados de interés para esa causa penal que desde mayo pasado se encuentra radicada en la justicia federal.

Teniendo en cuenta la calificación que actualmente tiene este sumario, se sabe que son más las personas involucradas en este hecho. Dos de ellas, a esta altura, ya están identificadas, según se indica en la resolución que convirtió el mes pasado en prisión preventiva a la detención del trabajador municipal.

"La participación, en carácter de coautor, de Carlos Dusserrat surge claramente de la circunstancia de haber encontrado la marihuana en su poder, durante su transporte, lo que hace presumir que la misma se encontraban lista para su comercialización", sostuvo el juez Federal Di Giulio en lo dispuesto, tras concluir también que la gran cantidad de droga secuestrada en aquel procedimiento "hace presumir que no era una mera tenencia".

El análisis de las comunicaciones del teléfono celular incautado en poder del encausado lo ubica hasta el momento como el mismo que, "mientras circulaba por la Ruta 51 en dirección a Tapalqué", coordinaba "la operatoria" que implicaba el transporte de la droga.

Al respecto, cuando todavía esta investigación se llevaba adelante desde la justicia ordinaria se había podido determinar que aquella noche en que fue arrestado Dusserrat llevaba los panes de marihuana para devolvérselos, al parecer en Capital Federal, a quien habitualmente era su proveedor.

Esa situación, pudo determinarse también, había surgido ante la mala calidad de la sustancia vegetal, algo sobre lo que al empleado municipal, que al parecer se dedicaba a vender la marihuana al menudeo en Azul, le habían hecho saber consumidores que eran sus habituales compradores.

Otros aspectos, en tanto, situaban a esta pesquisa en tres escenarios distintos, los cuales aparecían vinculados por quienes, junto con el empleado municipal que está preso, continúan siendo investigados. Esos lugares eran la ciudad donde la droga era adquirida y dos más en las que luego era comercializada bajo la modalidad conocida como "narcomenudeo": Azul y Olavarría.

"El avance progresivo de la pesquisa propenderá al esclarecimiento e individualización de otros sujetos que, dedicados al tráfico ilícito de drogas que tiene como finalidad principal mantener un fluido sistema de distribución de material estupefaciente, han tenido directa o indirecta responsabilidad en el marco de una posible organización criminal destinada a la comercialización de drogas", escribió al respecto el juez Federal Di Giulio al momento de dictarle la medida de coerción al azuleño.

EL DATO

A la espera de que se consiga un cupo para su traslado a una unidad del Servicio Penitenciario Federal, el empleado municipal investigado por esta infracción a la Ley 23.737 sigue privado de la libertad en la Estación de Policía Comunal con asiento en la vecina ciudad de Tapalqué.