TESTIMONIO . "Quiero que el mundo sepa que esa chica que se fue de Azul con una valija llena de sueños no tenía todo resuelto"

Por Laura Méndez

De la Redacción de El Tiempo

Fiamma Fredes, nacida en Azul y residente actual de Capital Federal, se mudó a los 17 años para estudiar Diseño de Indumentaria. Incentivada y apoyada por sus padres (fallecidos), a quienes dedicó esta entrevista, Fiamma construyó su propia marca de ropa: The Luxe.

Hoy, su firma se convirtió en una empresa internacional donde, en cada pieza, "Azul dice presente".

Según ella mantener su identidad es fundamental para la marca, "más allá de la estética o el crecimiento de la marca, hay valores que una aprende en una ciudad chica y que siempre llevé conmigo: la empatía, la cercanía y la calidez en el trato. Aunque mi marca hoy se mueve en un mercado mucho más amplio, esos valores son la base de todo lo que hago".

Aunque es la cara de la marca trabaja con modelos como Zaira Nara, Julieta Poggio, Evangelina Anderson, entre otras.

"Vivir en una ciudad pequeña te da perspectiva"

-¿En qué año te fuiste a estudiar?

-Me fui de Azul a estudiar a La Plata en 2016.

-¿Qué estudiaste?

- Estudié Lic. en Diseño de Indumentaria en la Universidad del Este de La Plata, desde el 2016 hasta el 2020.

-Tenes tu propia marca de ropa de diseño independiente, cómo crees que el ambiente, la cultura o la gente de Azul influyeron en tu visión creativa o en la filosofía de tu marca?

-Crecí en un entorno chico, donde todo es más cercano y donde cada persona tiene su propio rol dentro de la comunidad. Eso, aunque yo nunca encajé del todo ni fui exactamente el perfil clásico del lugar, me marcó muchísimo. Vivir en una ciudad pequeña te da perspectiva: te enseña a mirar distinto, a imaginar otros mundos, a querer crear algo propio. Creo que esa sensación de 'ir un poco a contramano', de sentir que tenía otra estética, otros tiempos y otra energía, fue justamente lo que terminó dando forma a mi marca.

The Luxe nace de esa búsqueda de identidad, de ese deseo de construir algo que no existía alrededor mío. Y paradójicamente, el haber vivido en un ambiente tan diferente al universo de mi marca fue lo que más alimentó mi creatividad. Me hizo soñar en grande y entender que no hay que venir de una ciudad capital para empezar a crear: las ganas y la visión pueden nacer en cualquier lugar.

-¿Si tuvieras que describir el "ADN" de tu ciudad natal, ¿hay algún elemento que intencionalmente o sin querer se haya filtrado en el diseño o el espíritu de tu marca de ropa?

-Si pienso en el ADN de la ciudad donde crecí, lo que más rescato es esa mezcla entre tranquilidad, cercanía y la forma en que todo el mundo se conoce. Aunque mi marca tiene una estética totalmente distinta -más urbana, nocturna y moderna-, creo que hay algo que sí se filtró: las ganas de ir más allá de lo que me rodeaba.

Vivir en un lugar con un ritmo más calmo me despertó una necesidad interna de crear mi propio mundo, mi propio estilo. Esa sensación de buscar algo diferente, de imaginar escenarios que no existían a mi alrededor, fue clave para la identidad de The Luxe. En cierto punto, el contraste entre mi esencia y el ADN del lugar donde crecí fue justamente lo que me impulsó a definir tan claramente quién soy y qué quiero transmitir con la marca.

-¿Cómo es para vos volver a Azul, cada vez que lo haces, después de haber alcanzado el éxito en un mercado exterior?

-Volver a Azul siempre me genera una sensación muy particular. Es como regresar al punto de partida, al lugar donde empezó todo sin que nadie -ni siquiera yo- imaginara hacia dónde podía llegar. Después de crecer profesionalmente afuera y trabajar en un mercado más amplio, volver me recuerda el camino recorrido: las dudas, las decisiones y los pequeños pasos que me llevaron hasta donde estoy hoy. Lo importante es animarse a construir algo propio, volver me ayuda a valorar mi proceso, entender quién era cuando vivía allá y quién soy ahora como emprendedora.

"Hoy The Luxe está enfocada en crecer en los mercados donde tiene mayor movimiento, pero siempre pienso en formas de volver a conectar con mis raíces de alguna manera. No descarto que en el futuro hacer una acción, una cápsula especial o incluso un evento en Azul, porque sería una forma muy simbólica de celebrar el camino recorrido", sostuvo Fiamma.

-¿Qué tan importante fue mantener tu identidad como persona de Azul mientras construías una marca global?

-Mantener mi identidad fue fundamental, más allá de la estética o el crecimiento de la marca, hay valores que una aprende en una ciudad chica y que siempre llevé conmigo: la empatía, la cercanía y la calidez en el trato. Aunque mi marca hoy se mueve en un mercado mucho más amplio, esos valores son la base de todo lo que hago.

Creo que venir de un lugar donde todo se vive de manera más directa -donde mirás a la gente a los ojos, donde aprendés a tratar al otro con humanidad- me dio una sensibilidad especial para manejarme en el mundo de la moda. En un ambiente que a veces puede ser frío o distante, mantener esa identidad me ayudó a construir algo auténtico, real y cercano.

En definitiva, The Luxe creció, pero yo no quise perder esa parte mía que aprendí en mis comienzos: hacer todo con respeto, humanidad y empatía.

-¿Ha habido momentos en que has sentido la necesidad de "traducir" tu origen o cultura local para un público internacional?

-Más que traducir mi origen, lo que aprendí fue a comunicar mi marca de una manera universal. The Luxe tiene un ADN que trasciende cualquier ciudad: es una marca pensada para la noche, para la mujer que se siente poderosa y segura sin importar de dónde venga.

Lo que sí me pasa es que, cuando trabajo con público internacional, pongo en palabras ciertos valores que vienen conmigo desde chica: la cercanía, la empatía, el trato humano. No es 'traducir mi cultura local', sino transmitir mi manera de hacer las cosas. La moda es un lenguaje global, pero la forma en que vos tratás a las personas siempre habla de tus raíces.

Y creo que esa combinación -visión global, valores personales muy claros- es lo que hace que The Luxe conecte con gente de distintos lugares.

"Soy la primera en creer en lo que hago"

-¿Con quiénes trabajas, también despegó tu carrera como modelo.... o sea sos de la modelo de tu marca u ahora en The Luxe, ¿cómo vivis esta experiencia?

-The Luxe nació como una idea muy clara: crear una marca de noche que transmitiera seguridad, actitud y estilo propio. No fue un proyecto improvisado; fue el resultado de años observando la industria, formándome, experimentando y entendiendo qué quería ofrecer y cómo quería hacerlo. Ese fue mi verdadero breakthrough: cuando dejé de pensar en crear 'ropa linda' y empecé a construir un universo, una identidad y una experiencia alrededor de la marca.

Hoy trabajo completamente enfocada en The Luxe. Es mi proyecto principal, mi marca y mi lugar creativo. En el camino fui conociendo proveedores, maquilladores, stylists, fotógrafos, equipos de producción y, sobre todo, una red de personas que entendieron mi visión. No soy modelo profesional -lo hice un tiempo cuando estudiaba, pero no es mi carrera-; sin embargo, elegí ser la cara de mi marca porque genera cercanía y conexión real con el público. Creo que mostrarme usando mis propios diseños habla desde la autenticidad: soy la primera en creer en lo que hago.

Mi trabajo me llevó a entrar en círculos donde todo se mueve más rápido: eventos, alfombras rojas, realities, desfiles y producciones. Tuve la oportunidad de vestir y colaborar con figuras como Julieta Poggio, Zaira Nara, Evangelina Anderson y muchas influencers que hoy eligen trabajar conmigo. Es algo que valoro muchísimo porque demuestra que la marca logró posicionarse como una opción fuerte en un mercado muy competitivo.

Cada paso, cada contacto y cada proyecto fueron parte de una expansión que sentí orgánica: The Luxe creció a medida que yo también crecí. Lo que más disfruto es que, pese a todo lo vivido, la esencia sigue siendo la misma: una marca independiente, hecha con pasión, visión y muchísimo trabajo.

-¿Hubo un evento, un fitting, o una persona que usó tu ropa que marcó un antes y un después en la visibilidad de tu marca?

-Sí, hubo varios momentos que marcaron un antes y un después en la visibilidad de The Luxe. Uno de los más importantes fue cuando empecé a vestir a participantes de Gran Hermano. No fue solo un look aislado: fueron muchas chicas, y la exposición del programa generó un impacto enorme. Incluso tuve la oportunidad de estar en la final del reality con la marca y compartir ese backstage y la celebración con ellos, que fue una experiencia increíble para mí como emprendedora.

Pero si tengo que elegir un hito personal, fue el día que trabajé con Zaira Nara. Fue la primera celebridad con la que estuve todo un día creando contenido, probando looks y hablando de moda. Ese momento me confirmó que la marca estaba creciendo y que el trabajo constante estaba dando frutos.

Esos hitos no solo ampliaron la visibilidad de The Luxe, sino que también me dieron confianza para seguir apostando a lo que hago y para entender que la marca podía entrar en espacios cada vez más grandes.

Desafíos

-¿Cómo manejaste el desafío de entrar a un mercado de moda extranjero, que a menudo ya está saturado?

-Entrar a un mercado de moda extranjero que ya está saturado fue uno de los mayores desafíos. Pero siempre entendí que no se trata de competir con todas las marcas, sino de encontrar tu lugar. Me enfoqué en lo que hacía única a The Luxe: la estética nocturna y la energía de sentirte segura y única. Ese diferencial fue clave para destacar.

También trabajé mucho en entender cómo se comunica la moda afuera y qué busca una clienta en un mercado más amplio. No se trata solo de vender ropa, sino de construir una experiencia y una identidad clara.

Y algo fundamental para mí es la constancia. La suerte existe, pero siempre digo que tiene que encontrarte trabajando. Nada de lo que logré fue casualidad: es disciplina, es insistir, es volver a intentar incluso cuando parece que nadie está mirando.

Creo que esa mezcla -visión, constancia y resiliencia- es lo que realmente me permitió abrirme camino en un mercado saturado y seguir creciendo."

-¿Cómo describirías el nicho o la propuesta de valor única que ofrece tu marca que la diferenció de la competencia internacional?

-The Luxe se diferencia por algo muy simple pero muy potente: es una marca de noche con identidad marcada. No busco abarcar todo, sino especializarme en un estilo que transmite seguridad, actitud y presencia. Eso creó un nicho muy claro dentro de Argentina, que es hoy donde más crece la marca.

Esa misma identidad tan definida fue la que me permitió vender también en Estados Unidos y en otros países de la región, aunque mi foco principal sigue siendo el mercado argentino. Para mí, la clave fue no intentar copiar lo que ya existe, sino ofrecer una propuesta visual y creativa que destaque inmediatamente: prendas pensadas para quienes quieren sentirse protagonistas, no mezclarse.

Creo que la claridad de propósito, la autenticidad y la constancia fueron lo que realmente diferenciaron a The Luxe, incluso frente a marcas con mucha más trayectoria o presencia internacional.

-Ahora que tenes éxito internacional, ¿existe alguna posibilidad o plan de traer parte de la producción, diseño o una flagship store (tienda principal) de tu marca de regreso a Azul?

-Hoy The Luxe está enfocada en crecer en los mercados donde tiene mayor movimiento, pero siempre pienso en formas de volver a conectar con mis raíces de alguna manera. No descarto que en el futuro hacer una acción, una cápsula especial o incluso un evento en Azul, porque sería una forma muy simbólica de celebrar el camino recorrido.

La moda nocturna tiene un ritmo y una dinámica particular, y por eso gran parte de la producción y el diseño hoy están pensados para ciudades más grandes. Pero Azul siempre va a ser parte de mi historia, y me encanta la idea de que, en algún momento, la marca pueda tener presencia allá en un formato que tenga sentido para la comunidad. No sé si será una tienda, una experiencia o algo distinto, pero definitivamente no cierro la puerta.

"Me encantaría poder usar mi experiencia para inspirar a otros jóvenes emprendedores de Azul"

-¿Cómo podrías usar tu experiencia y tu marca para inspirar o apoyar a otros jóvenes emprendedores de tu ciudad?

-Me encantaría poder usar mi experiencia para inspirar a otros jóvenes emprendedores de Azul. Creo profundamente en compartir lo que una aprende en el camino: desde los aciertos hasta los errores. Si mi historia puede demostrar algo, es que no importa de dónde vengas, sino cuánto estés dispuesto a trabajar por lo que querés.

Me gustaría apoyar a otros mostrando que se puede empezar de cero, que no hace falta tener todo resuelto para arrancar, y que la constancia vale más que cualquier recurso.

Si en algún momento puedo dar charlas, mentorías o simplemente compartir herramientas que me sirvieron para construir The Luxe, lo haría feliz. Creo en la idea de que cuando una persona avanza, puede abrir camino para que otros también lo hagan. Y si mi proceso puede motivar a alguien de mi ciudad a animarse a emprender, entonces todo cobra aún más sentido.

"La clave está en entender que no necesitás gustarle a todo el mundo para tener éxito"

-Si pudieras darle un único consejo a la versión de ti misma que estaba empezando en Azul ¿cuál sería?

-Si pudiera darle un consejo a la versión de mí que estaba empezando en Azul, le diría que confíe más en ella misma. Que no se asuste por sentirse distinta, que ese 'ir a contramano' algún día va a ser su fortaleza. Le diría que tenga paciencia, que confíe en su visión incluso cuando nadie más la entienda todavía, y que no se compare: cada proceso tiene su propio tiempo.

También le recordaría algo que hoy tengo muy claro: la constancia lo es todo. Así que le diría que siga, que insista, que aunque el camino parezca enorme, un día va a poder mirar atrás y entender que cada pasito la estaba llevando exactamente donde tenía que estar.

-Si bien el éxito se mide a menudo por ventas y expansión, ¿cuál es tu definición personal de "éxito" porque además!! tenes muchisimos seguidores, cómo manejas tanta exposición porque imagino que no todos los comentarios deben ser "lindos".

-Para mí, el éxito no se mide solo en ventas o expansión. Mi definición personal de éxito tiene más que ver con construir algo propio, con mantenerme fiel a mi visión y con poder vivir de lo que amo. El verdadero éxito es levantarme todos los días sabiendo que estoy creando una marca que refleja quién soy y que inspira a otras personas a animarse. Eso vale más que cualquier número.

Respecto a la exposición, claro que tener muchos seguidores trae cosas hermosas... y también comentarios que no siempre son lindos. Antes me afectaba mucho más; de chica me importaba demasiado lo que pudieran pensar los demás. Hoy aprendí que la seguridad nace de adentro, no de afuera. Una tiene que saber quién es, qué hace y por qué lo hace. Cuando tenés eso claro, es más fácil filtrar lo que no suma.

La clave está en entender que no necesitás gustarle a todo el mundo para tener éxito. Necesitás ser auténtica, trabajar con constancia y rodearte de personas y proyectos que te hagan crecer. Lo demás es ruido. Yo elegí enfocarme en lo que amo y en la comunidad que realmente conecta con The Luxe. Ahí está mi verdadero éxito.

Proyectos

-¿Cuál es el próximo hito (diseño, mercado o proyecto) que te entusiasma alcanzar?

-El próximo hito que me entusiasma es seguir expandiendo la visión de The Luxe. Estoy trabajando en un nuevo modelo de negocio y en una propuesta pensada para un público distinto, que representa un desafío creativo y estratégico súper interesante para mí. No puedo adelantar demasiado, pero sí puedo decir que es un proyecto que marca una evolución en la marca.

Me entusiasma mucho lo que viene porque siento que es una etapa de crecimiento real, de decisiones importantes y de construcción a largo plazo.

Lo lindo de emprender es que cada hito abre la puerta al siguiente, y hoy estoy en un momento donde todo lo nuevo me impulsa a seguir creando.

- ¿Qué quieres que el mundo sepa de esa chica que se fue de Azul con una valija de sueños y regresó convertida en una diseñadora de éxito global?"

-Quiero que el mundo sepa que esa chica que se fue de Azul con una valija llena de sueños no tenía todo resuelto, no tenía un camino claro y, muchas veces, ni siquiera tenía la seguridad que tiene hoy. Pero tenía algo que nunca perdió: ganas. Ganas de crear, de aprender, de crecer y de construir algo propio aunque pareciera imposible.

Si puedo agregar algo, sería una dedicatoria. Esta nota se la dedicaría a mis papás. Ellos ya no están, pero fueron quienes me enseñaron a soñar, a trabajar y a creer en mis ideas incluso cuando no eran fáciles. Muchas de las decisiones que tomaron en su momento fueron para que yo pudiera crecer y tener oportunidades, y todo lo que hago hoy lleva un poco de ellos.

Me gustaría pensar que estarían orgullosos de verme seguir mi camino y apostar por mis sueños. Esta entrevista, de alguna manera, también es para ellos.

"The Luxe nació como una idea muy clara: crear una marca de noche que transmitiera seguridad, actitud y estilo propio". GENTILEZA FIAMMA FREDES