EL IMPUTADO HABÍA SIDO DETENIDO EL PASADO JUEVES

Lo expresó ayer una vecina, al brindar otra versión sobre este hecho, sucedido el pasado 17 de febrero en la zona del Balneario. En la causa penal que se instruye desde una Fiscalía local, al hombre lo acusan de “lesiones graves agravadas, amenazas y desobediencia en concurso real de acciones”.

Ana Rosa Ovando, la madre del hombre que está detenido por este caso.MARTÍN LABORDA

Una mujer desmintió que su hijo, que está detenido por un caso de violencia de género, haya atacado a golpes a su pareja y que mediante esa agresión le provocara la pérdida de algunas de sus piezas dentarias y le desfigurara el rostro, tal como este diario informara en su edición del domingo pasado.

Ana Rosa Ovando, una vecina que tiene 61 años de edad, ante lo publicado se hizo presente ayer en EL TIEMPO para desmentir esa versión. Dichos que,  en principio, habían sido referidos por voceros policiales de la dependencia de seguridad desde donde el jueves de la semana pasada se hizo efectiva la detención del imputado que tiene esta investigación penal.

El encausado es un azuleño de 38 años de edad. Se llama Juan María Pouyannes y hasta anoche continuaba privado de la libertad en la Seccional Primera local de Policía.

Contando con una orden del Juzgado de Garantías número 1 que en Tribunales está a cargo de Magdalena Forbes, el jueves de la semana pasada efectivos de la DDI Azul detuvieron a Pouyannes.

Por una serie de hechos donde su pareja figura como víctima, en una causa penal que se instruye desde la Secretaría Especializada en Violencia Familiar y de Género -que depende de la UFI 6, la Fiscalía a cargo de Karina Gennuso-  en principio está acusado de los siguientes delitos: lesiones graves agravadas, amenazas y desobediencia en concurso real de acciones.

Por esos ilícitos, al día siguiente de su detención, Pouyannes había sido trasladado a Tribunales para ser indagado y declaró.

 “Mi hijo no le pegó”

“Según un abogado me dijo, que no sé quién es, mi hijo no le pegó”, señaló ayer la mujer al dialogar con EL TIEMPO.

Si bien no pudo precisar el nombre de ese abogado con el que ella se entrevistó en Tribunales el lunes que pasó, expresó que dicho letrado le dijo que “sólo fue una caída lo que tuvo la chica”.

“Ella se tropezó y cayó. Si bien no puedo decirlo porque no lo sé, yo creo que eso ha sido en un momento en que los dos iban caminando y han estado discutiendo”, admitió.

La agresión que desde la justicia penal le están atribuyendo a Pouyannes fue situada como ocurrida en las primeras horas del pasado domingo 17 de febrero.

En ese entonces -recordó la mujer- su hijo y la pareja de éste “venían caminando del Balneario”.

“Están diciendo que mi hijo la desfiguró a golpes. Y no fue así. Ella, al otro día, fue a mi casa, que se llevó una moto que es de mi hijo, y en ese entonces no tenía nada”, dijo Ovando ayer también.

“Siempre estaban juntos. Él la trataba re bien y era re bueno con ella. El abogado con el que hablé en Tribunales me dijo que sólo fue una caída y que tiene un raspón, nada más. Primero me habían dicho que esto que hizo mi hijo era grave. Pero después, ese abogado que comenzó a trabajar con la causa me dijo esto que ahora estoy contando”, declaró la madre de Pouyannes.

“Lo que quiero saber es por qué lo tienen detenido sí, supuestamente, él no le pegó”, se preguntó también la vecina.

Sobre su versión de lo sucedido en las primeras horas de aquel ya referido domingo 17 de febrero, señaló que su hijo y la pareja de éste habían ido al Balneario en el auto de la mujer.

“Ahí pasó lo que pasó. A ella le quedó cerrado el auto y no lo pudo abrir. Creo que se puso como loca y cuando los dos volvían caminando empezó la pelea. Ella empezó a decirle cosas y él le pegó un empujón. Al caer, que no sé en dónde, ella se golpeó. Pero mi hijo no le pegó. Lo dijo el abogado que habló conmigo. Ella se cayó y se raspó la cara. No son golpes lo que tiene. Fue una caída. Y al caer se astilló uno o dos dientes”, concluyó la madre de Pouyannes sobre esa situación por la que su hijo sigue privado de la libertad.

El dato

En otro tramo de la charla de ayer con EL TIEMPO, Ana Rosa Ovando afirmó que entre su hijo y su pareja existe actualmente una orden judicial que les impide acercarse mutuamente; aunque ambos -a pesar de esa medida- continuaban teniendo contacto.

LO QUE SE MENCIONA EN LA INVESTIGACIÓN PENAL

Cuando el pasado 7 de marzo se dispuso la detención de Juan María Pouyannes, al ser enumerados los hechos por los que se ordenaba esa medida la jueza de Garantías Magdalena Forbes hizo alusión a lo mencionado por la fiscal Karina Gennuso en la causa penal que está instruyendo.

Con relación al incidente al que aludió ayer la madre del encausado, se indicó que “en el marco de una relación de maltrato habitual y violencia de género, el día 17 de febrero de 2019, siendo aproximadamente la hora una, en calle Alfonsina Storni entre Avenida Bidegain y Avenida 25 de Mayo Juan María Pouyannes le propinó a su pareja... un golpe de puño en el rostro”.

La agresión hizo que la víctima sufriera “hematoma en región del labio superior en región derecha con excoriación superficial, perdida parcial de incisivo superior y pérdida media..., excoriación en pómulo derecho y hematoma en ojo izquierdo, lesiones calificadas legalmente como graves".

Según lo denunciado por la mujer agredida, aquel día ella había dejado estacionado su auto en Bidegain y Alfonsina Storni. Al regresar al rodado, se originó una discusión con Pouyannes.

En esa ocasión, el hombre la tomó del brazo, al tiempo que le expresaba: “Vos me volvés loco”.

Siempre de acuerdo con la versión de la denunciante, posteriormente su pareja comenzó a agredirla, “sacudiéndola de los hombros y propinándole un golpe de puño en el rostro”.

Eso hizo que la mujer cayera al piso y que -“por el golpe”- también se desvaneciera.

Una ambulancia fue convocada al lugar para que personal médico la asistiera. La mujer dijo que al recobrar el conocimiento Pouyannes estaba ahí con ella. En esa ocasión, afirmaba que él no le había pegado. "Se cayó, se cayó...", se menciona en las actuaciones penales que el hombre decía, en la previa a que ella fuera trasladada al hospital, donde quedó internada en observación.

Al Pintos había ido también Pouyannes, aunque ella -una vez en el centro asistencial- pidió que se fuera, ya que “había sido él quien la golpeó”.

En tanto, los otros hechos de violencia de género por los que el hijo de Ana Rosa Ovando está detenido se remontan a los días 20 y 27 de febrero pasados.

Durante los mismos, “en reiteradas oportunidades”, Pouyannes llamó telefónicamente a la mujer y la amenazó, “manifestándole que, cuando se cruzaran, todo iba a ser peor”.

De esa manera, además, desobedeció “la orden de prohibición de acercamiento/perímetro y prohibición de comunicación por cualquier medio” que en ese entonces estaba vigente entre él y su pareja, una medida que data del 20 de febrero pasado.