Dos hermanos acusados de haber atacado a golpes a su padre y provocarle graves lesiones se negaron a declarar cuando en horas del mediodía de este miércoles fueron trasladados a Tribunales para ser indagados, informaron fuentes judiciales.

A uno de ellos, además, le imputan haber amenazado de muerte en dos oportunidades a una tía suya, en el marco de este caso de violencia familiar ocurrido días atrás en esta ciudad.

Contando con órdenes dispuestas por Juan José Suárez, el titular del Juzgado de Garantías número 3 con asiento en el Palacio de Justicia local, ambos hermanos habían sido detenidos durante la mañana de este miércoles por personal policial.

Además de las medidas cautelares, efectivos del Gabinete de Investigaciones de la Seccional Primera, de la Policía Local y de la Comisaría de la Mujer y la Familia allanaron un departamento del Barrio Carús donde se domicilia uno de los ahora imputados y la vivienda del otro hermano que también fue arrestado, una propiedad situada en la calle General Paz, en cercanías a las vías.

En ese mismo inmueble, durante las primeras horas del pasado jueves 6 de junio, había sido brutalmente agredido el padre de ambos detenidos.

Según voceros policiales informaron, durante el allanamiento realizado en dicha vivienda se incautaron dos cuchillos.

Los detenidos fueron identificados como Kevin Nazareno Binzugna, de 22 años de edad; y Miguel Ángel Binzugna, de 27 años.

A los dos, en el marco de una causa penal que se instruye a través de la UFI 6 que en los Tribunales de Azul está a cargo de la fiscal Karina Gennuso, los acusan del delito de lesiones graves agravadas. Y en el caso del menor de los hermanos, también fue procesado por dos hechos de coacción en los que figura como víctima una tía suya que es hermana del hombre que fuera agredido.

Los hechos

El hecho principal materia de esta investigación penal había ocurrido alrededor de la hora cuatro del pasado día 6 de junio.

En esa vivienda situada en la calle General Paz de este medio, aquel día resultó gravemente herido un hombre de 44 años de edad que es el padre de los ahora imputados y fue identificado por voceros judiciales y policiales como Ángel Darío Binzugna.

Según los elementos reunidos en esa investigación penal que se lleva adelante desde la UFI 6, el menor de los hijos le pegó en la cara al padre con una rama de “cardo seco”, de acuerdo a lo descrito con relación a lo ocurrido. Mientras tanto, el mayor de los hermanos le dio a su papá varios golpes en la cabeza con “un elemento tubular metálico”.

Una vez que la víctima cayó al suelo y se desmayó, sus dos hijos continuaron golpeándola. En ese entonces, le dieron varias patadas en el rostro. Después, cuando el hombre pudo reincorporarse, el mayor de sus hijos le arrojó botellas de vidrio que impactaron en diferentes partes de su cuerpo.

Aquel día Binzugña padre resultó con varias lesiones de gravedad. Fundamentalmente en su rostro.

Al respecto, cuando fue trasladado al Hospital Pintos para recibir asistencia, se determinó que el hombre presentaba fracturas en varios de los huesos de su cara.

Después de que fuera agredido, a la vivienda convertida en escenario de este caso de violencia familiar llegó una hermana suya.

En ese entonces uno de los hijos de Binzugna -Kevin, el menor- la amenazó y le dijo que se llevara de ahí a su papá, ya que de lo contrario iba a matarlo, según se menciona en la investigación penal.

Horas más tarde -se indica también en la causa- ese mismo joven que ahora está detenido llamó por teléfono a su tía, ocasión en que volvió a amenazarla de muerte. A ella y a sus hijos.

Un video que comenzó a circular en redes sociales por lo sucedido y diferentes declaraciones testimoniales condujeron a los investigadores hasta los dos hermanos como los sindicados de haber atacado violentamente a su papá.

Con esos elementos de prueba, durante este miércoles la Policía llevó a cabo las detenciones de los dos, quienes después en Tribunales, cuando fueron indagados en horas del mediodía, optaron por negarse a declarar.

Hasta anoche ambos permanecían privados de la libertad en la sede de la Seccional Primera local de Policía.