Un hombre denunció que en su vivienda, en momentos que no había nadie, al menos un sujeto ingresó con fines de robo y se apoderó de diferentes elementos, además de causar algunos daños en la propiedad para llevar a cabo el ilícito.

Damnificado por este episodio delictivo resultó, el jueves que pasó, un azuleño de 52 años de edad llamado Julio César Bermay, que vive solo en una propiedad situada en Chubut entre Leyría y España.

“Ya no se puede más así”, señaló ayer en el contacto mantenido con EL TIEMPO, charla a través de la cual indicó que el ilícito ocurrido el jueves en su casa es el quinto que lo tiene como damnificado en los últimos dos años.

Bermay -que se dedica a la “locución y conducción en radio” y tiene un programa en una FM local- señaló que “hace dos años que vengo sufriendo consecuencias así”, lapso de tiempo durante el cual fueron varias las veces que ingresaron a robar en su casa cuando no había nadie.

De todas maneras, reconoció que el ilícito más reciente fue el que mayor perjuicio patrimonial le causó, teniendo en cuenta los elementos que los delincuentes se llevaron y lo que le costó arreglar la puerta que fuera violentada para concretar este ilícito.

De acuerdo con su testimonio, el jueves último Bermay regresó a su casa cuando habían transcurrido unos minutos de la hora 17, después de que se había ido de su domicilio a la radio donde trabaja cuando aquel día eran las once.

Al volver, observó que la puerta de chapa del inmueble donde reside estaba violentado. Y una vez que ingresó a su casa, descubrió que nuevamente le habían robado.

“Según los peritos me dijeron, a la puerta le hicieron palanca para abrirla”, contó con relación a la presencia ese día de efectivos de la Policía Científica en su propiedad, quienes fueron convocados luego de que en la comisaría primera radicara una denuncia por este nuevo robo que lo tuvo como damnificado.

Una bicicleta tipo “Primavera”, un ciclomotor, una cubrecamas, un aire comprimido y herramientas fueron los elementos que le sustrajeron hace dos días, aprovechando que en la casa no había nadie.

A través de la entrevista mantenida ayer con este diario, el hombre pidió a las autoridades policiales que “hagan algo” para evitar la comisión de más robos en su barrio y, fundamentalmente, en su casa.

“En el barrio patrullaje no se ve, no se ve nada acá”, sostuvo.

Junto con el ilícito más reciente que lo tuvo como damnificado, otro robo que sufrió tiempo atrás implicó para el vecino un perjuicio económico importante.

“En ese entonces yo tenía acá en mi casa una bicicletería”, recordó. “Pero después la tuve que cerrar porque una vez, también cuando no había nadie, entraron y me robaron las herramientas y dos bicicletas. Esas bicicletas eran de clientes a los cuales después yo se las tuve que pagar”.

Una puerta de chapa. Fue violentada por los autores de este nuevo robo ocurrido en la casa de Bermay.