DURANTE LARGAS JORNADAS

Durante viernes, sábado y domingo se desarrolló la Fiesta Regional de Teatro Independiente 2019 impulsada por Teatristas Azuleños (TEAzul). El domingo por la noche se entregaron los reconocimientos. EL TIEMPO dialogó con los integrantes de la puesta ganadora y con los organizadores del encuentro, Sergio Camarotte y Edelmiro Menchaca Bernárdez.

Beatríz Sarmiento se llevó una mención especial a la mejor dirección por la obra “Melocotón en Almíbar” del grupo Boliburg de Azul.

Durante viernes, sábado y domingo se llevó a cabo la Fiesta Regional del Teatro Independiente 2019, cuya organización estuvo conformada por Teatristas Azuleños (TEAzul), es decir el Equipo Delta y La Criba. En el Vivero se llevó a cabo la premiación el domingo por la noche.

La obra “Los decentes” de Olavarría ganaron el primer puesto como mejor obra y pasan a competir en la Fiesta Provincial del Teatro en Pergamino los primeros días de abril.

EL TIEMPO dialogó con uno de los integrantes de la puesta olavarriense los primeros días de abril, y con los organizadores de las jornadas, Sergio Camarotte y Edelmiro Menchaca Bernárdez.

Con el corazón en la boca

En primer lugar Camarotte señaló que “todo esto nace en el año 2017 cuando había que organizar el encuentro regional y nadie quería. En principio lo había tomado Olavarría y después se dijo que no; así que nos miramos con Edelmiro y nos pusimos al hombro la organización del próximo encuentro. Pero para ello teníamos que pedir un subsidio al Consejo Provincial de Teatro porque sino hubiese sido imposible llevarlo adelante. En ese ínterin cambió el director ejecutivo de la entidad organizadora, así que teníamos algo de esperanza porque en las primeras charlas estábamos entre las prioridades (para 2019). Claro, primero había otras cuestiones”.

Agregó que “de todas maneras nosotros comenzamos a organizar, se realizó la convocatoria, fuimos grupo por grupo para que nos apoyaran, que se presentaran con sus trabajos y poder armar un número interesante de toda la región para este encuentro pero con el corazón en la boca esperando que el dinero apareciera. El ok lo tuvimos 15 días antes de la fecha, fue depositado el dinero”.

Menchaca precisó que “con ese monto, costeamos los honorarios del jurado, transporte y hotel, cachet que se logró que cada grupo recibiera. Además de comida y alojamiento a los que se quedaban y más gastos, incluso hasta de limpieza. Fueron 12 elencos y un invitado”.

“Esto fue una excelente experiencia, si no nos peleamos ahora, no nos peleamos más”

Consultados sobre la dinámica de la muestra, Menchaca puntualizó que “trabajamos muchos en el organigrama. Primero fue armarlo de acuerdo a las necesidades de cada grupo participante y ya estábamos tendiendo redes presupuestarias, cuando llegó la plata ya teníamos un gran trabajo organizado. Fue mucho, mucho trabajo y nosotros somos las caras visibles pero hubo mucha gente detrás de todo esto. Porque se empezó a generar un intercambio, los grupos nos empezamos a conocer, los públicos también porque hubo un ida y vuelta en las dos salas y con gran esfuerzo cumplimos al cronograma a la perfección y la gente también cumplió prolijamente”.

Sobre qué destacan de las obras el coordinador de La Criba, sostuvo que “una diversidad importante y seguramente para el jurado fue complejo decidir porque no es lo mismo elegir entre un infantil, un absurdo, que un grotesco, y elegir entre todo debe haber sido difícil”.

Posteriormente opinó que “hay sectores de otra región que están en otro momento del teatro. Que seguramente el CPTI se debería encargar afianzar lo que es la dramaturgia, la dirección, mandando seminarios, entre otras cosas. Yo no digo que sea mejor o peor, sólo que el teatro ha ido evolucionando y hay gene que se ha quedado en el tiempo”.

El director del Vivero, especificó que “hay un arte muy tradicional. Aunque de cualquier manera, yo lamentablemente no pude ver todos los trabajos porque era imposible, pero me sorprendí gratamente. No hubo obras desastrosas, es decir malas, siempre se mantuvo un nivel digno de trabajo. Coincido con Sergio pero lo importante era la participación porque además no éramos jurado”.

Camarotte apuntó que “a nosotros, como directores, nos sirvió para entender ´ésto lo haría, esto no lo haría´”.

Acerca de una comparación con Otoño Azul, Menchaca expresó “si, trajo recuerdos y en cierta manera lo que se produjo, salvando las distancias porque lo otro era un evento internacional, logramos con Sergio es el espíritu de lo que tiene que ser una fiesta o un encuentro, que si bien hay una competencia que está buena porque el que obtiene un reconocimiento es un empujón, el que no es un golpe para saber en qué había que ir laburando, pero es una competencia pero es sana”.

Añadió que “se dio como muy armónico que todos respetaran la decisión del jurado pero por más que no coincidan se celebró el encuentro, se celebró la fiesta”.

“Ahora se corrió esta movida cultural de la Mitre para el lado norte y en esta zona se concentró toda esta movida. Estamos proyectándonos para algo que no es solamente el teatro, sino el movimiento cultural de Azul. Ese evento donde se desarrolló en el cual participó la ciudad y eso fue excelente”.

También el director del Vivero especificó que “se dio que la gente que vino de afuera tanto el director ejecutivo, Federico Irazábal, como el jurado se sorprendieron de que en Azul hay dos centros culturales que les llamó la atención”.

Al mismo tiempo, sostuvo que “recibí comentarios muy buenos de los dos espacios”.

Por otro lado, contó que “acá hay mucho teatro azuleño, y por primera vez había cuatro grupos de Azul y que pudieron haber sido muchos más. Aunque nosotros trabajamos para todos sin excepción, no dijimos ´vamos a llamar a los amigos o a los que tenemos onda´”. Sergio agregó que “incluso a los grupos que no pudieron presentar sus obra los llamamos para que asistan a las reuniones, después está en cada uno si viene o no. Edelmiro hizo lo mismo con la gente en la región. La próxima sede es en 25 de Mayo y eso salió de Azul, de esta fiesta porque el próximo regional en el 2020”.

“Esto fue una excelente experiencia, si no nos peleamos ahora, no nos peleamos más (risas)”.

Para terminar sobre si conocieron gente que vive pura y exclusivamente del teatro, coincidieron en que “hay gente que hace teatro pero que tiene alguna conexión con grupos de Buenos Aires. Sino no, sino que hacen teatro por medio tiempo. Nuestra realidad está muy lejos de eso, tiene que haber una retribución mínima por el trabajo del actor”.

La palabra de los ganadores

Después de la premiación, Pablo Fredes admitió que “de alguna manera nos esperábamos este premio. Estamos muy felices porque trabajamos un montón. Siempre que hacemos una obra trabajamos muchísimo y hacemos hincapié en la actuación y a partir de ahí nace todo lo demás. De hecho el texto nace por estrenar actuación y que eso sea visto y valorado por un jurado de primera, que tiene mucha experiencia, nos alegra un montón”.

Consultado sobre el guión y la dirección mencionó que “la hice yo, pero los texto nacen de improvisar muchísimo y de esa búsqueda”.           

Menciones y premios

El domingo cuando se hizo entrega de menciones especiales fue a la trayectoria a Beatriz Sarmiento (mejor dirección); a la labor en la obra en “Nada es lo que parece”, Marcelo Zabala y a Hilda Jaureguiberry; Pablo Vilela por “TTT”; mejor actriz María del Carmen Racciatti (Los perros de mi memoria). También hubo una mención especial al Grupo de Teatro Comunitario de lavaría “Los bufones del Andén”.

El primer lugar “Los decentes” de Olavarría (como se mencionó anteriormente), el segundo “Flores Grises”, de Azul y el tercer lugar, como mejor obra, se lo llevó “Verdad, la vaca”, de Bolívar.

Posteriormente los organizadores destacaron el apoyo de los elencos participantes, el amor por el teatro y a los medios de comunicación.

EL DATO

“Los Decentes” competirán en el Provincial, en el caso que obtengan el primer premio pasan al Nacional de Teatro Independiente. El Nacional está organizado por el Consejo Provincial y el Instituto Nacional de Teatro Independiente.