El pasado miércoles, Tiffany Guadalupe Licuiman celebró sus dos primeros años de vida, una ocasión verdaderamente especial que mereció una gran celebración. Tiffany es una niña que ha demostrado una increíble fortaleza desde el momento en que nació, pesando tan solo 560 gramos.

Desde su nacimiento, Tiffany enfrentó numerosos desafíos. Pasó los primeros cinco meses de su vida en la unidad de neonatología en el Hospital de Niños "Argentina Diego", donde recibió cuidados intensivos. Durante este período, su familia se mantuvo a su lado, llenos de esperanza y confianza en su absoluta recuperación. No fue un camino fácil, pero el amor y el apoyo incondicional de su familia jugaron un papel crucial en su progreso.

La historia de Tiffany es un testimonio de resiliencia y valentía. Su asombrosa recuperación es un recordatorio de la importancia de la fe y la perseverancia, así como del increíble trabajo de los profesionales de la salud que cuidaron de ella durante esos primeros meses críticos.

Hoy, Tiffany es una niña llena de vida y alegría, disfrutando de cada momento con su familia que tanto la ama.

Su segundo cumpleaños no solo marca un hito en su vida, sino también en la vida de todos los que la han acompañado en su viaje. La celebración de su cumpleaños es, sin duda, una ocasión para reflexionar sobre el milagro de su existencia y la fuerza del amor familiar.

Por tal motivo, EL TIEMPO dialogó con la mamá de Tiffany, Milagros Castañares y la abuela, María Castañares.

"Al día de hoy se le realizan controles"

En primer lugar, Milagros explicó que "Tiffani nació pesando 530 gramos en el Hospital de Niños 'Argentina Diego'. Es decir, mi embarazo fue totalmente normal hasta que tuve turno para la ecografía en las 26 semanas y me comunicaron que no estaba creciendo bien, que tenía que ir de urgencia al hospital. Cuando llegué me dijeron que había que hacer una cesárea de urgencia porque no estaba creciendo".

Sobre cómo vivió esta experiencia, Milagros especificó que "me asusté mucho porque me dijeron que podía pasar cualquier cosa, el panorama no era bueno, pero salió todo bien, hicieron la cesárea y al día siguiente la pude ver en Neo. Apenas la pude amamantar".

Del mismo modo Milagros, contó que "le faltaba mucho desarrollo a los órganos. Al día de hoy se le realizan controles".

Tiffany cuando nació pesando 560 gramos. Después bajó de peso pero hoy está muy bien.

Por su parte, María expresó que "fue difícil primero porque dijeron que era muy chiquitita, era un gatito flaquito recién nacido. Así que a cesárea de urgencia porque los pulmones de la bebé no tenían oxígeno. Enseguida que nació me dejaron entrar a verla, era muy chiquita".

Continuó "me dijeron que el panorama era muy crítico, demasiado, estaba entubada y tuvimos que esperar, lo cual se convirtió en un letargo".

"Fue un gran un sufrimiento, la mayoría de los días decían 'no hay mejoría', pero tampoco empeoraba. Todos los días escuchábamos lo mismo. Se llama Guadalupe por la Virgen de Guadalupe que es la santa de los niños prematuros", señaló.

Continuó contando que "cuando tuvo el alta, a los 5 meses de haber nacido la pudimos llevar a casa".

Agregó que "después del alta, como sus pulmones no estaban totalmente desarrollados, tuvimos que seguir con cuidados".

"El Hospital se hizo cargo de todo, por eso estamos muy agradecidos"

Consultadas sobre quién solventó la internación, mencionaron que "el hospital se hizo cargo de todo, por eso estamos muy agradecidos, usaba pañales muy chiquititos, consumía leche especial y nosotros no compramos nada".

Con relación a si que pensaron en algún momento no iba a sobrevivir, la abuela emocionada expresó que "yo no, yo siempre tuve fe, es más una enfermera entró a la sala y dijo 'ya va a pasar, ya vas a tener otra beba' y organizamos cadenas de oración, nos escribían de toda las iglesias, hubo un gran acompañamiento de la comunidad. Además de las buenas referencias que tendíamos del área de Neo".

"La gente nos decía que tengamos fe, incluso en las redes se manifestaba optimista, apoyaba".

Actualmente Tiffany está muy bien, el año pasado estuvo en terapia, un día antes del cumpleaños e internada dos meses. También tuvo otra cirugía en la vista, la llevaron a Mar del Plata pero está bien. No obstante, todos los meses tiene control.

"Pero lo importante es que ya está bien, recibió mucho amor de toda la familia, del papá".

Por último, destacaron que "agradecemos al Hospital, a Neo, a terapia. Pero tenemos recuerdos que en Neo era la princesa, desde las mucamas hasta las enfermeras y los médicos. A todos, gracias".

Mamá Milagros, Tiffany y la abuela María dialogaron con EL TIEMPO.