María Inés Torterola conoce Parque Pinasco desde hace 30 años, cuando el trazado de las calles comenzaba a mostrar el diseño del barrio y llegaban a instalarse los primeros pobladores, promoviendo el crecimiento de la ciudad hacia el sudoeste.

De aquella época a la actual, el incremento poblacional de la zona, con nuevas viviendas, género una serie de problemas, aún no solucionados por las administraciones municipales.

El barrio Parque Pinasco está habitado por muchas familias de trabajadores que van y vienen a la ciudad; implica, por ejemplo, un aumento en el tráfico, que ha llevado a que la Comuna instale lomadas o lomos de burro para reducir la velocidad.

Pero el gran problema al que hace referencia María Inés Torterola, es la situación que se reitera cada vez que llueve.

La falta de mantenimiento en las calles del barrio, las lluvias y el constante paso de los vehículos, son los factores necesarios para que surjan pozos en buena parte de las arterias que lo rodean.

"Con las lluvias de estos últimos días, es imposible transitar si no es con un vehículo alto, como las cuatro por cuatro, mientras los trabajadores que asisten a nuestras casas para realizar sus tareas, lo hacen en bicicletas o motos, padeciendo las consecuencias de la falta de mantenimiento con el peligro que implica circular en zonas anegadas sin conocer las profundidades de los pozos", se quejó la vecina, en diálogo con EL TIEMPO.

Otro sector de riesgo son las cunetas: "Los que conocemos sabemos que las cunetas son profundas y las debemos pasar con mucho cuidado, pero el que no conoce cree que la cuneta tiene cinco centímetros de profundidad, y tal vez supera el medio metro", especificó.

Sumando problemas, también explicó que "nosotros pagamos Alumbrado, Barrido y Limpieza [ABL], y ninguno de los tres servicios se brindan con la frecuencia adecuada, o directamente no se brindan. Es el caso de la basura que dejo en calle Los Álamos y, para cuándo pasa el basurero, los perros se encargaron de desparramarla".

Refiriéndose a las autoridades. les solicitó "que pasen, que vengan al barrio por el camino que quieran y van a ver que lo que estoy planteando es un problema de mucha gente. Si vienen por avenida Bidegain, tienen que sortear los innumerables baches en la avenida que une los clubes Cemento, Bancario y Alumni, superando el puente que está cada vez más destruido. O bien acceder desde la ruta por calle Alvear o Maipú, que no difiere en nada lo del primer camino".

Barrio Pinasco fue incluido en el plan de mejoras de calles de tierra, específicamente trabajando en las de mayor circulación, pero no en todas.

"El mejorado se hizo, pero lo que no se hizo fue el mantenimiento. De qué sirve -continuó diciendo la vecina-, que pase una máquina hoy, mañana llueva y la máquina no vuelva a pasar".

Sugirió, en tal sentido, que "hagan un trabajo a conciencia, bien hecho, que no tengan que repararlo en el corto plazo y, de esa manera, por un tiempo podrán olvidarse. Y lo mismo hacerlo en otros lugares de la ciudad, evitando el parche que se rompe al poco tiempo".

Finalmente, recalcó que "la comunidad del barrio está disconforme con el destino que les dan a los impuestos que pagamos y no lo vemos reflejado en las obras de infraestructura necesarias. Necesitamos soluciones".