El partido no pudo terminar. La lluvia que tanto amenazaba con tomar el protagonismo del juego lo hizo antes de la finalización de la primera mitad; y luego del descanso, cuando se tenía que reanudar, el árbitro Fabián Lugüercio decidió suspender el partido entre Cemento y Athletic, en la ida de las semifinales del Torneo Clausura de Primera División..

En lo que se pudo jugar se vio un juego parejo. Ninguno de los dos pudo tomar en ningún momento el control del juego y gran parte de los 45 minutos que se disputaron la pelota estuvo lejos de los arcos.

Desde el inicio los conjuntos trataban de imponerse en la mitad de la cancha. Ninguno conseguía ese objetivo y se iban prestando la pelota, y nadie podía darle un buen destino.

A pesar de eso los dos tuvieron su ocasión para abrir el marcador. La primera fue para el dueño de casa, con una llegada de Tomás Binzuña y su remate se fue desviado. La estrellita respondió en la siguiente jugada cuando Facundo Maciel se fue sólo, pero no pudo con Giuliano Frabotta.

El local, con el correr de los minutos, comenzó a ganar la lucha en la mitad de la cancha. Eso le permitía tener un poco más la pelota, pero le faltaba profundidad para inquietar a la última línea de Athletic.

Por su parte, el albo no necesitaba tener la bocha para insinuar más peligro que su rival. Puedo abrir el marcador con un disparo de Luciano Cuartas que se fue por arriba del travesaño.

Con el correr de los minutos el juego se desarrollaba cada vez más lejos de los arcos. Ninguno podía superar la marca de su rival en la mitad de la cancha y todo transcurría sin peligro frente a los arcos.

En los últimos minutos de la etapa inicial, las precipitaciones se volvieron más constante y fuertes y así terminó el primer tempo con el cotejo igualado en cero y con un trámite parejo.

Esa situación climática, con actividad eléctrica, sumado a que se habían borrado las líneas que marcan la cancha, llevó a la terna arbitral, encabezada por Fabián Lugüercio, a suspender el partido.