Un fallo firmado por los camaristas Damián Cini y Carlos Pagliere (h) ratificó la elevación a debate de este sumario, medida que en primera instancia fuera ordenada meses atrás por Juan José Suárez, el magistrado a cargo del Juzgado de Garantías 3 que intervino en esta investigación penal preparatoria.

Unificadas en una misma causa, las investigaciones relacionadas con estos hechos se habían llevado adelante desde la UFI 6 que en los tribunales de Azul conduce la fiscal Karina Gennuso.

A fines de octubre de 2019, además, esa pesquisa había derivado en la detención del joven para quien ahora, según lo dispuesto en esta segunda instancia, se ordenó que vaya a juicio.

Identificado como Lucas David Jorge Miguel, alias "Tiziano" y de 29 años de edad, en aquel entonces la medida cautelar la hicieron efectiva policías de la DDI Azul, durante un procedimiento llevado a cabo en Spegazzini, localidad perteneciente al Partido de Ezeiza que está situada en el conurbano bonaerense.

De acuerdo con lo informado por voceros allegados a la instrucción de este sumario, actualmente el joven se encuentra en libertad.

Le denegaron el sobreseimiento

La ratificación de la elevación a juicio de la causa penal donde Miguel figura procesado fue ordenada desde el máximo Tribunal de Alzada departamental en respuesta a un recurso que en esta segunda instancia tampoco prosperó, el cual había sido formulado por los abogados azuleños que patrocinan al encausado: Julio Vélez y Agustina Lomolino.

En ese sumario que se convertirá en materia de un futuro debate en uno de los tribunales orales con asiento en el Palacio de Justicia de Azul, Miguel figura acusado de los delitos de extorsión -dos hechos- y extorsión en grado de tentativa, en concurso real.

Tal como lo hicieran en primera instancia, ambos abogados habían solicitado ante la Cámara el sobreseimiento de su defendido.

En ese contexto, los defensores objetaban la diligencia que, luego de ocurridos estos hechos de extorsión, había permitido identificar en la ruta el automóvil supuestamente utilizado por el joven para pasar a retirar el dinero y las joyas que dos de las víctimas le entregaron, creyendo que conocidos suyos habían sido secuestrados.

Según sostenían los abogados -quienes además hicieron "reserva del caso federal" de este recurso que ahora en segunda instancia fue rechazado- aquella era una prueba incorporada al expediente "de forma ilegal y oscura", por lo que pedían la declaración de nulidad de las actuaciones en esta causa y, en consecuencia, el sobreseimiento del joven.

Damián Cini, el camarista en votar en primer término para confirmar la elevación a juicio de esta causa, señaló "que el accionar procesal cuestionado no resultó violatorio del derecho constitucional invocado por los impugnantes".

En las actuaciones penales se indicaba que, tras observar diferentes cámaras de seguridad en Azul, fue advertida por los investigadores "la presencia de un único rodado que había realizado una maniobra compatible con el recogimiento del dinero dejado por una de las víctimas en la vereda de su morada, tratándose el mismo de un automóvil Peugeot 206, color gris plata, de tres puertas, con la luz de posición trasera del lado derecho apagada".

Ese dato posteriormente sirvió para identificar al ahora procesado como quien se movilizaba en dicho vehículo, algo que luego se tradujo en que resultara detenido durante un allanamiento realizado en un domicilio de la localidad de Carlos Spegazzini el 29 de octubre de 2019.

"A los fines de reforzar la conclusión a la que arribara, no puedo omitir destacar que las imágenes fílmicas que dieran sustento a la identificación del vehículo ostentan el carácter de prueba reproducible en el acto central del proceso, el juicio, lo que derriba toda afirmación acerca de la imposibilidad de controlar las mismas", agregó Cini en el fallo que -contando con el voto de Carlos Pagliere (h), el otro integrante de la Cámara Penal- por unanimidad confirmó la elevación a debate de este sumario.

Secuestros virtuales

Los tres hechos que dieron lugar a la tramitación de esta causa, que ahora se confirmó que se convertirá en materia de un futuro juicio, habían sucedido en Azul durante los días 7 y 31 de marzo del año 2019.

Uno de los vecinos damnificados, al que llamaron por teléfono y le hicieron creer que su hijo estaba secuestrado, le había dado dinero a los autores de lo que fuera aquella extorsión.

En tanto, una mujer que también fue engañada por teléfono entregó pesos, dólares y joyas a esos sujetos que le hicieron creer que tenían secuestrada a una amiga suya.

Con relación al intento de extorsión que le atribuyen también a "Tiziano" Miguel, aquel hecho tuvo como víctima a otra vecina de Azul, quien alcanzó a darse cuenta de que estaba siendo engañada.

Si bien los delincuentes le dijeron por teléfono que tenían secuestrada a su hija, que vive en otra ciudad, esa mujer la llamó y al hablar con ella comprobó que no era cierto lo que le decían.

Aquel martes 29 de octubre de 2019 en que "Tiziano" Miguel fue detenido en Spegazzini, en Azul se realizó un allanamiento relacionado con esta misma investigación por los secuestros virtuales.

Ese procedimiento tuvo como escenario un inmueble situado sobre la calle Falucho, lugar donde policías incautaron dinero en efectivo que -se sospechaba en ese entonces- también podía estar relacionado con los hechos materia de esta pesquisa.