Según se recordó desde el Legislativo local, "en el marco de la decimoséptima sesión ordinaria, ingresó en el orden del día una nota elevada por vecinos cuya actividad laboral tiene eje en el rubro de catering, salones de fiestas y de veraneo". En ese texto, este grupo de azuleños expresa "su preocupación por la difícil situación que están atravesando actualmente producto de la pandemia de Covid-19". En esa carta también piden ser recibidos en el recinto del Concejo Deliberante para poder dialogar acerca de este escenario preocupante con los ediles locales.

De acuerdo con lo dado a conocer, los vecinos fueron recibidos por los concejales Ignacio Laborda, Verónica Crisafulli, Joaquín Propato y Nicolás Cartolano.

Durante el encuentro, los vecinos explicaron que necesitan retomar sus actividades en forma urgente con el protocolo específico en el marco de la pandemia y solicitan poder funcionar con el 50 por ciento de ocupación, mayormente en el período comprendido entre los meses de diciembre y marzo del año próximo. Además, se refirieron a los gastos que debieron afrontar en lo que va de este año, los cuales no sólo estuvieron sujetos a los impuestos que deben abonar sino también a la devolución del dinero de fiestas que no se pudieron concretar.

Por su parte, los legisladores se comprometieron a analizar lo conversado para poder encontrar el modo de que puedan volver a trabajar en el rubro.

En diálogo con "Tiempo de Radio" (se emite de lunes a viernes de 9.30 a 11.30 por AM 1320 Radio Azul), Juan José Arruti, uno de los vecinos que participó del encuentro, brindó detalles acerca de lo sucedido en la oportunidad e hizo alusión a la más que complicada situación que están atravesando.

"Se nos está complicando todo"

En el inicio de la charla con el programa radial que es producción de este matutino, Arruti refirió que "la preocupación nuestra es importante porque luego de más de ocho meses sin trabajar realmente se nos está complicando todo. Los salones de fiesta no han tenido la posibilidad de reconvertirse en otra cosa, porque están hechos para ese fin, y seguimos cerrados".

"Nos hemos estado reuniendo, charlando, conversando por teléfono, por Zoom y a través de todas esas herramientas tecnológicas que hemos aprendido a utilizar en este tiempo de pandemia.

Comenzamos a pedirle al Ejecutivo alguna posibilidad y luego apareció la ocasión de poder dialogar con esta comisión que se creó en el Concejo Deliberante para atender la problemática de lo que sería la industria y de todo aquello que aún está cerrado y sigue sin habilitar", apuntó.

Asimismo Arruti mencionó que "la verdad es que tuvimos una charla muy amena con los concejales, quienes comprendieron nuestra situación y ahora estamos a la espera de poder armar una reunión conjunta con el Departamento Ejecutivo Municipal para ver si le encontramos una salida, tal como se va encontrando en otros rubros y también en el nuestro en otras localidades".

"No hemos tenido demasiado acompañamiento"

Por otro lado, Arruti aseguró que "verdaderamente nosotros no hemos tenido demasiado acompañamiento. Algunos han podido obtener algún crédito a tasa cero, los cuales hay que decir que ahora se han convertido en un salvavidas de plomo, porque seguimos cerrados y a esos créditos hay que empezar a pagarlos en enero. Otros han tomado el tema del ATP para el pago del personal, pero en definitiva el costo de tener toda esta infraestructura parada es altísimo. Cuando entras a sumar, francamente se hace impagable".

De todas formas, Arruti señaló que "en definitiva, la habilitación o la posibilidad de trabajar nos la puede dar el Ejecutivo. Los concejales pueden tener muy buena voluntad, pero todo pasa por el Intendente".

En la misma línea, el vecino que tomó parte del encuentro manifestó que "los ediles asumieron el compromiso de acompañarnos porque están convencidos de que de alguna manera, encontrando el protocolo que cada actividad requiere, se puede trabajar. Si están abiertos los bares; están abiertas las cervecerías; están abiertos los restaurantes, también podemos estar abiertos nosotros".

"Todos nuestros locales exceden ampliamente el metro cuadrado de cualquier restaurante de Azul. Además tenemos mucho parque, razón por la cual podemos trabajar afuera. Por eso creo que podemos arrancar, aunque sea despacio, para que por lo menos podamos tener un ingreso", subrayó Arruti, para inmediatamente agregar que "se trata de tomar la decisión de atender a una industria que mueve mucha gente. En cada evento nuestro trabajan muchísimas personas y se generan recursos en un momento tan complicado".

"En la región se están haciendo algunas cosas ya"

En otro tramo de la entrevista radial Juan José Arruti indicó que "nosotros somos los más interesados en que se cumplan los protocolos, porque en definitiva de eso depende nuestro trabajo. O sea que si hay alguien interesado en hacer las cosas como corresponde somos nosotros".

"Además estamos viendo que en ciudades de la región se están haciendo algunas cosas ya. En Tandil, por ejemplo, se habilitó para 80 personas en los interiores y para 160 al aire libre. Eso para nosotros sería La Meca actualmente", añadió.

A su vez destacó que "consideramos que podríamos trabajar tranquilamente. Los eventos se acomodan a las necesidades y se pone en marcha la maquinaria así".

"Habitualmente a un cumpleaños de 15 concurren entre 80 y 120 personas. Y hay otros eventos que son menores, como por ejemplo un cumpleaños de 60, adonde va la familia y los amigos; serán 30, 40 ó 50 personas. En los salones nuestros se distribuyen las mesas y ni se encuentran. No tiene sentido que tengamos cerrado", expresó también.

"Estuvimos trabajando y tomando registros"

Finalmente, Arruti hizo hincapié en que "estuvimos trabajando y tomando los registros del cumpleaños de 15 que se hizo en Rafaela, de Tandil y de algunos otros que andan dando vueltas y que han subido a las redes sociales".

"Los protocolos son todos más o menos similares: tomar la temperatura al ingreso, que haya suficiente alcohol en gel, la higiene de los sanitarios, desinfectar las mesas, el control del personal que entra por etapas, el uso de barbijos; es decir, todo lo que requiere y está escrito en la normativa vigente, porque en definitiva uno tiene que tomar lo que baja del Ministerio de Salud de la Nación", concluyó.

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