LA MEDIDA SE HIZO EFECTIVA EL MARTES PASADO. Joven detenido: tiene que cumplir una condena por haber herido a una policía

Un changarín azuleño fue detenido ayer para comenzar a cumplir una condena dictada en un juicio oral desarrollado años atrás, proceso donde quedó demostrado que le había provocado lesiones gravísimas a una policía.

Aquel hecho ocurrió durante un incidente que en mayo de 2016 se produjo en las afueras de un boliche que en ese entonces estaba situado en una de las esquinas de Perón y Colón.

La efectiva de seguridad que resultó lesionada -lo cual sucedió cuando intervino junto a más policías para disuadir a dos grupos de jóvenes que se estaban peleando en ese lugar- desempeñaba tareas en el Comando de Patrullas de Azul. Y según lo demostrado en el debate, el ahora detenido le había arrojado una baldosa que le provocó una grave lesión en la cabeza por la que permaneció durante un tiempo internada.

Voceros judiciales explicaron que la detención fue ordenada luego de que en una de las salas del Tribunal de Casación Penal bonaerense con sede en La Plata se confirmara en todos sus términos el fallo que -tras la realización de un debate en el Tribunal Oral en lo Criminal número 2 de Azul- había derivado en la condena para el encausado, identificado como Matías Abel Rodríguez.

Actualmente de 24 años de edad, teniendo en cuenta lo dispuesto recientemente en segunda instancia desde la Alzada se resolvió ordenar su detención para que comience a cumplir con la pena que le había sido dictada en aquel debate ya referido, consistente en tres años y seis meses de prisión.

El 2 de noviembre de 2017 se había anunciado el fallo con veredicto condenatorio para el encausado, durante un juicio oral en el que intervino Gustavo Abudarham, actualmente ya retirado del Poder Judicial. Ese ex magistrado declaró a Rodríguez autor penalmente responsable del delito de lesiones graves calificadas por haber sido ocasionadas a un miembro de las fuerzas policiales en razón de su función.

Inés Olmedo, una de las juezas que actualmente integra el tribunal con asiento en el segundo piso del Palacio de Justicia local, teniendo en cuenta lo resuelto ahora en Casación fue quien ordenó la detención del changarín, medida llevada a cabo ayer por policías de la Seccional Primera local.

En esa comisaría, transitoriamente, Rodríguez permanece privado de la libertad, a la espera de que se consiga un cupo para su traslado a una unidad penal de la zona, de acuerdo con lo que fuera informado.

Una baldosa que le fracturó el cráneo

Poco antes de la hora siete del 1 de mayo de 2016, a la salida de un boliche bailable que se llamaba "Volvé Carmela" y en ese entonces funcionaba en un inmueble ubicado en una de las esquinas de Perón y Colón, se produjo el hecho por el que ayer Matías Abel Rodríguez fue detenido para comenzar a cumplir con esa pena ya referida de tres años y medio de prisión.

Aquel día, policías se hicieron presentes en ese sector de la ciudad a causa de disturbios que en la calle estaban provocando dos grupos de jóvenes, entre los cuales se encontraba el ahora detenido.

En esas circunstancias resultó lesionada la oficial víctima de este hecho, llamada Fabrina Rancez, quien en esa época desempeñaba tareas en el Comando de Patrullas de Azul.

A los policías que concurrieron a controlar la situación les arrojaron "piedras, botellas y palos", según se mencionaba en el fallo de este juicio oral. Y en ese contexto cargado de agresividad, Rodríguez le tiró una baldosa a Rancez que impactó en su cabeza, fracturándole el cráneo y provocándole lesiones de extrema gravedad por las que después tuvo que ser hospitalizada.

Para cuando aquel hecho se produjo la policía estaba embarazada, aunque por el escaso tiempo que llevaba de gestación ni siquiera ella todavía lo sabía.

Ese día en que fuera agredida, a la mujer la trasladaron en una ambulancia al Hospital Pintos, centro asistencial al que ingresó en estado de coma. Después, tuvo que ser operada y permaneció internada alrededor de dos semanas.

Si bien Rodríguez resultó aprehendido durante aquel incidente, posteriormente recuperó la libertad, beneficio del que gozaba cuando a principios de noviembre de 2017 se conoció el fallo del juicio donde resultó condenado a esa pena de tres años y medio de prisión que desde ayer comenzó a cumplir.

EL DATO

Actualmente Fabrina Rancez ya no pertenece a la Policía, la fuerza de la que se jubiló después de haber resultado víctima de aquella agresión por la que ahora está preso el joven condenado por lo sucedido. En un principio, la mujer permaneció un prolongado lapso de tiempo sin poder trabajar. Además, tuvo que ser sometida a diferentes tratamientos médicos y psicológicos como consecuencia de esa lesión que sufriera en la cabeza.