Las vacaciones de verano son un alivio para la mayoría de la gente de todas las edades, pero en los bebés y niños hay que contar con cuidados de todo tipo ya que tanto la exposición al sol, los rayos ultravioletas, las alergias, las picaduras de insectos (depende el lugar que se visite), el agua de las piletas, del mar y para todo lo que implica estar "en modo vacaciones", se requieren recomendaciones de un profesional.

Es decir si bien el verano trae una mayor exposición al sol. Pero los rayos solares de esta época del año son más dañinos, y requieren protección. Los rayos ultravioletas que traspasan la capa de ozono resultan perjudiciales para la salud. La radiación puede provocar quemaduras de distinta intensidad dañando la piel de manera transitoria y permanente y la exposición inadecuada a la luz solar puede provocar cáncer de piel.

En este marco EL TIEMPO dialogó con la médica especialista en pediatría María Paula Ronchetti quien realizó una serie de importante aportes a la hora de exponer a los bebés y niños al sol. Algunos de estos tips se pueden tener en cuenta para adolescentes, adultos y de la tercera edad.

"Prevenir es mejor que curar"

En principio, Ronchetti contó acerca de su trayectoria, "me recibí de médica en el año 2006, inicié mi residencia de pediatría en el año 2007 que tiene una duración de 4 años, luego hice la jefatura de residentes y desde que finalicé la especialidad me desempeño como médica de planta y guardia en internación del Sanatorio Guemes en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires en terapia intermedia, y en mi consultorio privado acá en la ciudad de Azul".

Con respecto a los cuidados para los más chicos de la casa, precisó que "los chicos suelen pasar mucho tiempo jugando al sol y eso los vuelve propensos a sufrir quemaduras o golpes de calor".

En esta línea recomendó que "como prevención y basándome en las recomendaciones actuales de la Sociedad Argentina de Pediatría los cuidados a seguir son: Hidratarse bien, beber agua segura con mayor frecuencia. En los más chiquitos, estimular la lactancia materna a demanda, llevar una dieta saludable, liviana, fresca, con frutas y verduras que aporten a la hidratación. Elegir lugares frescos, ventilados, y mojarse frecuentemente. Además de usar ropa ligera, clara, holgada, que cubra brazos y piernas (en lo posible con filtro solar), sombrero y sombrilla".

Agregó "evitar los deportes o actividad física al aire libre los días de mucho calor. No exponer al sol a recién nacidos y bebés menores de un año en forma directa".

Destacó que "a partir de los 6 meses de edad utilizar protectores solares de amplio espectro contra radiaciones UVA y UBV media hora antes de la exposición (factor protector solar 50 o más),

renovar el protector cada 2 horas especialmente luego de cada baño. Sudoración intensa o haberse secado con toalla

evitar la exposición solar el horario de las 10 a 16,

aplicar protectores en todas las superficies expuestas, no olvidarse de colocar rostro, cuello, hombros, rodillas, orejas, y dorso de los pies".

Del mismo modo encomendó "usar pantalla solar aún en días nublados al estar al aire libre".

Golpes de calor

En otro tramo de la charla que mantuvo con este diario la Dra, señaló que "es importante comenzar la prevención de las quemaduras solares en los primeros años de vida ya que los efectos de las radiaciones ultravioletas se acumulan a lo largo de toda la vida. Se calcula que en los primeros 20 años de vida una persona recibe aproximadamente el 80% de la radiación solar que recibirá en toda su vida. También es fundamental consultar al medico en caso de comenzar con síntomas compatibles con golpe de calor, como dolor de cabeza, nauseas, vómitos, mareos, decaimiento, irritabilidad, desmayos, sudoración excesiva, piel roja y caliente, tendencia al sueño debilidad muscular o fiebre".

Repelentes

Respecto al uso de repelentes, la médica puntualizó que "los más eficaces contienen DEET (N-n-Diethyl-m-toluamide-m-toluamide), pero también pueden utilizarse productos con citronella o icaridina. No se recomienda rociar con productos con DEET en áreas cerradas. Se recomienda evitar el contacto del producto con los ojos, boca o palmas de manos. Siempre guardar el producto fuera del alcance de los chicos, aplicar primero protector solar y luego repelente. Proteger cunas cochecitos con tul protector para mosquitos en el exterior, y mosqueteros en el interior".

"Cuidados respecto a los ahogamientos infantiles"

Para terminar, la especialista subrayó que "también quiero aprovechar a mencionar los cuidados respecto a los ahogamientos infantiles, que lamentablemente sigue siendo una causa altísima de mortalidad (la segunda causa de muerte por traumatismo no intencional en niños y adolescentes según la OMS - Organizacion Mundial de la Salud): vigilancia atenta y permanete de un adulto responsable nunca permitir a los niños bañarse solos relación adecuada entre el numero de cuidadores adultos y de niños cercos perimetrales para todas las piletas bordes y piso alrededor de la pileta de material antideslizante no dejar juguetes u objetos atractivos flotando en la piscina vaciar luego de su uso las piletas inflables o desarmables que no tengan cerco colocar chalecos salvavidas adecuados a niños pequeños o que no sepan nadar".