EN OSTENDE . Azuleño detenido: tiene que cumplir una condena por violencia de género que quedó firme

De acuerdo con lo informado a EL TIEMPO por voceros policiales y judiciales, el hombre que resultó arrestado en esa localidad balnearia de la Costa Atlántica perteneciente al Partido de Pinamar actualmente tiene 55 años y se llama Héctor Eduardo Karlau.

En un reporte dado a conocer desde la DDI Azul se mencionó que ese hombre registraba un pedido vigente para su captura, teniendo en cuenta que el fallo que lo había condenado meses atrás por los hechos de violencia de género ya referidos había adquirido rango de firmeza y que desde la justicia se ordenó su detención para comenzar a cumplir con la sanción que le fuera dictada.

En ese contexto, los investigadores pudieron establecer que actualmente se encontraba en Ostende, por lo que una comisión policial de la DDI Azul viajó hasta esa localidad y hoy, cuando salió en una motocicleta del inmueble donde estaba residiendo, tras un seguimiento los agentes lo interceptaron para hacer efectivo su arresto.

Horas más tarde fue trasladado a esta ciudad y ahora permanece en la sede de la DDI Azul, a la espera de que el Servicio Penitenciario Bonaerense otorgue un cupo para que sea remitido a una cárcel de la zona.

Condena que quedó firme

Esa condena a un año de prisión de efectivo cumplimiento le había sido impuesta al azuleño Héctor Eduardo Karlau en un juicio cuyo fallo se anunció el 13 de septiembre pasado.

Desarrollado en el Juzgado Correccional 2 con asiento en los tribunales de Azul, en ese debate fue declarado autor a título penal de los delitos de "lesiones leves doblemente agravadas por el vínculo de pareja con la víctima y por su comisión por un hombre contra una mujer mediando violencia de género y amenazas, en concurso real". Y por el otro de los hechos tratados en aquel proceso, se lo condenó también por "lesiones leves doblemente agravadas por el vínculo de pareja con la víctima y por su comisión por un hombre contra una mujer mediando violencia de género".

Héctor Torrens fue el magistrado que intervino en ese juicio donde en representación de las partes lo habían hecho la fiscal Karina Gennuso y la defensora Oficial Adriana Hernández.

Esa pena de un año de prisión de efectivo cumplimiento que el Juez Correccional le dictara al por entonces encausado y que hoy miércoles derivó en su detención en Ostende había sido la misma que la Acusación solicitara en ocasión de formular su alegato.

Según quedara demostrado, los hechos de violencia de género por los que ahora el condenado está preso habían ocurrido en Azul el 18 de enero de 2018 y, el otro, el 25 de enero de 2019.

Ambos episodios tuvieron como víctima a la por entonces pareja de Karlau. Con relación al primero de los hechos se mencionaba en el fallo que el hombre que hoy fue detenido, "en el marco de una relación de maltrato habitual y violencia de género", había agredido a la víctima.

Aquella situación implicó que, en horas de la noche del ya referido 17 de enero de 2018, en el interior de una casa ubicada sobre la calle Tapalqué de Azul Karlau atacara a patadas y golpes de puño a su concubina y la provocara diferentes lesiones, al mismo tiempo que la insultaba y amenazaba con matarla.

En tanto, un episodio de similares características cometió el ahora detenido el 25 de enero del año 2019, cuando en el inmueble ya referido volvió a agredir a quien por entonces era su pareja. En esa oportunidad, "propinándole un golpe de puño en el rostro" y "haciéndola caer al suelo", según se menciona en el fallo de lo que fuera este juicio.

Tiene antecedentes

Cuando en septiembre pasado el juez Torrens condenó al hombre detenido hoy miércoles en Ostende, en la resolución hizo mención a la existencia de diferentes circunstancias potenciadoras de esa pena de un año de prisión de efectivo cumplimiento que le impusiera.

"La naturaleza y los medios para ejecutar las acciones a través de un alto nivel de agresividad, que incluyó golpes hallándose la víctima en el piso"; "la presencia al momento de los hechos" de menores de edad, "colocándolos" Karlau a esos chicos "como observadores directos de episodios violentos"; y las "condenas anteriores" que ese azuleño registra fueron las agravantes valoradas.

Con relación a esta última circunstancia, en el fallo se mencionaba que el hombre que ahora está preso había sido condenado el 16 de julio de 2014 a una pena única de cinco años de prisión -por la que estuvo en la cárcel- y al pago de una multa, fijada en aquel entonces en seiscientos pesos, tras haber sido declarado en un debate que se hizo en el Tribunal Oral en lo Criminal número 1 de Azul autor de una infracción a la llamada ley de estupefacientes.

"Volver a delinquir revela la indiferencia del autor como capacidad psicológica para motivarse en la norma, además de un desprecio por la advertencia social de reproche contenida en los pronunciamientos previos de condena", había referido el juez Torrens en ese fallo que tiempo después quedó firme y hoy miércoles se tradujo en una nueva detención para Karlau. En este caso, para cumplir otra condena; aunque ahora por violencia de género y "necesariamente de cumplimiento efectivo en función de los antecedentes que registra", señaló también en esa resolución de septiembre pasado el titular del Juzgado Correccional 2.