EL ACUSADO DE HABER INCENDIADO UNA CASA . Con prisión preventiva y en una unidad penal

Luego de lo que fuera su detención a fines del mes anterior como el probable autor del incendio intencional de una vivienda ubicada en Plaza Oubiñas, en primera instancia fue ordenada la prisión preventiva para el imputado que tiene la investigación penal que se iniciara por lo ocurrido.

El encausado, un changarín y jubilado oriundo de Tapalqué que tiene 68 años, había sido identificado como Juan Carlos Pacheco cuando el 26 de octubre resultara detenido en esta ciudad, durante un procedimiento realizado por agentes de la Seccional Primera local perteneciente a la Policía bonaerense.

Actualmente Pacheco está preso en la Unidad 2, la cárcel del SPB situada en Sierra Chica a la que había sido trasladado días atrás desde la comisaría primera, en la previa a que se ordenara su prisión preventiva.

En respuesta a una presentación de Adrián Peiretti, el fiscal titular de la UFI 13 que instruye un sumario penal por este incendio, la medida de coerción para el tapalquense la dispuso Juan José Suárez, el magistrado a cargo del Juzgado de Garantías 3.

A través de lo resuelto, Juan Carlos Pacheco continúa siendo considerado el probable autor de un incendio con peligro de muerte, tal la calificación que tiene esa causa penal que lo involucra.

La pena que podría recibir en caso de resultar condenado por este hecho fue valorada por el Juez garante como "un dato objetivo" para ordenar que continúe privado de la libertad, ante "el riesgo procesal de fuga o elusión del proceso" que implicaría por parte del investigado el cese de la medida de coerción.

Además, antecedentes penales que Pacheco registra imposibilitaban que, de resultar condenado por el incendio sucedido hace dos meses, la sanción que reciba "sea de ejecución condicional", concluyó el magistrado para convertir a su detención en prisión preventiva.

Un incendio intencional

El hecho por el que Juan Carlos Pacheco está preso data del 20 de septiembre pasado.

Durante las primeras horas de aquel día, según ha podido determinarse en el marco de esa causa penal radicada en la UFI 13, el investigado "provocó intencionalmente un incendio" en una vivienda situada sobre la calle Amado Diab entre Jujuy y Comandante Franco, en el barrio Plaza Oubiñas de Azul.

El accionar desplegado por el encausado ese día generó -se refiere también en las actuaciones penales que ahora dieron lugar al dictado de su prisión preventiva- un "peligro común para los bienes" que había en ese inmueble.

Esa circunstancia estuvo relacionada a "la gran cantidad de cartones, botellas de plástico y demás elementos acopiados en el lugar", los cuales fueron alcanzados por las llamas y "permitieron" la rápida propagación del siniestro por toda la propiedad.

Cuando los bomberos concurrieron a sofocar este incendio, una vez que lograron combatirlo constataron que los daños en esa casa habían sido de consideración.

Al mismo tiempo, teniendo en cuenta la calificación penal otorgada a lo sucedido, ese siniestro implicó que el vecino damnificado corriera "peligro de muerte".

Llamado Roberto Claro Ortiz, para cuando este incendio intencional se produjo "se encontraba durmiendo" en esa casa donde reside y acopia los referidos elementos afectados y destruidos por el fuego, ya que se dedica a juntar cartones, botellas y demás cosas para la posterior venta.

Una hermana suya llamada Graciela Edith Ortiz había sido quien, al advertir lo que estaba pasando, pudo rescatarlo del interior del inmueble mientras todo se incendiaba.

Esa mujer se convirtió después en la denunciante de lo sucedido, iniciándose la investigación que lo sigue teniendo a Juan Carlos Pacheco como el responsable a título penal de haber provocado este siniestro.

Entre las pruebas que ahora nuevamente, al igual que cuando ordenara su detención en octubre pasado, el Juez garante tuvo en cuenta para pronunciarse a favor de dictarle la prisión preventiva al imputado figuraron registros de cámaras de seguridad instaladas en cercanías a la casa que fuera incendiada.

Además, continúan siendo consideradas como evidencias situaciones durante las cuales Pacheco -que hasta que resultara detenido también juntaba cartones, botellas y demás elementos para la posterior venta- había querido convencer a Ortiz de que le vendiera a él todo lo que acopiaba. Y que ante la negativa de ese vecino, el hombre que sigue preso le advertía que tuviera cuidado porque a esos elementos "te los van a prender fuego".

A modo de conclusión y tras valorar las evidencias incorporadas a esta causa penal, para el dictado de la prisión preventiva del investigado el Juez de Garantías sostuvo que "surgen de la totalidad de la prueba reunida elementos suficientes para vincular a Juan Carlos Pacheco con el incendio sufrido por el damnificado Roberto Claro Ortiz, teniendo principalmente en cuenta las amenazas previas expresadas por el mismo ante la negativa de Ortiz de venderle los cartones que tenía en su poder".

El dato

El vecino damnificado, en ocasión de que le fuera tomada una declaración, había valuado "en más de 700.000 pesos" las pérdidas a causa de los daños ocasionados por el incendio.

Testimonios

"El fuego se inició muy de golpe y rapidísimo. Tienen que haber tirado algo para prenderlo. Yo el ruido que sentí es como de una botella que tiraron contra una pared y se rompió. Sospecho que han tirado una botella con combustible o algo inflamable por la manera en que se prendió de golpe", había referido en su declaración Graciela Edith Ortiz, la hermana del damnificado por lo sucedido.

Esa mujer también contó que aquel 20 de septiembre pasado, cuando minutos después de la hora tres este incendio se produjo, "de no haber auxiliado enseguida a mi hermano, (él) hubiese quedado atrapado en el fuego porque era de noche y estaba durmiendo".

"Pacheco me dijo que me desprendiera de los cartones porque me los podían quemar, prender fuego. No me lo decía como una amenaza directa pero era para presionarme para que se los vendiera" -refirió Roberto Claro Ortiz- a otro cartonero conocido del imputado.

"Pacheco cada quince días volvía con lo mismo, insistiendo para que le venda los cartones. No me acuerdo puntualmente cuánto tiempo antes del incendio pasó por última vez" -había declarado también el vecino damnificado- para decirle nuevamente eso.

Cuando pudo observar los registros de cámaras de seguridad, Ortiz reconoció al acusado como el mismo sujeto que ingresó a su casa para provocar este incendio.