Sin embargo, si los expertos responden al nombre de los analistas de Morgan Stanley, entonces se debe confiar en ellos. Están convencidos de que el mundo de los juegos online podrá sacar todo el partido a la introducción del metaverso y el juego blockchain, la gran novedad en este sector.

Para confirmar esta tendencia, ha salido a la luz la voz del gigante Microsoft, que tras adquirir Activision declaró que este nuevo segmento jugaría un papel clave en el desarrollo de nuevos horizontes: "Gracias al metaverso, la operación es estratégica para Microsoft, permitiendo el desarrollo de mundos virtuales digitales complejos a través de motores de juegos propietarios y acelerando la distribución de contenido de videojuegos y servicios de suscripción a través de la nube", postulan desde la compañía tecnológica.

Siguiendo la estela de Microsoft llega también Sony, que podría incorporar Electronic Arts, y según informa este periódico Disney y Netflix también estarían dispuestos a conformar un conglomerado de entretenimiento de referencia. Desde Sony afirman que "una gran manera para que Disney construya un futuro digital a la vista del metaverso sería la adquisición de Electronic Arts Esto podría crear muchas oportunidades en la dirección del primer verdadero metaverso deportivo".

En resumen, todo el mundo está deseando que se introduzca el metaverso en el juego, un proceso que ya ha comenzado en el sector de los casinos en línea. Un mundo que, gracias también a la pandemia, ha estallado literalmente. El juego ha estado impulsando todo el sector, que gracias a las recientes innovaciones técnicas y digitales ha podido involucrar a muchos nuevos usuarios. Productos como los juegos de slots online son algunos de los que suscitan una mayor expectación, y por ende unas mayores posibilidades en el mercado.

Todas estas grandes compañías están haciendo sus previsiones para poder seguir teniendo una cuota de negocio bastante amplio. El tocar varias disciplinas se tora en fundamental, a la hora de seguir teniendo una ventaja competitiva con respecto a sus rivales.