UNO TIENE 25 AÑOS Y EL OTRO, 28. Están presos por violencia de género

Episodios de violencia de género tienen actualmente privados de la libertad a dos jóvenes, uno de los cuales había sido aprehendido el domingo anterior y el otro resultó detenido durante un procedimiento policial llevado a cabo este jueves que pasó.

Alojados de manera transitoria en la Seccional Primera local, respectivamente habían sido identificados por voceros judiciales y policiales como Matías Iván Vera, que tiene 25 años de edad; y Gustavo Daniel Bermúdez, de 28.

Aprehendido

El primero de los jóvenes mencionados figura acusado de dos hechos de desobediencia, delitos que en ambos casos -según lo investigado- cometiera en "concurso real de acciones". Uno de ellos, en perjuicio de una ex pareja suya. El otro, cuando hizo caso omiso a una orden policial, en la previa a que resultara arrestado luego de una persecución.

Después de que personal del Comando de Patrullas lo aprehendiera hace una semana, este martes que pasó Juan José Suárez -el magistrado a cargo del Juzgado de Garantías 3- había convertido a esa medida cautelar en detención para el ahora encausado.

Ese domingo ya referido en que luego sería arrestado, en las actuaciones penales se menciona que cuando la víctima iba caminando por la calle rumbo a su domicilio Matías Iván Vera la interceptó para hablar con ella.

Posteriormente, la siguió hasta que la joven ingresó a la casa donde reside. Y minutos más tarde, el ahora detenido regresó hasta las cercanías de esa vivienda. En ese entonces, acompañado por otro sujeto,

En esas circunstancias, ambos se escondieron en una obra en construcción, observando hacia el interior del inmueble donde vive su ex pareja.

Teniendo en cuenta que estaba vigente una perimetral que al joven le prohibía mantener contacto alguno con su ex novia, al sector de la ciudad donde este hecho se produjo fue convocado personal policial.

En esas circunstancias, cuando los agentes del CPA le dieron a Vera una orden con intenciones de arrestarlo, el imputado la desobedeció y se dio a la fuga.

Los efectivos de seguridad lo persiguieron en el móvil en que se trasladaban, logrando interceptarlo y aprehenderlo sobre la calle General Paz, en Villa Piazza Sur.

Varios antecedentes de violencia de género que registra en perjuicio de su ex pareja -de mayor gravedad a los que ahora derivaron en el dictado de su detención- habían implicado que a esa joven le fuera otorgado un botón antipánico, el cual accionó cuando el pasado domingo su ex concubino terminó siendo arrestado luego de la referida persecución policial.

En septiembre del año pasado Vera ya había sido aprehendido. También por episodios de violencia de género en perjuicio de su actual ex novia, quedó en ese entonces acusado de los delitos de "coacción y desobediencia" en el sumario penal que se le iniciara. Y otra causa, donde como víctima figura la misma joven, le fue iniciada por los ilícitos de "lesiones leves agravadas y amenazas".

Cuando por todos esos episodios referidos le fue tomada una declaración a la víctima de estos hechos de violencia de género, su testimonio sirvió para conocer en detalle las gravísimas situaciones que padeciera durante el tiempo que había convivido con el joven que ahora está privado de la libertad.

A través de su relato, fue posible conocer también que Vera llegó a tenerla encerrada por alrededor de un año en una casa donde ambos se domiciliaban.

"Él no me dejaba hacer nada sola. Todo el día me controlaba y me revisaba el celular para que no hable con nadie. Tenía que decirle que estaba todo bien para que no se enoje y me golpee; porque si le decía que me quería ir a mi casa él se enfurecía, se volvía loco y me agarraba del cabello y me arrancaba mechones, me pellizcaba, me golpeaba contra la pared, me tiraba al piso, me ahogaba tapándome la nariz y la boca con las manos hasta que le decía que estaba todo bien y que me iba a quedar. Cada vez que me pegaba me decía que repita que estaba todo bien, que no pasaba nada y no lo tenía que dejar solo. Era la única forma que tenía para que se calme y no me siga pegando", contó durante ese testimonio.

En lo investigado se refiere que Vera amenazaba con matarla y con prender fuego la casa donde vive la familia de la joven si ella se iba. Y que también le expresaba que iba a matar a todos los miembros de su grupo familiar.

Lo narrado por la víctima sirvió para conocer más detalles de lo que fue la convivencia con el ahora detenido, quien la obligaba a tener relaciones sexuales con él, para lo cual la golpeaba.

"Me tenía secuestrada", declaró la joven sobre esa situación a la que estuvo sometida en la previa a que se animara a denunciarlo.

Teniendo en cuenta los hechos más recientes y el historial de violencia al que fuera sometida la víctima por parte de su ex pareja, el juez de Garantías Suárez convirtió a la aprehensión del encausado en detención.

Ese magistrado calificó como "gravísimo" al contexto de violencia en que la mujer estuvo inmersa "ante el continuo accionar del encartado, que no ha mermado a pesar de la intervención de los distintos organismos competentes".

Ese accionar, "con el correr del tiempo ha ido aumentando su escalada de violencia", señaló también el titular de Garantías 3 en lo resuelto. Y sobre las conductas desplegadas por Vera hacia su ex pareja, indicó: "La agrede físicamente, amenaza con quitarle la vida y desobedece reiteradamente las medidas cautelares de protección dispuestas por la justicia civil, extremos que conducen a estimar configurado el peligro para su integridad física y psíquica que debemos salvaguardar".

Detenido

La detención para Gustavo Daniel Bermúdez, llevada a cabo por policías de la Seccional Primera este jueves que pasó en horas de la tarde, había sido ordenada por el magistrado Federico Barberena, el titular del Juzgado de Garantías 2.

En el sumario penal por el que ahora ese joven permanece privado de la libertad figura acusado de los delitos de lesiones leves agravadas y coacción, en concurso real.

En las actuaciones penales se señala que "en una situación de maltrato habitual, tanto físico como psicológico", el pasado 15 de septiembre en horas de la noche el imputado agredió a quien era su pareja, lo cual sucedió en momentos que ambos estaban recostados en la cama de una habitación del inmueble donde hasta ese entonces convivían.

Primero la atacó mediante golpes de puño. Después, subiéndose sobre ella y tomándola de las manos. Y forcejeando, en esa segunda instancia quiso darle una trompada en el rostro. Pero la víctima, al defenderse, hizo que ese golpe de puño diera en su antebrazo izquierdo, provocándole en ese entonces lesiones "calificadas legalmente como leves", se señala textualmente en la causa penal relacionada con este caso de violencia de género.

Ocho días después a sucedido aquel hecho -es decir, el 23 del mes anterior- Bermúdez se hizo presente en el inmueble donde reside la mujer, de la que se había separado. Y en ese contexto de violencia de género ya mencionado, la insultó y le refirió textualmente: "Si me llegás a denunciar te voy a prender fuego la casa".

La denuncia que la víctima formulara por los dos hechos referidos derivó en que se ordenara la detención de su ex pareja, quien en esa presentación que hiciera también refirió que en ocasiones anteriores Bermúdez ya había amenazado con matarla.

En la orden que se tradujo hace tres días en el dictado de esta medida de coerción, el Juez garante hizo mención a la existencia de más causas que involucran al joven que ahora se encuentra privado de la libertad. Sumarios penales que tienen como víctimas "por hechos compatibles con violencia de género" a más mujeres.

Además, el investigado registra dos condenas. Una de esas sanciones había consistido en la imposición de una pena de "seis meses de prisión de ejecución condicional" y la otra fue de "un mes de cumplimiento efectivo".

Al ordenar la detención para el encausado, el magistrado Barberena concluyó que "la medida resulta adecuada o idónea para lograr los fines que con ella se pretenden, necesaria e imprescindible; siendo el sacrificio del derecho del imputado equilibrado al grado de satisfacción del interés público perseguido que se alcanza en el caso concreto y en resguardo al derecho de la víctima, a los fines de la protección de la misma contra la violencia familiar y de género".

EL DATO

Las causas penales que tienen detenidos a ambos jóvenes por estos hechos cometidos en perjuicio de sus respectivas ex parejas se tramitan a través de la UFI 1, la Fiscalía especializada en Violencia Familiar y de Género que está a cargo del funcionario judicial Marcelo Fernández.