En el marco de las actividades culturales que se desarrollan en las cárceles bonaerenses se inauguraron esta semana dos Pabellones Literarios en la Unidad 30 de General Alvear.

Así se sumaron 215 personas privadas de libertad al Programa Pabellones Literarios para la Libertad, impulsado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, conducido por Juan Martín Mena.

Y con esta inauguración la Unidad 30 tiene ahora siete pabellones literarios con 744 participantes, en una propuesta que incluye talleres de lectura y alfabetización para los privados de libertad y la firma de acta donde los participantes se comprometen a que priorice el diálogo y la comunicación.

La inauguración contó con la presencia de Julia Lescano, directora de Educación en contexto de encierro, procedente del Ministerio de Justicia y Derechos Humanos provincial y la jefa del departamento de Cultura del SPB, Gabriela Ríos.

El Programa cuenta con 119 pabellones en 54 cárceles y alcaldías bonaerenses que alcanza a más de 7400 privados de su libertad.

También estuvieron presentes en esta inauguración el subdirector de administración de la Unidad 30, Luis Dornaco; el subdirector de asistencia y tratamiento, José Torres; el subdirector de seguridad, Sebastián Fernández; el jefe de sección vigilancia y tratamiento, Luciano Salvareschi; el coordinador de educación y cultura, Diego Ortiz y la coordinadora de pabellones literarios de esta Unidad, Johana Grimaldi.

El objetivo de los pabellones literarios es transmitir a los privados de libertad la pasión y contención que brinda la literatura, ya que conforma una herramienta que evita la violencia dentro de un contexto de encierro y suma de manera integral a la oferta educativa formal.

La jornada contó con el testimonio de los privados de libertad y referentes de pabellones que actualmente funcionan en la Unidad, quienes expresaron la alegría y expectativas compartidas al transitar está nueva etapa.

Cabe destacar que se propuso la inauguración de otro pabellón para la segunda mitad del año.

El programa cultural consiste en el dictado de talleres literarios de manera remota por civiles, por lo general profesores de literatura y letras o docentes, con varios encuentros semanales, contando además con una nutrida biblioteca.