Del mismo modo que sucediera a fines del mes pasado y tal como ya se había hecho años atrás, la sede en Azul del Comando de Prevención Rural perteneciente a la Policía bonaerense se convirtió ayer en el lugar donde se quemaron varios kilos de estupefacientes.

De acuerdo con lo informado por voceros judiciales, en este caso fueron incinerados y destruidos unos 300 kilos marihuana que habían sido incautados durante diferentes procedimientos llevados a cabo desde la UFI 22, la fiscalía donde se instruyen sumarios relacionados con infracciones a la Ley 23.737 que conduce Lucas Moyano en los tribunales de Azul y que, además de esta ciudad, tiene competencia en Las Flores, Tapalqué y General Alvear.

Junto al mencionado titular de esa Unidad Funcional de Instrucción, durante la quema de estupefacientes que en horas de la mañana se llevó a cabo en la seccional ubicada en Urioste y Ruta 3 estuvieron presentes el fiscal General Marcelo Sobrino; la comisaria Inspectora Carolina Cabrera, actual titular de la Estación de Policía Departamental de Seguridad Azul; y Fernanda Ibarra, subsecretaria de Gobierno de la comuna. También, autoridades y efectivos de seguridad del CPR local y la Delegación Departamental de Investigaciones del Tráfico de Drogas Ilícitas y Crimen Organizado.

Plantas de cannabis sativa y marihuana ya fraccionada se destruyeron por orden judicial, luego de que la totalidad de ese tipo de sustancia vegetal fuera trasladada hasta el CPR Azul en un camión con caja volcadora.

"Refleja el trabajo que se ha hecho"

Según el fiscal General Marcelo Sobrino explicó en diálogo con los medios que presenciaron la quema, los estupefacientes habían sido incautados en el marco de las instrucciones de diferentes causas penales que ya han sido resueltas.

"Son muchísimos kilos que están siendo quemados" señaló el jefe de todos los fiscales del Departamento Judicial Azul, para después indicar que esa destrucción de la marihuana "se había demorado un poco por la pandemia".

Más adelante, Sobrino declaró que la incineración de la droga "refleja también el trabajo que se ha hecho desde el Ministerio Público Fiscal respecto a la comercialización o tenencia de estupefacientes".

Al respecto, el Fiscal General fue contundente al señalar y "aclarar a la población" que la actual ley penal argentina "sigue diciendo que la tenencia de estupefacientes es ilegal, sea marihuana, cocaína o cualquier otro tipo que esté dentro del registro de sustancias prohibidas".

En ese contacto con los medios durante lo que fue esta quema, el funcionario judicial afirmó que "hay una interrelación directa entre lo que es la tenencia y el consumo de marihuana con la posterior injerencia de otro tipo de drogas".

"La marihuana -señaló- lo que hace es bajar el sistema nervioso central". Y ubicó al consumo de este tipo de sustancia, a través de los efectos que provoca, en un "peligro para la sociedad" reflejado -por ejemplo- en los "accidentes de tránsito".

Desde su punto de vista, "está demostrado en un gran porcentaje que la gente que normalmente consume marihuana" posteriormente "pasa a las drogas activas y duras como cocaína, éxtasis y otras -de las llamadas químicas- para elevar el sistema nervioso central".

"Ahí es donde viene la violencia", sostuvo para después afirmar que ese "ciclo de la violencia" al que aludía "en realidad empieza un poco antes, con el alcohol".

"Pero la primera droga que tiene contacto directo con la cocaína y otras drogas duras es la marihuana. Y ese es el peligro, es la droga de entrada", declaró.

Más adelante, el Fiscal General hizo alusión a "la importancia que nosotros le damos al trabajo de la persecución del narcotráfico".

"Es completo, no se puede fraccionar", dijo sobre esa actividad que desarrolla en su carácter de jefe de todos los fiscales de la zona centro de la provincia de Buenos Aires para combatir el flagelo de la droga en sus diferentes expresiones.

"Pero para poder prevenir lo peor hay que prevenir lo menor", expresó también durante lo que fue la quema de la marihuana llevada a cabo ayer.

Además, sostuvo: "Para muchos que están con que la marihuana no hace nada, que el cannabis y demás, esto es un tema cultural". Y desde su lugar de funcionario judicial que ocupa en la lucha contra el narcotráfico, afirmó que "nuestra misión es proteger la ley y seguir la acción pública. Y mientras esté penalizado por la ley, lo vamos a perseguir".

EL DATO

El pasado 27 de mayo, también en la sede del CPR local, se había realizado una quema de similares características a la llevada a cabo ayer. En aquel entonces se destruyeron por orden judicial algo más de cuatro kilos de marihuana y unos dos gramos de cocaína. En ese caso, se trató de estupefacientes incautados en el marco de más de sesenta sumarios penales por infracciones a la Ley 23.737 cuyas instrucciones se habían llevado adelante desde la UFI 17, la fiscalía con asiento en Azul perteneciente al Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil.

"Trabajo conjunto"

En declaraciones dadas a conocer por voceros de prensa de la Municipalidad de Azul con relación a lo que fue esta incineración de estupefacientes, se mencionó lo expresado por la subsecretaria de Gobierno Fernanda Ibarra, quien "resaltó el trabajo conjunto que se viene llevando adelante con los representantes judiciales" y "recordó el acuerdo marco firmado con Procuraduría General de la Provincia y los convenios específicos de intercambio, de tecnología y de capacitación para personal municipal y policial".

Además, se hizo alusión a lo que Ibarra dijera al destacar la importancia de la prevención en cuestiones vinculadas con las drogas, "ya que muchas veces son el inicio de un montón de otros delitos, como la violencia de género o la vulneración de derechos de los menores".