Un hombre le disparó a su perra en la localidad bonaerense de Glew, partido de Almirante Brown, luego de que el animal se comiera un matambre que tenía preparado para la cena. El agresor fue demorado por la Policía, mientras que la mascota se recupera favorablemente tras ser operada.

"Negrita", de dos años y de raza rottweiler, recibió cuatro disparos y fue rescatada por el equipo de Zoonosis del Municipio y se encuentra fuera de peligro.

El hombre, que fue demorado y luego recuperó la libertad, quedó imputado por "tenencia ilegal de arma civil y maltrato animal", a disposición de la UFI 4 de Lomas de Zamora, a cargo del fiscal Leonardo Kaszewski.

"Negrita, de dos años, fue asistida, cuidada y operada exitosamente por los veterinarios de Zoonosis Brown, donde actualmente se recupera favorablemente. La perrita se recupera satisfactoriamente con los cuidados de los profesionales que se desempeñan en sanidad animal para todo nuestro país", comunicó el municipio en sus redes sociales oficiales.

El hecho ocurrió el miércoles en Entre Ríos al 100 en la localidad de Glew. Un vecino escuchó el impacto de bala y llamó al 911, y agentes de la Policía llegaron a la casa y encontraron el portón del garaje abierto. Junto a las rejas estaba la perra acostada en el piso, visiblemente herida con manchas de sangre en su cuerpo.

Según informó el medio local Zonales, minutos después de que la Policía llegara al domicilio, el hombre de 51 años salió del interior de su hogar empuñando un arma. "El perro me comió el matambre, por eso le disparé", gritó el agresor. En ese instante, el cuerpo policial dio la voz de alto, lo redujeron y lo esposaron.

Mientras tanto, profesionales veterinarios del equipo de Zoonosis de la municipalidad de Almirante Brown arribaron al lugar, atendieron a la perra y la trasladaron para operarla. (DIB)