De acuerdo con lo referido en un reporte dado a conocer desde la Estación de Policía Departamental de Seguridad local, uno de esos hechos había derivado en la aprehensión de un joven, quien quedó acusado de los delitos de hurto en grado de tentativa, atentado y resistencia a la autoridad.

Agentes del Destacamento de Infantería hicieron efectivo el arresto del joven, después de que en la estación de servicios que está en Colón e Yrigoyen "había sustraído elementos de limpieza de la playa de carga".

La maniobra fue advertida por un empleado de dicha estación, lo que hizo que instantes después personal policial lo aprehendiera en Colón entre Yrigoyen y San Martín, cuando en su poder tenía los elementos de los que se había apoderado.

En esas circunstancias el joven -identificado por voceros de seguridad como Gabriel Ozán y de 25 años de edad- "intentó golpear a los uniformados, resistiéndose a su aprehensión".

En tanto, un sumario penal caratulado en un principio como desobediencia, atentado y resistencia a la autoridad le había sido iniciado a un hombre de 55 años que también resultó arrestado durante este fin de semana que pasó. En su caso, tras haber evadido en el auto que conducía -un Citroën C4- un control policial que estaba instalado en Bolívar y Necochea.

Identificado como Juan Ramón Ruarte, luego de una breve persecución el conductor del auto pudo ser arrestado en Mitre y Burgos, lugar donde, para evitar que se llevara a cabo la referida medida, "intentó agredir al personal policial, ofreciendo resistencia a su aprehensión", según fuera informado.

La tercera de las aprehensiones tuvo características insólitas y se tradujo en el inicio de un sumario penal que fue caratulado como daño y violación de domicilio, in fraganti delito.

En ese hecho intervino personal del Comando de Patrullas e involucró a un joven de 23 años identificado por los voceros de seguridad como Lucas Damián Puertas.

Según lo informado, había ingresado a un comercio -situado sobre la calle San Martín entre Arenales y Rauch- "previo romper el vidrio de la puerta principal".

Lo curioso sucedió cuando, alertados por un llamado al 911, llegaron para intervenir en lo sucedido los policías y el propietario de ese negocio, quienes hallaron al joven "durmiendo dentro del local".