Asimismo, desde la entidad barrial se habla de la "intencionalidad" de "personajes, que salen en medios de comunicación afines, que permanentemente intentan preocupar al vecino ante distintas situaciones".

Es claro que cualquier persona que esté tomando agua contaminada, utilizándola también para cocinar y ducharse, se inquiete por esta situación y, por lo tanto, no sería necesario que "te intenten preocupar" desde ningún espacio político partidario, fuese cual fuese. Y si hay chicos en la familia consumiendo esa agua, más aún.

Además, desde la comisión vecinal se hace hincapié en que están al tanto de la problemática y que se han gestionado los canales necesarios "para llevar adelante una solución para que los vecinos puedan contar con este fundamental servicio".

La pregunta que surge a partir de esa aseveración es: ¿ante quién se llevó adelante esta gestión?, porque desde el Municipio aseguraron no estar al tanto de esta situación (a pesar de que se había enviado una nota a una funcionaria en febrero de este año), ya que la secretaria de Gobierno Fernanda Ibarra afirmó que el Intendente tomó conocimiento de lo que sucede en ese sector de la ciudad a partir de la nota publicada en EL TIEMPO este domingo que pasó.

Más allá de las diferencias políticas, los vecinos de Villa Piazza Sur merecen una solución concreta a esta problemática a la mayor brevedad posible. Y la totalidad de los actores involucrados en la situación (Departamento Ejecutivo, concejales, referentes barriales y autoridades de la CEAL, entre otros) deben estar a la altura de los hechos para brindárselas urgentemente, dejando de lado todo tipo de mezquindades partidarias.