Héctor Pitluk, docente del Centro Educativo para la Producción Total N° 31 de Pablo Acosta, se refirió al trabajo que se viene realizando desde esa institución. Entre otras cuestiones, brindó detalles de los objetivos que se persiguen en el establecimiento; de los proyectos planteados a corto, mediano y largo plazo; y de la intensa labor que desarrolla tanto el plantel docente como el Consejo de Administración del CEPT, siempre con la mira puesta en el arraigo y en el futuro de la comunidad de ese paraje del Partido de Azul.

"Fortalecer el arraigo en el ámbito rural"

En el comienzo de la charla mantenida con EL TIEMPO, Pitluk contó que se trata de una institución que trabaja exclusivamente con chicos del ámbito rural. "Esa es la función de los 35 CEPT que funcionan en la provincia de Buenos Aires. El objetivo fundamental es colaborar y fomentar el arraigo de la familia rural", explicó el docente.

En el mismo sentido sostuvo que "generalmente en el campo se sufre un desarraigo cuando los chicos llegan al Secundario y por ahí se tiene que ir la madre con el niño o el niño solo a la ciudad para poder cursar esos estudios. Por eso la idea de los CEPT fue fortalecer el arraigo en el ámbito rural y que puedan continuar con su vida en el lugar en el que se desarrollan".

A raíz de eso, dijo, "los chicos están una semana en la escuela, lo que nosotros llamamos permanencia. Y cuando se van a sus casas, los docentes los visitamos y vemos cómo está la cuestión pedagógica, no sólo de nuestra área sino de todas las demás. Ayudamos con las carpetas, vemos cómo es la situación familiar, cómo están con las tareas que hacen ayudando a los padres en el trabajo rural o con sus propios emprendimientos. Esa es nuestra tarea como promotores comunitarios".

"La idea de la creación de los CEPT fue la de fortalecer el arraigo en el ámbito rural y que puedan continuar con su vida en el lugar en el que se desarrollan", señaló el docente.

Según dio a conocer Pitluk, "la función del CEPT, aparte de la pedagógica, es también la de interactuar con la comunidad del lugar, para lo cual funciona un consejo de administración, que es algo más parecido a una cooperativa que a una cooperadora de una escuela tradicional".

"Ese consejo de administración tiene un presidente, un vicepresidente, un tesorero y demás integrantes. A partir de ahí, en asamblea se comienza a desarrollar lo que se denomina un Plan de Desarrollo Local, el cual tiene que ver con determinar cuáles son las necesidades de la comunidad y las inquietudes que se quieren desarrollar", explicó el docente, quien paso ejemplificó: "En Pablo Acosta ahora hay un proyecto destinado a construir una salita de Atención Primaria de la Salud".

En el mismo sentido Pitluk refirió que "siempre los proyectos surgen respetando las necesidades de la comunidad, no es que los docentes o el CEPT llegan y dicen lo que hay que hacer. El consejo de administración -que está integrado por gente de la zona, fundamentalmente por familiares de los chicos- es parte fundamental y es donde se resuelven estas cuestiones".

La Fiesta del Arraigo y la Familia Rural

En otro tramo de la charla con este matutino, el docente destacó que otra de las iniciativas que se desarrolló en este marco se generó a partir de la inquietud del consejo de jóvenes estudiantes del CEPT. "Sucede que los chicos en el campo tienen pocos lugares de encuentro, razón por la cual surgió una necesidad en ese aspecto. Entonces, les comentaron lo que les estaban pasando al consejo de administración y de ahí salió la idea de la Fiesta del Arraigo y la Familia Rural", señaló.

La Fiesta del Arraigo y de la Familia Rural fue impulsada a partir de una necesidad de los alumnos del CEPT y resultó un éxito.

De acuerdo con lo indicado por Pitluk, esta actividad "estuvo espectacular porque además se trabajó de manera horizontal, comunitaria y surgió de una necesidad de la comunidad".

"Se hicieron diez comisiones de distintos temas donde participamos los docentes promotores, los integrantes del consejo de administración y otros miembro de la comunidad de Pablo Acosta. Creo que ahí estuvo la base del éxito de esta fiesta, en que se trabajó muy horizontalmente, resolviendo las cosas por acuerdos y no por votación", añadió.

"Hacemos un trabajo interareal"

Al hacer alusión a las materias que cursan los alumnos que concurren al CEPT N° 31 de Pablo Acosta, Pitluk indicó que "se reciben de Técnicos Agropecuarios y es por eso que tienen 7° año. Por ejemplo, en el área de Exactas -a la que pertenezco- tienen Matemáticas y Física, que son las materias habituales de cualquier escuela. Lo que sucede es que nosotros hacemos un trabajo areal e interareal, tratando de -algo que no es tan sencillo- interactuar entre todas las áreas. En lo que tiene que ver con Producción trabajan con cuestiones que por ahí también existen en una Escuela Agraria, como granja, huerta, tambo, maquinaria agrícola y demás". Y prosiguió: "En Pedagogía de la Alternancia tienen algo que se denomina Herramientas, que no son materias puras. Con el concepto de que sean transversales, se involucran diferentes docentes y los chicos tienen que -por ejemplo- elegir un tema en la familia y desarrollarlo durante todo el año. Y al final de la cursada exponen su tesis ante una mesa de docentes".

"Ahí generalmente se trabaja sobre problemas que surgen en su propia familia, en su entorno. El tema de los caminos rurales es algo que es muy recurrente: también la salud, cuestiones muy específicas de la producción, enfermedades de los animales y otras situaciones que se dan en ese ámbito", subrayó el docente.

"Que se puedan desarrollar comunitariamente"

Por otro lado, Pitluk informó que el CEPT N° 31 de Pablo Acosta funciona desde hace 15 años. "En principio, cuando se puso en marcha, era para pequeños productores, empleados rurales, etcétera. Hoy en día, la mayoría de los estudiantes son de familias de empleados rurales, sobre todo en nuestra zona, donde los campos son de extensiones muy grandes", contó el docente, para luego añadir que "después hay chicos que siguen sus estudios, algunos están estudiando Veterinaria y otros Agronomía. Incluso, uno de los alumnos de la última promoción va a cursar el Profesorado de Geografía".

De igual forma, Pitluk manifestó que "ese es otro de nuestros objetivos, y que se puedan desarrollar comunitariamente, que todo eso que nosotros les brindamos puedan volcarlo al trabajo en grupo".

"Se nota cada vez más interés"

Sobre el final de la charla con este diario Pitluk hizo alusión al hecho de que, a la brevedad, se va a inaugurar una obra de infraestructura que resulta trascendental para el CEPT N° 35. "Cuando los chicos se quedan a dormir hay una habitación para los niños y otra para las niñas, la cual -como generalmente son menos- era muy chiquita. Ahora se replicó en una ampliación y se hizo un aula nueva, lo cual resulta fundamental", destacó.

Por último, el docente Héctor Pitluk concluyó que "dependiendo del año, tenemos entre 80 y 90 familias en la institución. Incluso estábamos limitados con la situación de las nenas antes de la obra de ampliación, porque en algún momento nos quedábamos sin lugar. Es una matrícula importante y se nota cada vez más interés".

"Dependiendo del año, tenemos entre 80 y 90 familias en la institución. Es una matrícula importante y se nota cada vez más interés", destacó Pitluk.