El recientemente designado director de FANAZUL, ingeniero Oscar Horacio Espinosa, dialogó con "Tiempo de Radio" (se emite de lunes a viernes de 9.30 a 11.30 por AM 1320 Radio Azul) acerca de la actualidad de la planta que Fabricaciones Militares tiene en esta ciudad. Entre otras cosas, durante la charla, Espinosa se mostró orgulloso por la responsabilidad que le delegaron para conducir nuevamente los destinos de la fábrica, teniendo en cuenta que estaba al frente de la misma al momento que la gestión de Mauricio Macri decidió cerrarla. "Para mí es un honor estar nuevamente a cargo de una planta tan emblemática, que en octubre cumple 74 años", manifestó en ese sentido. El flamante director de la sede local de FM también remarcó que el desmantelamiento se realizó con "saña" y desmintió que FANAZUL haya sido "un centro de militantes".

"El mejor potencial que tenía y tiene Fanazul, es su gente"

- ¿Qué significa para usted estar nuevamente al frente de FANAZUL?

- Para mí es un honor estar nuevamente a cargo de la planta y obviamente estoy muy agradecido por la oportunidad que me brindan el ministro Agustín Rossi, la licenciada Daniela Castro y el Directorio de Fabricaciones Militares, cuyo presidente es el Dr. Iván Durigón. Además se trata de una emblemática fábrica que en octubre va a cumplir 74 años.

- Teniendo en cuenta que no debe ser sencillo poner en marcha una fábrica en esta época ¿Se hizo difícil volver a aceptar un cargo de estas características?

- La decisión fue difícil desde el punto de vista personal y familiar, a raíz de toda la situación que tuvimos que vivir con el cierre de la planta, obviamente que nada comparable con la de los compañeros fabriqueros, que lo sufrieron muchísimo y algunos todavía lo siguen sufriendo.

La realidad es que fue un daño familiar y personal muy grande, pero creo que estamos hechos para los desafíos, a los que hay que tomarlos con mucho compromiso y pasión, tratando de revertir las malas políticas que han sido tomadas con la fábrica FANAZUL.

- Todos los fabriqueros y dirigentes gremiales con los que hemos dialogado destacan el conocimiento que usted tiene de la fábrica. ¿Es ese un punto a favor, un paso adelante, en pos de la reapertura?

- Eso también no deja de ser un gran compromiso. Agradezco a todos mis compañeros el apoyo que me brindan y que es cotidiano. El 11 de julio cumplí 30 años en la fábrica y la experiencia sirve muchísimo en estos casos, sobre todo ante el estado de deterioro que tiene FANAZUL actualmente.

- Recién mencionó que cumplió 30 años en la fábrica ¿Eso indica que siempre tuvo en cuenta la posibilidad de la reapertura de la planta?

- Siempre. Nunca creí que esto no se iba a dar. La realidad es que el gobierno anterior, o los directivos de Fabricaciones Militares anteriores, creyeron que podían quitar la identidad de una empresa desmantelándola de la forma en la que lo hicieron y tirando un par de letras, lo cual afectó desde lo psíquico pero que jamás podría afectar el poder de su gente. Yo lo dije muchísimas veces durante estos 30 años: el mejor potencial que tenía FANAZUL era su gente, y lo sigue siendo todavía.

"Estamos trabajando muy fuerte en los proyectos de reactivación"

- ¿Qué posibilidades existen de que la fábrica pueda funcionar en lo inmediato?

- El tema está en que todos los días nos encontramos con alguna novedad desalentadora, por el estado de deterioro que se produjo durante el desmantelamiento.

La fábrica se desmanteló con la idea de que nunca más se volviese a producir, razón por la cual eso lleva tiempo y realmente sería muy imprudente mencionar un plazo.

La realidad es que todos los días nos encontramos con algo distinto. Estamos trabajando muy fuerte en los proyectos de reactivación, pero hablar de tiempos sería una imprudencia de mi parte, ya que hay una ansiedad muy grande, sobre todo en aquellas personas que aún hoy siguen sin trabajo.

Lo importante es decirles que tenemos un gran compromiso y estamos trabajando todo el día para tratar de salir adelante lo más rápido posible.

Obviamente que la pandemia también ha sido un impedimento importante, por el tema de que no se puede avanzar en auditorías y en algunos requerimientos técnicos que necesitamos que vengan del AMBA

"Nunca fue un centro de militantes"

- ¿Ya se definió una línea de producción?

- La línea en la que estamos trabajando es la relacionada con una planta de destrucción de chalecos y el posterior reciclado, o recuperación, de la tela aramida, que es la que hace la resistencia mecánica y de temperatura en el chaleco.

- ¿En lo que tiene que ver con la desmilitarización también se está trabajando?

- Hemos presentado alguna propuesta para la planta de desmilitarización. Lo que sí, todo lleva su tiempo.

Cuando hablamos de desmilitarización nos ponemos en dos condiciones técnicas diferentes: una es desmilitarizar por destrucción y otra es desmilitarizar por recuperación de algunos componentes de esos explosivos. En ambos casos también estamos trabajando y todo es cuestión de tiempo y de ir viendo las condiciones para poner los edificios en forma segura.

Uno de los grandes errores que hemos tenido en FANAZUL en años anteriores es el relacionado con la difusión de lo que se hacía en la fábrica.

Es decir, FANAZUL tenía 253 personas al momento del cierre; no solamente teníamos certificadas todas las normas de calidad (como las ISO 9001) sino también las OSHAS 18001 (que son las de seguridad y salud ocupacional); teníamos una mención a un premio nacional a la calidad, precisamente en lo que es la versatilidad de los puestos de trabajo de riesgo y además en el programa de seguridad laboral; teníamos 2960 horas de capacitación en total del personal en un año, lo que nos ponía al nivel de las industrias más riesgosas que podemos tener; estábamos asociados a una entidad en la que se encuentran todos los grandes especialistas a nivel internacional en el tema explosivos; capacitábamos a más de 800 agentes de las fuerzas armadas y de seguridad, bomberos, policía aeroportuaria, no solamente de Argentina sino también de países extranjeros; hacíamos como producto la nitroglicerina de uso medicinal.

Hay muchas cosas que se hacían en FANAZUL y por ahí lo que se ha tratado de instaurar en la sociedad es que era un centro de militantes, lo cual nunca fue así y estuvo muy lejos de serlo. Por eso dan muchísima bronca algunas posturas que se han tomado respecto a lo que se hacía en FANAZUL. Invito a toda la sociedad a que nosotros mismos le podamos mostrar lo que realmente era FANAZUL.

"Se hizo un desmantelamiento con saña"

- Teniendo en cuenta todo lo que usted dice ¿Pareciera que hubo un ensañamiento con más de 70 años de historia?

- Sí, sin lugar a dudas. El desmantelamiento de una empresa de este tipo no demanda un tiempo menor a tres años, acá y en cualquier parte del mundo, y con técnicos especializados. Acá se hizo un desmantelamiento en un par de meses y con saña...evidentemente fue con mucha saña en algunos lugares.

"La esperanza es que se tomó la decisión política de reabrir"

- ¿Cuál es la esperanza que le puede dar a los más de 200 trabajadores que esperan la reapertura de FANAZUL?

- La esperanza está en que este Gobierno tomó la decisión política de reabrir. En que el ministro Agustín Rossi, la licenciada Castro y el Directorio de Fabricaciones Militares están dando el apoyo para que FANAZUL vuelva a reabrir sus puertas a la brevedad posible. Y decirles que nosotros -las 16 personas que estamos actualmente en la fábrica- tomamos el compromiso necesario, con la gran pasión que tenemos y sentimos, para que esto se pueda cumplir en un breve plazo.

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