18 de julio de 2021

"MEMORIAS SINVERGÜENZAS": (AN)ARCHIVO DISIDENTE DE LA CIUDAD DE AZUL.

"MEMORIAS SINVERGÜENZAS": (AN)ARCHIVO DISIDENTE DE LA CIUDAD DE AZUL. . Perdón si te confundo queriendo tantas cosas a la vez

APOCA, la agrupación que organizó la primera marcha del orgullo en la historia de Azul (realizada en enero de este año), está publicando en El Tiempo una serie de textos en relación con el mes del orgullo, celebrado durante junio por distintas organizaciones del colectivo LGBTTTIQPNB+ a nivel global. APOCA dice ofrecer: "testimonios históricos, contemporáneos, e incluso futuros, hechos por las personas que formamos el colectivo". En esta quinta entrega, escribe Sara Castaño.

Por Sara Castaño

La traducción y su significado todavía son motivo de discusión entre quienes se ocupan de eso. ¿Qué es traducir? ¿Qué se busca? ¿Cuál es el objetivo? Podríamos decir que la función es difundir un mensaje, llevarlo más lejos. Pero no hay aún una definición fija, sino distintos focos y propósitos. A veces el foco está en el mensaje, y otras veces en el estilo y la intención del autor. Y para cada enfoque existen diferentes personas que se ocupan de cada una.

Nosotres, en nuestra vida, tenemos que ocuparnos de ambas. Aun hablando el mismo idioma nos encontramos constantemente en la necesidad de traducirnos, explicar qué queremos decir, quiénes somos, qué buscamos, porqué nos congregamos en plazas, marchas, bailes y festejos. ¿Cuál es nuestro reclamo? ¿Qué nos hace falta? Resulta tan accesible mirar películas y series de habla extranjero y, sin embargo, hay tanta resistencia al vocablo que manejamos. El vocablo indiscreto, desprolijo, me rehúso a decir prohibido, todavía no colonizado por la RAE y lejos de ser definido y limitado.

Hay quienes nos tildan de nuevos, modernos, y se disculpan así por no entender, cuando no es eso lo que buscan. Entender es percibir y quienes nos ven de ¿afuera? lo que menos quieren es percibirnos, si la comodidad de no hacerlo les fue concedida desde que encerraron nuestras existencias en armarios pesados y nos asfixiaron con abrigos y bolsitas de naftalina. Nos encerraron obligándonos a guardar silencio, nos quitaron la voz y las palabras, por tanto tiempo que casi olvidamos como mencionarnos.

Quienes nos ven no quieren entendernos, porque no quieren involucrarse. Eligen seguir viendo de afuera, pero sabiendo con exquisito detalle cómo conformamos nuestros grupos estrafalarios, con qué plata levantamos nuestras carrozas, con qué derecho caminamos las ciudades sin vergüenza. Todo hay que explicar, para todo hay que dar razones y solamente porque no somos lo dado, lo común, no están acostumbrades a vernos, a vivirnos, a tenernos en su mesa. Y si bien no dudamos en armar nuestras propias mesas, redondas, enormes, con sillas infinitas y listas para ser usadas como pasarelas, siguen existiendo, en ocasiones, las fiestas de fin de año, que no deberían ser tortuosas. No debería haber traducción ni guion que tuviéramos que armar el día anterior para no incomodarnos. Porque el chiste está hecho en que vamos a romper con un discurso, a molestar, pero la (mi) realidad es que muchas veces no tenemos ganas ni energía para dicha exposición. ¿Quién puede solx en una mesa de familiares? Si no incluye mi disfrute semejante show no será gratuito. ¿Quién quiere solx, y en una mesa de familiares?

Abrirse al colectivo lgbt+, aceptarse dentro, es comenzar a entender e incorporar distintas nociones de ser, un sinfín de maneras, y con ello entenderse nunca listx. En el sentido de la metamorfosis que atravesamos, casi constante. Como humanxs la sufrimos todxs, claro, pero como parte del colectivo, unx no sólo puede mutar creciendo, cambiando de ideas, de deseos; sino, cambiar de forma, de identidad completa. Y eso además de ser una oportunidad maravillosa que nos damos y que agradecemos tener el (extrafamiliar y autogestionado) espacio, también acarrea mucho dolor. Porque unx no tiene suficiente con tener que salir del clóset de la heterosexualidad, sino también hacerlo del binarismo, de la heteronorma, del género único y solo. Perdón si te confundo queriendo muchas cosas a la vez.

Podemos decirnos que las etiquetas no son necesarias, que no necesitamos explicarnos. También podemos decirnos que lo que no se nombra no existe, pero ¿qué sucede cuando nombrarse significa reducirse a un binomio obsoleto, a lugares que nos quedan chicos y que no tienen tiempo para nuestras infinitas complejidades?

Nombrarnos es difícil. Cuesta, da dolor, traducirse es laberíntico; estamos hartxs de buscar y buscar las palabras y conceptos para que el destinatario entienda, no solo nuestro mensaje, sino su significancia, su importancia, que lo respete, e idealmente lo aplique en su cotidianidad.

Es necesario y urgente, porque no puede seguir costándonos tanto trabajo, vínculos, energía, oportunidades, el hecho de existir. Y como parte fundamental de eso, explicarle a otrx nuestra existencia, para que la mire como algo ajeno y lejano, que pasa de vez en cuando en su ciudad, en vez de convivir con eso. La naturaleza de ser extraterrestre es demasiado rica como para tener consecuencias tan amargas.

¿Cuántas traducciones podemos aguantar cuando nuestro entorno lo requiere? ¿Hasta dónde queremos explicar? Porque fingir normalidad ya no podemos.

¿Qué estamos dispuestxs a perder a costa de estas traducciones que pareciéramos deberle a alguien? Porque cuando no son traducciones, son silencios. Y volvemos a no aparecer. Porque si no somos nosotrxs mismxs, nadie nos menciona, aunque todavía no sepamos con qué vocal, pronombre o consonante.

(...) No sé qué vocales me pertenecen porque todo lo que puedo pronunciar viene pegado a un montón de performances que no tengo ganas de jugar. Solo quiero jugar a esta, la de lo impronunciable. La del vestido y a veces lo inhumano. Lo que se caga en lo antropomórfico. Ser una cosa, lo cualquiera. Derecho a ser lo que no sirve para nada, lo inútil, lo cualquiera, la barrabasada, el pañuelito waskero. Ahí donde descansa el verdadero e inservible sentido de las cosas yo sueno; en lo que no se puede nombrar (...)

Dijo la compañera Patricix Ruiz en su "Antígonx Impronunciable".

Ayudándome sin querer a concluir este texto en el que me pregunto si nombrarme, o cómo hacerlo. La respuesta por ahora no existe. Al contrario de mí y la tropa espacial que me acompaña, confirmando que somos más tangibles que nunca.

Si llegaste hasta acá es porque buscás historias locales, ayudanos a seguir contándotelas. SUMATE A EN|COMUNIDAD.


COMPARTE TU OPINION | DEJANOS UN COMENTARIO

Los comentarios publicados son de exclusiva responsabilidad de sus autores y las consecuencias derivadas de ellos pueden ser pasibles de sanciones legales.

PAIS

PAIS. Luz, nafta, alquileres, prepagas y más: uno por uno los aumentos de julio

Varios servicios subirán en las próximas horas, lo que le mete presión a la inflación del séptimo mes del año.

30 de junio de 2025

EFEMERIDES EFEMERIDES

EFEMERIDES. Paso en Azul un 30 de junio

30 de junio de 2025

REELECCIÓN INDEFINIDA . "El quórum para el tratamiento del proyecto lo dimos 45 senadores"

mask

EN CUMPLIMIENTO DE LA ORDENANZA Nº 5063. Más de veinte barrios azuleños tienen nuevas comisiones vecinales

mask
Presentación del nuevo libro   de Victoria Ponce en La Criba
EL PRÓXIMO SÁBADO A LAS 19

Presentación del nuevo libro de Victoria Ponce en La Criba

30 de junio de 2025

Un "salto al vacío" que hizo historia  en la sanidad animal y humana
LOS 50 AÑOS DE LABORATORIO AZUL

Un "salto al vacío" que hizo historia en la sanidad animal y humana

29 de junio de 2025

La gira de las mil voces
ENTREVISTA A ARIEL TARICO

La gira de las mil voces

29 de junio de 2025


EFEMERIDES. Pasó en Azul un 29 de junio

mask

IMPORTANTE DESARROLLO INMOBILIARIO . "La riqueza arquitectónica de esa esquina es muy grande"

mask
ENTREVISTA CON INTEGRANTES DE UPPO

Piden al gobierno bonaerense que reglamente la Ley de Oncopediatría

29 de junio de 2025

REGIONAL FEMENINO

San José ganó, pero no le alcanzó

29 de junio de 2025

//