Una serie de allanamientos llevados a cabo en el marco de la investigación por el robo ocurrido días atrás en el Museo Criollo “Beato Pereyra” de esta ciudad derivó en el hallazgo y posterior secuestro de elementos sustraídos durante lo que había sido aquel ilícito, informaron voceros de seguridad ligados a las realizaciones de estos procedimientos.

Además, durante los mismos, se secuestraron otras cosas que podrían estar vinculadas con más ilícitos, lo que dio lugar al inicio de nuevas investigaciones penales.

La causa que se está instruyendo por el robo en ese museo -ubicado en cercanías al Lago Güemes y a punto de cumplir cinco años desde que los hermanos Juan y Julio Pereyra lo crearon- se encuentra radicada en la UFI 17 perteneciente al Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil con sede en la calle Colón de esta ciudad.

De acuerdo con lo señalado ayer a EL TIEMPO por voceros de esa Fiscalía que conduce Mariela Viceconte, como presuntos autores del ilícito figuran menores de edad.

Contando con órdenes emanadas desde el Juzgado de Garantías del Joven, fueron un total de cuatro los allanamientos realizados; mientras que en otra vivienda señalada como objetivo en esta investigación penal los policías de la Seccional Primera que participaron en ese procedimiento ingresaron contando con la anuencia de su propietario.

Allegados al museo donde este robo se registró durante las primeras horas del pasado día 20 de noviembre indicaron ayer a EL TIEMPO que entre las piezas recuperadas en los allanamientos figuraron una escopeta, un revólver, una daga y dos cuchillos.

Además, se informó que en sede policial aún permanecían en carácter de incautados otros elementos, los cuales uno de los propietarios del Museo Criollo también había reconocido como parte de la colección perteneciente a ese espacio, dedicado a albergar diferentes piezas relacionadas con la historia de Azul.

Los allanamientos

Durante el transcurso de la semana que pasó los policías de la Seccional Primera realizaron estos procedimientos, que arrojaron resultados positivos para la investigación penal iniciada tras la denuncia radicada días antes por ese robo ocurrido en el Museo Criollo.

De acuerdo con lo informado, uno de los allanamientos tuvo como objetivo una chacra ubicada sobre la Avenida República de Italia de este medio, donde se hallaron e incautaron dos escopetas calibre 16 “sin numeración ni marca”, “monedas antiguas varias”, billetes, un candelabro, medallas y un “sello antiguo criollo”.

En ese establecimiento rural, además, se recogieron quince cartuchos “intactos” calibre 16, una motosierra, una garrafa, una batería y una moto.

En cuanto al rodado, al ser cursado sus datos se comprobó que el número de chasis no se correspondía con el del motor que tenía colocado.

Los hallazgos de esos otros elementos referidos se tradujeron en el inicio de una investigación penal caratulada como averiguación de ilícito.

Además, mientras se realizaba el procedimiento los policías aprehendieron a un adolescente menor de edad por el delito de atentado a la autoridad, situación por la que se le dio intervención a la Fiscalía Perteneciente al Fuero de Responsabilidad Penal Juvenil.

Una casa situada sobre la prolongación Sur de la calle Prat también había sido allanada en el marco de la investigación penal que se está llevando adelante por el robo en el Museo Criollo. En ese lugar se incautó un aire comprimido antiguo “sin marca ni numeración”.

Otro inmueble, ubicado sobre la Calle 63, en Villa Piazza, también fue allanado. En ese domicilio se secuestró un motor perteneciente a una motocicleta de 110 cc, lo cual dio lugar al inicio de otro sumario penal por averiguación de ilícito.

En ese mismo barrio, en una casa que está sobre la Calle 104, se realizó el cuarto de los allanamientos, que se tradujo en los hallazgos y posteriores secuestros de varias herramientas cuyo origen se trata de establecer, ante la sospecha de que también serían de procedencia ilícita.

En tanto, también en Villa Piazza, pero en este caso contando con la anuencia de su morador, los policías se hicieron presentes en una vivienda situada sobre la Calle 97.

Allí se procedió a los recogimientos de una escopeta calibre 16 “sin numeración y marca visible”, billetes antiguos de moneda argentina, un revólver “inerte” calibre 38, un cuchillo de alpaca con su funda y una daga antigua con mango de hierro, “tipo facón con vaina de cuero”, se indicó.

Voceros policiales informaron también que las piezas incautadas en estos procedimientos habían sido reconocidas por los propietarios del museo donde este robo se había registrado días atrás.

El legado histórico de Azul, robado

En horas de la mañana del pasado 20 de noviembre, aquel ilícito ocurrido en el Museo Criollo “Beato Pereyra” había sido denunciado en la sede de la comisaría primera local.

Ese día, una vez que los empleados llegaron al museo ubicado en Villa Fidelidad se constató que sujetos que -se presume- son menores de edad cometieron el ilícito.

Después de dañar un alambrado perimetral, durante las primeras horas de ese miércoles ya referido delincuentes ingresaron a cometer este robo, que implicó que también los autores del hecho violentaran una ventana por la que se metieron al interior del Museo Criollo.

Armas de fuego cortas y largas, cuchillos, dagas y facones, una rastra de oro y plata, un reloj antiguo de bolsillo y una colección de billetes habían sido las piezas sustraídas durante el ilícito, la mayoría de las cuales se fueron recuperando en los allanamientos realizados durante el transcurso de la semana anterior.